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Durante semanas, Sugarplum, una perrita mayor de Carolina del Norte, Estados Unidos, estuvo sola en una casa vacía, rodeada por el silencio y la ausencia. Su familia, con quien compartía cada día de su vida, ya no estaba. No había voz que la llamara, ni manos que la acariciaran y estaba completamente desamparada, sin comida.
El refugio Brother Wolf Animal Rescue, en Asheville, Carolina del Norte, relató esta tragedia que calificaron como “inimaginable”. “Nos resulta imposible imaginar el miedo, el pánico y la confusión que debe haber sentido durante tanto tiempo, esperando que alguien la recordara, que se preocupara por ella”, escribieron en una publicación de Facebook, al compartir la historia de esta valiente perrita mayor.
Aunque no se conocen con precisión los detalles de lo sucedido, el refugio confirmó que Sugarplum había permanecido en la casa durante semanas después del fallecimiento de su familia. Ahora, después de haber vivido un abandono que parecía no tener fin, Sugarplum está recibiendo el cuidado y el amor que tanto necesitaba.
Tras ser acogida en un refugio local, fue trasladada a Brother Wolf Animal Rescue, donde rápidamente encontraron para ella una familia de acogida que la ayuda a sanar mientras espera ser adoptada. Este refugio, que aún se recupera de los daños causados por el huracán Helene, reafirma su compromiso con los animales necesitados, dándoles una nueva oportunidad de vivir con dignidad y afecto.
El caso de Sugarplum es un recordatorio conmovedor de la resiliencia de los animales y de la importancia de la empatía en momentos de adversidad. Para ella, los días oscuros quedaron atrás, y un futuro lleno de esperanza empieza a abrirse camino.
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