Magnate y multimillonario indio murió y dejó fortuna a su perro Tito
Ratan Tata, el dueño de la compañía Tata Motors, especificó en su testamento que quería “cuidados ilimitados” para su perro Tito, una vez él hubiera fallecido.
Ratan Tata, el empresario indio que dirigió el grupo Tata Motors, una empresa dedicada a la fabricación de automóviles de pasajeros, vehículos comerciales, acero, retail y servicios de IT, falleció el pasado 9 de octubre a los 86 años, debido a complicaciones de salud relacionadas con su edad, según informó su propia compañía en una nota de prensa.
El fallecimiento del magnate, conocido por su liderazgo en el grupo Tata, conmocionó a toda la India. Ratan Tata no solo era conocido por su impacto en los negocios, sino también por su compromiso con la filantropía y el desarrollo social del país. El miércoles por la noche, el primer ministro Narendra Modi encabezó los homenajes que se multiplicaron en todo el país, destacando la integridad personal de Ratan Tata y su legado más allá del ámbito empresarial. Modi lo describió como un “líder empresarial visionario, alma compasiva y ser humano extraordinario”, resaltando su labor en la promoción de la educación, la atención sanitaria y el bienestar animal.
De acuerdo con The New York Times, el patrimonio total del multimillonario y filántropo asciende a los 109 millones de euros, dinero que beneficiara en gran medida a Tito, un perro que acompañó a Tata hasta el final de su vida. En su testamento, recientemente revelado, el magnate estipuló que parte de su fortuna sería para el can, a quien adoptó hace cinco o seis años tras la muerte de su anterior mascota llamada igual, con la petición de que este recibiera “cuidados ilimitados” cuando él ya no estuviera.
De igual modo, Tata también ha dejado parte de su herencia a su mayordomo y asistente general, Konar Subbiah, y a su cocinero personal, Rajan Shaw, reconociendo así sus años de servicio incondicional y dedicación. Cabe aclarar que el hombre de origen indio nunca se casó ni tuvo hijos.
Esta no es la primera vez que un millonario opta por incluir a su mascota en su testamento. El diseñador de moda Karl Lagerfeld, quien murió en el 2019 y quien tampoco se casó ni tuvo descendencia, incluyó a su gata Choupette entre los beneficiarios de su fortuna, que rondaba los 200 millones de euros.
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Ratan Tata, el empresario indio que dirigió el grupo Tata Motors, una empresa dedicada a la fabricación de automóviles de pasajeros, vehículos comerciales, acero, retail y servicios de IT, falleció el pasado 9 de octubre a los 86 años, debido a complicaciones de salud relacionadas con su edad, según informó su propia compañía en una nota de prensa.
El fallecimiento del magnate, conocido por su liderazgo en el grupo Tata, conmocionó a toda la India. Ratan Tata no solo era conocido por su impacto en los negocios, sino también por su compromiso con la filantropía y el desarrollo social del país. El miércoles por la noche, el primer ministro Narendra Modi encabezó los homenajes que se multiplicaron en todo el país, destacando la integridad personal de Ratan Tata y su legado más allá del ámbito empresarial. Modi lo describió como un “líder empresarial visionario, alma compasiva y ser humano extraordinario”, resaltando su labor en la promoción de la educación, la atención sanitaria y el bienestar animal.
De acuerdo con The New York Times, el patrimonio total del multimillonario y filántropo asciende a los 109 millones de euros, dinero que beneficiara en gran medida a Tito, un perro que acompañó a Tata hasta el final de su vida. En su testamento, recientemente revelado, el magnate estipuló que parte de su fortuna sería para el can, a quien adoptó hace cinco o seis años tras la muerte de su anterior mascota llamada igual, con la petición de que este recibiera “cuidados ilimitados” cuando él ya no estuviera.
De igual modo, Tata también ha dejado parte de su herencia a su mayordomo y asistente general, Konar Subbiah, y a su cocinero personal, Rajan Shaw, reconociendo así sus años de servicio incondicional y dedicación. Cabe aclarar que el hombre de origen indio nunca se casó ni tuvo hijos.
Esta no es la primera vez que un millonario opta por incluir a su mascota en su testamento. El diseñador de moda Karl Lagerfeld, quien murió en el 2019 y quien tampoco se casó ni tuvo descendencia, incluyó a su gata Choupette entre los beneficiarios de su fortuna, que rondaba los 200 millones de euros.
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