“Mi perro Luca me ayudó a sobrellevar la muerte de mis papás”: José Luis Uribe

Las redes sociales se han convertido en un espacio fundamental, no solo para las personas, sino también para las mascotas. Cada vez es más popular encontrar creadores de contenido que comparten sus experiencias, aprendizajes y consejos a través de las plataformas digitales junto a sus perros y gatos.

José Luis Uribe es un actor y creador de contenido conocido por ser el cuidador de uno de los perros más famosos de Colombia: Luca, un weimaraner de 9 años único, divertido y tierno. Ambos se dedican a compartir su día a día, sus vivencias y sus travesuras en redes sociales, donde han cautivado a miles de usuarios. Quienes observan sus videos y tienen mascotas, se identifican con la forma en la que José Luis trata a su perro. Sus caricias y conversaciones representan la cotidianidad de las familias que tienen un peludo en casa.

¿Cómo llegó Luca a su vida?

Había pasado por la muerte de tres perros, todos habían vivido con mis papás y conmigo en Medellín. La última perrita que tuvimos duró con nosotros 13 o 14 años, hasta que tocó dormirla. Los que hemos tenido perros sabemos que esa es una experiencia durísima. Luego decidí irme a vivir a Bogotá por el tema de la actuación, pero no estaba buscando perro por ningún lado, no estaba en mis planes.

Un fin de semana me fui para la finca de un amigo en Turmequé, Boyacá, y días después la mamá de mi amigo me mandó una foto de Luca por WhatsApp. Tenía un mes y estaba en un costal con sus hermanitos. Ella me dijo: “José Luis, están dando en adopción a estos perritos, ¿te apuntas?”. Yo lo pensé mucho porque tener un perro es una responsabilidad muy grande, ellos necesitan su tiempo y sus gastos. Al final dije: “Vamos a darle la oportunidad” y, con mi pareja, tomamos la decisión de adoptarlo y llamarlo Luca. Eso fue hace nueve años. Muchas personas no lo saben, pero Luca es adoptado.

Antes de la llegada de Luca tuvo que afrontar la pérdida de otras mascotas, ¿cómo fue ese proceso?

Hay algo muy común que nos pasa a los que tenemos mascotas, a mí me llegó a pasar, y es que cuando se nos mueren, nos volvemos egoístas. Decimos: “No quiero más perros, no quiero más animales en mi casa, es muy duro por lo que estoy pasando”. Cuando a mí se me murió la última perrita, llegué a sentir una depresión, un luto y una tristeza muy fuerte. Decía: “¿Qué es este dolor tan grande? No quiero más mascotas”.

Un día estaba en Facebook y me apareció una carta que hablaba justamente de eso, de cómo uno no se puede volver egoísta ante un duelo, porque esa es la ley de la vida, es lo natural. Que no debemos castigarnos a nosotros mismos dejando de aprovechar todo ese amor y compañía que ellos nos brindan. Ahora pienso que en un hogar siempre debe haber una mascota.

¿En qué momentos ha sentido que Luca lo ha salvado?

Tengo una historia que en su momento fue como una tragedia. Mi papá y mi mamá llevaban toda la vida casados. Eran un ejemplo de amor para mí, el más espectacular que pude tener. Mi papá sufrió toda la vida del corazón, mientras que mi mamá siempre muy sana.

Un día a mi mamá le descubren un linfoma no Hodgkin, que es un cáncer en el sistema linfático. En la primera quimioterapia le hacen una cirugía y la internan en UCI. Mi papá entra a verla y cuando sale le da un infarto y se muere. Para mí era una tragedia: mi mamá en UCI y mi papá muerto. No pude hacerle duelo a mi papá por mostrarle fortaleza a mi mamá. Al año llega el covid-19 y se lleva a mi mamá. Fueron muchas emociones fuertes, yo nunca pensé que iba a perder a mis papás tan rápido y tan seguido.

Directa e indirectamente Luca me sacó de esa depresión, de ese hueco oscuro en el que estaba. En mi casa, por más deprimido que estuviera, yo sabía que tenía que sacarlo al parque y jugar con él. En esos momentos volvía ver un poquito la luz, volvía a respirar. Luca fue una terapia para el alma.

En los videos que graba con Luca se siente una conexión profunda entre los dos, ¿cómo logra ese vínculo?

La conexión existe desde el primer momento. Los perros se entregan a uno porque son seres indefensos que dependen de nosotros 100 %. Desde que Luca llegó a mi casa yo le dije: “Te prometo que vas a ser el perro más feliz de la vida y voy a tratar de ser el mejor papá del mundo”. El vínculo se crea desde el primer momento y dura hasta que ellos se van, incluso después.

¿De dónde salió la idea de empezar a crear contenido con Luca?

Un amigo del gimnasio me dijo que generara contenido y empecé a publicar monólogos inventados. Paralelamente, subía videos de conversaciones con Luca, porque yo en la vida real hablo mucho con él. Comencé a darme cuenta de que esos contenidos tenían más alcance, las personas los disfrutaban más, entonces seguí haciéndolos. Todo fue muy espontáneo, muy orgánico. Era yo hablando con Luca.

¿Qué recomendaciones les daría a quienes quieren empezar a generar contenidos en redes sociales con sus mascotas?

Primero, que se quiten la pena. Todos empezamos con un poquito de pena cuando nos ponemos frente a la cámara. Pero lo importante es ser espontáneos, ser uno mismo y mostrar nuestra esencia. Segundo, que haya mucho respeto y amor por los animales en general. Tercero, que los dejen ser, que no los humanicen y no los sometan a ningún tipo de estrés.

¿Qué raza es el perro Luca?

Luca es un perro de raza Braco de Weimar o Weimaraner. Esta es una raza cazadora originaria de Alemania. Los perros weimaranes se caracterizan por ser activos y requieren un alto nivel de actividad física dada su historia de cazador.

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