Polémica en Panamá: perros no podrán ladrar en la noche o multarán a sus dueños
La alcaldesa de Arraiján estableció una multa de 100 dólares para los propietarios de animales domésticos que causen ruido durante la noche.
Un nuevo decreto en un municipio de Panamá ha generado controversia al imponer multas de hasta 100 dólares a los dueños de perros que produzcan ruidos superiores a los 50 decibeles durante la noche.
El decreto firmado por la alcaldesa de Arraiján, Stefany Dayan Peñalba, fue publicado el pasado 31 de octubre y difundido este miércoles por medios locales. En este, se especifica que la sanción se impartirá ante el “ruido en residenciales y/o edificios por animales en los horarios de 6:00 p.m. a 7:00 a.m.” citando como límite permitido los 50 decibeles.
El grupo Defensores de Animales Panamá alertó por su parte que “el ladrido de un perro puede variar de volumen dependiendo del tamaño, la raza y temperamento del animal, pero en general, se estima que los ladridos de perros suelen alcanzar entre los 60 y los 90 decibeles”.
Teniendo en cuenta estos datos, el grupo afirma en sus redes sociales que las condiciones de la alcaldesa no son coherentes, pues hasta el ladrido de un chihuahua sobrepasa el límite.
Esta no es la primera ley que se impone en el municipio donde se multa a los cuidadores de animales. Otras de las faltas que serán sancionadas son la de “no evidenciar el chip, código QR o el medio correspondiente que permita identificar y determinar los datos del animal, sea doméstico o de corral, incluyendo los de su titular”, generando una multa de 500 dólares por animal y la de “no recoger las excretas de los animales a su cargo” lo cual generará al responsable una multa de 100 dólares.
El abogado y diputado panameño, Ernesto Cedeño, dijo en sus redes sociales que el decreto es “ilegal en gran parte”, e hizo un llamado a la Procuraduría de la Administración de Panamá para que imparta cursos sobre gobierno local, ya que la situación se está saliendo de control.
La Comunidad Proteccionista de Animales en Panamá también se pronunció, afirmando que los ladridos son un acto natural, por lo que no se les puede impedir a los perros que lo hagan o pedirles que lo modulen.
Ante la respuesta masiva que tuvo el hecho en redes sociales, la alcaldesa publicó un video donde afirma que han realizado las modificaciones correspondientes para el mejor entendimiento del nuevo decreto.
“¿Cómo se les ocurre que vamos a multar a los perros que ladran? Lo que sí vamos a hacer es multar a las personas que maltratan o abandonan animales”, afirma Peñalba.
El articulado ahora quedará así: “ruido excesivo realizado por animales en cautiverio o abandono permanente o temporal en residenciales y/o edificios, se multará con 100 dólares”.
Por último, Peñalba pidió perdón a los ciudadanos y aseguró que su mandato siempre estará enfocado en el bienestar de los animales.
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Un nuevo decreto en un municipio de Panamá ha generado controversia al imponer multas de hasta 100 dólares a los dueños de perros que produzcan ruidos superiores a los 50 decibeles durante la noche.
El decreto firmado por la alcaldesa de Arraiján, Stefany Dayan Peñalba, fue publicado el pasado 31 de octubre y difundido este miércoles por medios locales. En este, se especifica que la sanción se impartirá ante el “ruido en residenciales y/o edificios por animales en los horarios de 6:00 p.m. a 7:00 a.m.” citando como límite permitido los 50 decibeles.
El grupo Defensores de Animales Panamá alertó por su parte que “el ladrido de un perro puede variar de volumen dependiendo del tamaño, la raza y temperamento del animal, pero en general, se estima que los ladridos de perros suelen alcanzar entre los 60 y los 90 decibeles”.
Teniendo en cuenta estos datos, el grupo afirma en sus redes sociales que las condiciones de la alcaldesa no son coherentes, pues hasta el ladrido de un chihuahua sobrepasa el límite.
Esta no es la primera ley que se impone en el municipio donde se multa a los cuidadores de animales. Otras de las faltas que serán sancionadas son la de “no evidenciar el chip, código QR o el medio correspondiente que permita identificar y determinar los datos del animal, sea doméstico o de corral, incluyendo los de su titular”, generando una multa de 500 dólares por animal y la de “no recoger las excretas de los animales a su cargo” lo cual generará al responsable una multa de 100 dólares.
El abogado y diputado panameño, Ernesto Cedeño, dijo en sus redes sociales que el decreto es “ilegal en gran parte”, e hizo un llamado a la Procuraduría de la Administración de Panamá para que imparta cursos sobre gobierno local, ya que la situación se está saliendo de control.
La Comunidad Proteccionista de Animales en Panamá también se pronunció, afirmando que los ladridos son un acto natural, por lo que no se les puede impedir a los perros que lo hagan o pedirles que lo modulen.
Ante la respuesta masiva que tuvo el hecho en redes sociales, la alcaldesa publicó un video donde afirma que han realizado las modificaciones correspondientes para el mejor entendimiento del nuevo decreto.
“¿Cómo se les ocurre que vamos a multar a los perros que ladran? Lo que sí vamos a hacer es multar a las personas que maltratan o abandonan animales”, afirma Peñalba.
El articulado ahora quedará así: “ruido excesivo realizado por animales en cautiverio o abandono permanente o temporal en residenciales y/o edificios, se multará con 100 dólares”.
Por último, Peñalba pidió perdón a los ciudadanos y aseguró que su mandato siempre estará enfocado en el bienestar de los animales.
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