¿Por qué los perros me ladran y me quieren morder?

Al igual que los humanos, los perros tienen su propia forma de comunicarse, y una de las maneras más comunes es a través de los ladridos. Cuando un canino le ladra, puede estar mostrando diferentes señales, y es importante comprenderlas para saber cómo actuar. Según Sandy Eckstein, profesional de Web MD, estas son algunas de las razones más frecuentes detrás de este comportamiento.

• Territorialidad: una de las razones más comunes para que un perro ladre es la defensa de su territorio. Cuando una persona o un animal ingresa a un área que un canino considera su territorio, eso suele provocar un ladrido excesivo. Este comportamiento puede intensificarse conforme la “amenaza” se acerca, haciendo que el perro se ponga alerta e incluso agresivo.
• Alarma o miedo: algunos peludos ladran como reacción a ruidos extraños o cualquier objeto que los sobresalte. Este tipo de ladridos no siempre ocurre dentro de su territorio, ya que el miedo no está relacionado únicamente con el lugar. Cuando un perro está asustado, generalmente presenta las orejas hacia atrás y la cola entre las patas.
• Aburrimiento o soledad: los perros son animales sociales que necesitan interacción constante. Cuando se sienten solos, ya sea dentro de la casa o en un paseo, pueden ladrar debido al aburrimiento o la tristeza. “Esta es una forma de llamar la atención para aliviar su soledad”, indican en Web MD.
• Saludo o juego: los caninos también ladran de manera amistosa al saludar a personas o a otros animales. Este tipo de ladrido suele ser alegre y se acompaña de movimientos de cola y saltos. Este comportamiento es completamente inofensivo y es una expresión de emoción.
• Búsqueda de atención: otro motivo común para los ladridos es la búsqueda de atención. Cuando un perro quiere algo, como salir, jugar o recibir una golosina, puede ladrar para llamar su atención.
• Ansiedad por separación: los perros que sufren de ansiedad por separación tienden a ladrar de manera excesiva cuando se quedan solos o cuando sienten que su dueño los abandona. Además de ladrar, “pueden mostrar otros comportamientos como caminar de un lado a otro, morder objetos o incluso hacer sus necesidades dentro de la casa“, señalan en el portal web. Es importante que consulte con su médico ante este tipo de comportamientos.
• Ladridos compulsivos: algunos caninos ladran sin un motivo aparente, solo por “oír su propia voz”. Este comportamiento repetitivo puede incluir acciones como correr en círculos o a lo largo de una valla, y es conocido como ladridos compulsivos.

Es importante aclarar que no todos los ladridos van acompañados de una intención de morder. Sin embargo, si se encuentra en una situación donde un perro podría mostrar comportamientos agresivos, World Animal Protection ofrece algunas recomendaciones para prevenir mordeduras y actuar de la mejor forma:

1. No moleste ni asuste a un perro, especialmente cuando esté comiendo, con sus cachorros o juguetes, o cuando se encuentre detrás de rejas, dentro de un carro, dormido o enfermo.
2. Aléjese si el perro está asustado o enojado. (Un perro enojado mostrará los dientes, mientras que un perro asustado intentará huir).
3. Siempre pida permiso al dueño antes de acercarse o tocar a un perro. Es fundamental supervisar a los niños cuando estén cerca de los caninos y enseñarles a acercarse con calma, permitiendo que el perro huela su mano antes de acariciarlos.
4. Si un perro llega a morderle, lave bien la herida y acuda al centro de salud más cercano para recibir atención médica adecuada.

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Al igual que los humanos, los perros tienen su propia forma de comunicarse, y una de las maneras más comunes es a través de los ladridos. Cuando un canino le ladra, puede estar mostrando diferentes señales, y es importante comprenderlas para saber cómo actuar. Según Sandy Eckstein, profesional de Web MD, estas son algunas de las razones más frecuentes detrás de este comportamiento.

• Territorialidad: una de las razones más comunes para que un perro ladre es la defensa de su territorio. Cuando una persona o un animal ingresa a un área que un canino considera su territorio, eso suele provocar un ladrido excesivo. Este comportamiento puede intensificarse conforme la “amenaza” se acerca, haciendo que el perro se ponga alerta e incluso agresivo.
• Alarma o miedo: algunos peludos ladran como reacción a ruidos extraños o cualquier objeto que los sobresalte. Este tipo de ladridos no siempre ocurre dentro de su territorio, ya que el miedo no está relacionado únicamente con el lugar. Cuando un perro está asustado, generalmente presenta las orejas hacia atrás y la cola entre las patas.
• Aburrimiento o soledad: los perros son animales sociales que necesitan interacción constante. Cuando se sienten solos, ya sea dentro de la casa o en un paseo, pueden ladrar debido al aburrimiento o la tristeza. “Esta es una forma de llamar la atención para aliviar su soledad”, indican en Web MD.
• Saludo o juego: los caninos también ladran de manera amistosa al saludar a personas o a otros animales. Este tipo de ladrido suele ser alegre y se acompaña de movimientos de cola y saltos. Este comportamiento es completamente inofensivo y es una expresión de emoción.
• Búsqueda de atención: otro motivo común para los ladridos es la búsqueda de atención. Cuando un perro quiere algo, como salir, jugar o recibir una golosina, puede ladrar para llamar su atención.
• Ansiedad por separación: los perros que sufren de ansiedad por separación tienden a ladrar de manera excesiva cuando se quedan solos o cuando sienten que su dueño los abandona. Además de ladrar, “pueden mostrar otros comportamientos como caminar de un lado a otro, morder objetos o incluso hacer sus necesidades dentro de la casa“, señalan en el portal web. Es importante que consulte con su médico ante este tipo de comportamientos.
• Ladridos compulsivos: algunos caninos ladran sin un motivo aparente, solo por “oír su propia voz”. Este comportamiento repetitivo puede incluir acciones como correr en círculos o a lo largo de una valla, y es conocido como ladridos compulsivos.

Es importante aclarar que no todos los ladridos van acompañados de una intención de morder. Sin embargo, si se encuentra en una situación donde un perro podría mostrar comportamientos agresivos, World Animal Protection ofrece algunas recomendaciones para prevenir mordeduras y actuar de la mejor forma:

1. No moleste ni asuste a un perro, especialmente cuando esté comiendo, con sus cachorros o juguetes, o cuando se encuentre detrás de rejas, dentro de un carro, dormido o enfermo.
2. Aléjese si el perro está asustado o enojado. (Un perro enojado mostrará los dientes, mientras que un perro asustado intentará huir).
3. Siempre pida permiso al dueño antes de acercarse o tocar a un perro. Es fundamental supervisar a los niños cuando estén cerca de los caninos y enseñarles a acercarse con calma, permitiendo que el perro huela su mano antes de acariciarlos.
4. Si un perro llega a morderle, lave bien la herida y acuda al centro de salud más cercano para recibir atención médica adecuada.

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