Plazas de toros “deben ser para la cultura y para celebrar la vida”: alcalde de Duitama
En medio del debate que busca prohibir las corridas de toros en Colombia, los alcaldes de Duitama y Manizales tuvieron un espacio para contar sus experiencias, reflexiones y sugerencias frente a esta iniciativa. ¿Qué dijeron?
Jimena Delgado Díaz
María Hernández
En medio del transcurso del último y cuarto debate con el que se espera determinar si se prohíben o no las corridas de toros en Colombia, se escucharon las intervenciones del alcalde de Manizales y el de Duitama, quienes compartieron sus posturas y experiencias frente a esta práctica.
A continuación, recopilamos sus testimonios:
Jorge Eduardo Rojas, alcalde de Manizales
Yo no vengo a hablarles del animalismo, porque también siento una profunda necesidad de proteger a los animales. Vengo a hablar de mi ciudad, de la cultura de mi ciudad, de las tradiciones de Manizales.
La primera corrida que hubo en Manizales se efectuó en 1897, en un lugar que se llamó El circo de toros. Sé que no es fácil entender a una comunidad y una cultura que goce de este tipo de eventos, pero hay comunidades que, culturalmente, así lo han sentido.
En 1930 se construyeron varias plazas de toros en Manizales que se llamaron Plazas de toros y Circos de toros. El primer plan maestro de obras públicas de nuestra ciudad, que fue hecho en 1945, ya tenía un plan para construir una plaza de toros y es así como se construyó la Monumental Plaza de Toros de Manizales. El 1 de diciembre de 1952, ya Manizales quería tener la Feria de Manizales y se decretó la creación de nuestra feria y, en ese mismo decreto, se creó la Feria Taurina de Manizales.
Lo que les quiero decir es que esto no es de ayer, esto, de verdad, es de tradición y cultura. Respeto profundamente a quienes no están de acuerdo con la tauromaquia. (...) Pero también deben entender lo que pasa por la sangre, por la tradición y por la cultura de una ciudad como Manizales, donde hay mucha gente que no está de acuerdo con los toros, pero hay miles, cientos de miles que sí están de acuerdo con ellos.
Les pido que no se les pase por alto una cosa: en el 2006, se aprobó una ley de la república, la ley 1025, que declaró patrimonio cultural de la Nación a la Feria de Manizales y a la Feria Taurina de Manizales.
De verdad y de corazón, tienen que mirar lo que siente cada región. Legislar es muy difícil, lo entiendo y lo respeto, pero hay que mirar lo que siente cada región y no solo lo que sienten las personas. Por otra parte, esto sería un golpe durísimo para la economía de mi ciudad. Los toros mueven miles de empleos, y muchos van a decir que no, pero la realidad es que sí y se los digo con conocimiento de causa. (...) Se generan cerca de 1.500 empleos directos, pero cada empleo directo genera 5 empleos indirectos. En nuestra feria hay cosas más importantes, y es que son cientos de vendedores de mazorcas, sombreros, carrieles y de ponchos que se hacen alrededor de la plaza de toros, que no viven un mes, dos meses, que viven hasta un año de esa semana de toros.
No es fácil hacer una reconversión económica, yo sé que el proyecto de acuerdo trae una propuesta. Pero, representantes, si llega a pasar, les pido de corazón que den la defensa por completo de mi gente que va a quedar sin trabajo y sin recursos, pero también, y aparte del tema económico, les pido que reconozcan la cultura del manizaleño, tanto del que no goza de los toros como el que sí lo goza, que, con toda seguridad, es la mayoría.
José Luis Bohórquez, alcalde de Duitama
Mi ciudad queda en Boyacá y es la segunda ciudad en importancia del departamento de Boyacá.
Tenemos una plaza de toros que se llama César Rincón, muchas veces, en la historia, fue famosa la forma en que salían las faenas y toda la parte del conocimiento que había en esas prácticas. En el año 1993, se consolidó nuestra plaza de toros y siguió todo un proceso, como lo dice el anterior alcalde (Manizales), con una economía, no solamente por ropas, prendas, comidas, sino por una logística incluso.
Duitama, más allá de las orientaciones ideológicas de los gobernantes de turno, tomó una decisión desde el año 2015. Con todo el furor que tenía esa plaza se empezó a reducir la práctica cultural de las corridas de toros. Esa plaza de toros, hoy, desde hace algunos años, se volvió la Plaza de Todos, en honor a un maestro de la música, y esa plaza en honor a la música se reconvirtió y funciona para escenarios de la cultura y deporte.
Y no lo hizo un gobierno de izquierda, sino liberal. Nosotros, que ahora llegamos al gobierno de la ciudad de Duitama, en el plan de desarrollo, decimos que “vamos por más”. No solo se trata de satanizar las discusiones, se trata de que hay cambios, claro que la económica se afecta, ya lo vivimos. Pero siempre las transformaciones tienen costos y ¿saben cómo las asumimos en Duitama? En las ferias de emprendimientos permanentes se permite que todas las personas que dependían de las mazorcas, sombreros, que dependen de un montón de comidas, participen y ahora tienen mayor enfoque diferencial para participar en ferias.
Siempre los cambios tendrán temores y costes económicos. ¿En qué momento en la historia de la humanidad no lo ha habido? Pero, créanme, que el rigor no puede ser económico.
Los invitamos a que caminen los senderos para modificar nuestras prácticas sociales y que nunca más una práctica que trae sangre se siga permitiendo en corridas o en lugares que deben ser para la cultura y para celebrar la vida y la humanidad.
Aquí puede ver la transmisión completa:
En medio del transcurso del último y cuarto debate con el que se espera determinar si se prohíben o no las corridas de toros en Colombia, se escucharon las intervenciones del alcalde de Manizales y el de Duitama, quienes compartieron sus posturas y experiencias frente a esta práctica.
A continuación, recopilamos sus testimonios:
Jorge Eduardo Rojas, alcalde de Manizales
Yo no vengo a hablarles del animalismo, porque también siento una profunda necesidad de proteger a los animales. Vengo a hablar de mi ciudad, de la cultura de mi ciudad, de las tradiciones de Manizales.
La primera corrida que hubo en Manizales se efectuó en 1897, en un lugar que se llamó El circo de toros. Sé que no es fácil entender a una comunidad y una cultura que goce de este tipo de eventos, pero hay comunidades que, culturalmente, así lo han sentido.
En 1930 se construyeron varias plazas de toros en Manizales que se llamaron Plazas de toros y Circos de toros. El primer plan maestro de obras públicas de nuestra ciudad, que fue hecho en 1945, ya tenía un plan para construir una plaza de toros y es así como se construyó la Monumental Plaza de Toros de Manizales. El 1 de diciembre de 1952, ya Manizales quería tener la Feria de Manizales y se decretó la creación de nuestra feria y, en ese mismo decreto, se creó la Feria Taurina de Manizales.
Lo que les quiero decir es que esto no es de ayer, esto, de verdad, es de tradición y cultura. Respeto profundamente a quienes no están de acuerdo con la tauromaquia. (...) Pero también deben entender lo que pasa por la sangre, por la tradición y por la cultura de una ciudad como Manizales, donde hay mucha gente que no está de acuerdo con los toros, pero hay miles, cientos de miles que sí están de acuerdo con ellos.
Les pido que no se les pase por alto una cosa: en el 2006, se aprobó una ley de la república, la ley 1025, que declaró patrimonio cultural de la Nación a la Feria de Manizales y a la Feria Taurina de Manizales.
De verdad y de corazón, tienen que mirar lo que siente cada región. Legislar es muy difícil, lo entiendo y lo respeto, pero hay que mirar lo que siente cada región y no solo lo que sienten las personas. Por otra parte, esto sería un golpe durísimo para la economía de mi ciudad. Los toros mueven miles de empleos, y muchos van a decir que no, pero la realidad es que sí y se los digo con conocimiento de causa. (...) Se generan cerca de 1.500 empleos directos, pero cada empleo directo genera 5 empleos indirectos. En nuestra feria hay cosas más importantes, y es que son cientos de vendedores de mazorcas, sombreros, carrieles y de ponchos que se hacen alrededor de la plaza de toros, que no viven un mes, dos meses, que viven hasta un año de esa semana de toros.
No es fácil hacer una reconversión económica, yo sé que el proyecto de acuerdo trae una propuesta. Pero, representantes, si llega a pasar, les pido de corazón que den la defensa por completo de mi gente que va a quedar sin trabajo y sin recursos, pero también, y aparte del tema económico, les pido que reconozcan la cultura del manizaleño, tanto del que no goza de los toros como el que sí lo goza, que, con toda seguridad, es la mayoría.
José Luis Bohórquez, alcalde de Duitama
Mi ciudad queda en Boyacá y es la segunda ciudad en importancia del departamento de Boyacá.
Tenemos una plaza de toros que se llama César Rincón, muchas veces, en la historia, fue famosa la forma en que salían las faenas y toda la parte del conocimiento que había en esas prácticas. En el año 1993, se consolidó nuestra plaza de toros y siguió todo un proceso, como lo dice el anterior alcalde (Manizales), con una economía, no solamente por ropas, prendas, comidas, sino por una logística incluso.
Duitama, más allá de las orientaciones ideológicas de los gobernantes de turno, tomó una decisión desde el año 2015. Con todo el furor que tenía esa plaza se empezó a reducir la práctica cultural de las corridas de toros. Esa plaza de toros, hoy, desde hace algunos años, se volvió la Plaza de Todos, en honor a un maestro de la música, y esa plaza en honor a la música se reconvirtió y funciona para escenarios de la cultura y deporte.
Y no lo hizo un gobierno de izquierda, sino liberal. Nosotros, que ahora llegamos al gobierno de la ciudad de Duitama, en el plan de desarrollo, decimos que “vamos por más”. No solo se trata de satanizar las discusiones, se trata de que hay cambios, claro que la económica se afecta, ya lo vivimos. Pero siempre las transformaciones tienen costos y ¿saben cómo las asumimos en Duitama? En las ferias de emprendimientos permanentes se permite que todas las personas que dependían de las mazorcas, sombreros, que dependen de un montón de comidas, participen y ahora tienen mayor enfoque diferencial para participar en ferias.
Siempre los cambios tendrán temores y costes económicos. ¿En qué momento en la historia de la humanidad no lo ha habido? Pero, créanme, que el rigor no puede ser económico.
Los invitamos a que caminen los senderos para modificar nuestras prácticas sociales y que nunca más una práctica que trae sangre se siga permitiendo en corridas o en lugares que deben ser para la cultura y para celebrar la vida y la humanidad.
Aquí puede ver la transmisión completa: