Turista muere aplastado por un elefante: “no hizo caso a advertencias”
El hombre español de 43 años murió después de ignorar las precauciones de seguridad mientras tomaba fotografías a una manada de elefantes en un safari en Sudáfrica.
Ana Vega
El fin de semana pasado, un hombre español perdió la vida tras ser aplastado por un elefante que fotografiaba en un recorrido por el Parque Nacional Pilanesberg en la Provincia del Noroeste de Sudáfrica.
El hombre que recorría el parque en su carro particular con tres personas más, una de ellas su prometida, bajó del auto para tomarle fotos a una manada de 6 elefantes, tres adultos y tres crías, que se encontraban cerca del lugar, haciendo caso omiso a las advertencias de seguridad del parque.
Según La Vanguardia, la víctima fue Carlos Luna, un hombre de 43 años originario de Zaragoza, España, quien, a pesar de la insistencia de sus compañeras de viaje y de las advertencias de seguridad, salió de su vehículo y se acercó a pie hacia los elefantes. Fue entonces cuando la madre de la manada lo atacó, sintiéndose amenazada por su presencia cercana. Testigos del incidente relataron que Luna fue golpeado y pisoteado por el resto de la manada mientras intentaba escapar.
Pieter Nel, director de conservación de la Autoridad de Turismo y Parques Provinciales del Noroeste, explicó en un comunicado a la AFP, que la matriarca de la manada reaccionó defensivamente cuando vio acercarse al hombre. “Es normal que los elefantes defiendan a sus crías” añadió.
El funcionario también advirtió sobre la importancia de seguir precauciones de seguridad al visitar este tipo de lugares: “Creo que en algunos casos la gente no es consciente de los peligros de los parques. Debemos recordar que estamos entrando en una zona salvaje. Es una reserva natural en todo su contexto. Y los animales que hay allí viven en un hábitat natural”.
Luego del ataque, los elefantes se alejaron inmediatamente del lugar sin agredir a las otras personas que se encontraban en los vehículos cercanos y finalmente desaparecieron entre los arbustos. Actualmente, el caso de Luna está bajo investigación por las autoridades policiales de Sudáfrica.
Con este incidente se subraya la importancia de seguir estrictamente las normas establecidas durante los safaris y visitas a parques naturales, como mantener una distancia adecuada de los animales y obedecer las indicaciones de los guías y guardaparques. Estas medidas son diseñadas para garantizar la seguridad tanto de los visitantes como de la fauna silvestre que habita en estos entornos naturales.
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El fin de semana pasado, un hombre español perdió la vida tras ser aplastado por un elefante que fotografiaba en un recorrido por el Parque Nacional Pilanesberg en la Provincia del Noroeste de Sudáfrica.
El hombre que recorría el parque en su carro particular con tres personas más, una de ellas su prometida, bajó del auto para tomarle fotos a una manada de 6 elefantes, tres adultos y tres crías, que se encontraban cerca del lugar, haciendo caso omiso a las advertencias de seguridad del parque.
Según La Vanguardia, la víctima fue Carlos Luna, un hombre de 43 años originario de Zaragoza, España, quien, a pesar de la insistencia de sus compañeras de viaje y de las advertencias de seguridad, salió de su vehículo y se acercó a pie hacia los elefantes. Fue entonces cuando la madre de la manada lo atacó, sintiéndose amenazada por su presencia cercana. Testigos del incidente relataron que Luna fue golpeado y pisoteado por el resto de la manada mientras intentaba escapar.
Pieter Nel, director de conservación de la Autoridad de Turismo y Parques Provinciales del Noroeste, explicó en un comunicado a la AFP, que la matriarca de la manada reaccionó defensivamente cuando vio acercarse al hombre. “Es normal que los elefantes defiendan a sus crías” añadió.
El funcionario también advirtió sobre la importancia de seguir precauciones de seguridad al visitar este tipo de lugares: “Creo que en algunos casos la gente no es consciente de los peligros de los parques. Debemos recordar que estamos entrando en una zona salvaje. Es una reserva natural en todo su contexto. Y los animales que hay allí viven en un hábitat natural”.
Luego del ataque, los elefantes se alejaron inmediatamente del lugar sin agredir a las otras personas que se encontraban en los vehículos cercanos y finalmente desaparecieron entre los arbustos. Actualmente, el caso de Luna está bajo investigación por las autoridades policiales de Sudáfrica.
Con este incidente se subraya la importancia de seguir estrictamente las normas establecidas durante los safaris y visitas a parques naturales, como mantener una distancia adecuada de los animales y obedecer las indicaciones de los guías y guardaparques. Estas medidas son diseñadas para garantizar la seguridad tanto de los visitantes como de la fauna silvestre que habita en estos entornos naturales.
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