Así se defendió Bolsonaro frente a los actos golpistas en contra de Lula da Silva
Su supuesta participación en la asonada del 8 de enero, cuando unos de sus seguidores irrumpieron en la sede de la Presidencia, el Legislativo y el Supremo Tribunal Federal, llevaron a Jair Bolsonaro a comparecer ante la Policía Federal de Brasil. El exmandatario ha negado sistemáticamente su implicación en los hechos.
Jair Bolsonaro aseguró este miércoles que publicó de forma “accidental” un video que cuestionaba la legitimidad de las elecciones presidenciales de 2022, al comparecer ante la Policía Federal para declarar sobre la asonada que llevaron a cabo sus partidarios en Brasilia en enero pasado.
El expresidente de Brasil es investigado por su presunto papel como autor intelectual e instigador de los disturbios del 8 de enero, cuando miles de sus seguidores invadieron las sedes de los tres poderes del Estado en la capital brasileña, en un intento de tumbar al presidente Lula da Silva, quien había asumido la Presidencia siete días antes.
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El exmandatario ultraderechista (2019-2022), que había salido de Brasil rumbo a Estados Unidos el 30 de diciembre, dos días antes de la entrega de la banda presidencial a su contrincante, se encontraba en Orlando, Florida, el día de los ataques al Supremo Tribunal Federal (STF), al Congreso y al Palacio del Planalto. Él ha negado sistemáticamente su implicación en los hechos vandálicos, por los que hubo más de 1.800 detenidos.
Su supuesta participación en la asonada es investigada desde el 13 de enero por decisión de un juez del Supremo. La Fiscalía había pedido que lo incluyeran en la pesquisa, citando un video que el exmandatario subió a sus redes sociales el 10 de enero, cuestionando el resultado electoral de octubre, cuando perdió la reelección contra Lula.
El video reproducía la declaración de un fiscal que decía que el líder de los trabajadores “no fue electo por el pueblo”, sino por la justicia electoral y suprema, repitiendo, sin pruebas, los cuestionamientos sobre la transparencia de los comicios, una constante de Bolsonaro en 2022.
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El abogado Paulo Bueno, que defiende a Bolsonaro, dijo que era posible que el expresidente se encontrara bajo el efecto de unos medicamentos cuando compartió la publicación, ya que había sido hospitalizado poco antes. “La publicación fue tan accidental que no hizo ningún comentario posterior y la borró poco después”, explicó.
Por su parte, el exsecretario de Comunicación y actual asesor de Bolsonaro, Fabio Wajngarten, dijo que “en la noche del 8 de enero” el expresidente “repudió todos los hechos lamentables ocurridos en Brasilia”, y después de la elección, “dio vuelta su página política”. Bolsonaro llegó en un auto polarizado a la sede policial, donde estuvo más de dos horas, y se retiró sin dar declaraciones a los periodistas.
Cien imputaciones por el asalto a las instituciones llevado a cabo por bolsonaristas
El Supremo Tribunal Federal imputó el martes a 100 de los más de 200 denunciados por la Fiscalía de haber estado involucrados en los actos vandálicos. Los reos van a responder, entre otros delitos, por golpe de Estado y asociación criminal, susceptibles a penas de más de 20 años de cárcel.
Para Bolsonaro, la declaración del miércoles ante la Policía significó la segunda desde que regresó a Brasil el 30 de marzo. De hecho, el pasado 5 de abril tuvo que prestar declaración en otra investigación abierta por el ingreso irregular a Brasil de valiosas joyas regaladas por Arabia Saudita en 2021.
En total, el exmandatario enfrenta cuatro investigaciones en el máximo tribunal, con penas susceptibles de prisión, además de más de una decena de procesos administrativos en el Tribunal Superior Electoral, por presunto abuso de poder político y económico durante la contienda electoral de 2022.
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Jair Bolsonaro aseguró este miércoles que publicó de forma “accidental” un video que cuestionaba la legitimidad de las elecciones presidenciales de 2022, al comparecer ante la Policía Federal para declarar sobre la asonada que llevaron a cabo sus partidarios en Brasilia en enero pasado.
El expresidente de Brasil es investigado por su presunto papel como autor intelectual e instigador de los disturbios del 8 de enero, cuando miles de sus seguidores invadieron las sedes de los tres poderes del Estado en la capital brasileña, en un intento de tumbar al presidente Lula da Silva, quien había asumido la Presidencia siete días antes.
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Su supuesta participación en la asonada es investigada desde el 13 de enero por decisión de un juez del Supremo. La Fiscalía había pedido que lo incluyeran en la pesquisa, citando un video que el exmandatario subió a sus redes sociales el 10 de enero, cuestionando el resultado electoral de octubre, cuando perdió la reelección contra Lula.
El video reproducía la declaración de un fiscal que decía que el líder de los trabajadores “no fue electo por el pueblo”, sino por la justicia electoral y suprema, repitiendo, sin pruebas, los cuestionamientos sobre la transparencia de los comicios, una constante de Bolsonaro en 2022.
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Por su parte, el exsecretario de Comunicación y actual asesor de Bolsonaro, Fabio Wajngarten, dijo que “en la noche del 8 de enero” el expresidente “repudió todos los hechos lamentables ocurridos en Brasilia”, y después de la elección, “dio vuelta su página política”. Bolsonaro llegó en un auto polarizado a la sede policial, donde estuvo más de dos horas, y se retiró sin dar declaraciones a los periodistas.
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Para Bolsonaro, la declaración del miércoles ante la Policía significó la segunda desde que regresó a Brasil el 30 de marzo. De hecho, el pasado 5 de abril tuvo que prestar declaración en otra investigación abierta por el ingreso irregular a Brasil de valiosas joyas regaladas por Arabia Saudita en 2021.
En total, el exmandatario enfrenta cuatro investigaciones en el máximo tribunal, con penas susceptibles de prisión, además de más de una decena de procesos administrativos en el Tribunal Superior Electoral, por presunto abuso de poder político y económico durante la contienda electoral de 2022.
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