Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Aunque le presidente de Bolivia, Evo Morales, se proclamó ganador de las eleccoines del 20 de octubre en Bolivia, cuyo recuento estuvo marcado por un polémico conteo de votos criticado por la oposición y varias organizaciones, este miércoles aceptó una auditoría vinculante.
Evo Morales había rechazado inicialmente esta medida, sin embargo, las crecientes protestas y la decisión de su rival, Carlos Mesa, de seguir en la calle hasta que se repitan las eleccoines hizo cambiar al presidente indígena su decisión.
Ver más: Una treintena de heridos en protestas en Bolivia
Esta mañana su gobierno informó que la Organización de Estados Americanos (que ya había pedido una segunda vuelta) haga una auditoría y que su resultado será "vinculante".De acuerdo con la página web del Tribunal Supremo Electoral (TSE) Evo Morales obtuvo el 47,06 % de los sufragios, frente a 36,52 % del centrista, Carlos Mesa, en la primera vuelta de los comicios bolivianos, con el 99,81 % de los votos escrutados.
El gobierno le propuso este martes al candidato opositor Carlos Mesa sumarse a una auditoría internacional del comicio para intentar detener una violencia callejera que la ONU instó a detener en forma "urgente".
Ola de protestas
La ola de protestas contra la polémica reelección de Evo Morales escala en Bolivia. La ONU hizo "un llamado clamoroso y urgente a los actores políticos, a los sectores sociales, y a todas y todos los bolivianos a reducir tensiones y rechazar todo acto de violencia en estos difíciles momentos que enfrenta el país".Ver más: Limbo electoral en Bolivia, ¿ganó o no Evo Morales?
Luego de protestas que entre lunes y martes dejaron al menos 35 heridos, cinco de ellos de bala, el vicepresidente Álvaro García propuso a Mesa, el "candidato perdedor, que se sume a la auditoría" de los comicios del 20 de octubre que estará en manos de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Mesa, un centrista que ya fue presidente entre 2003 y 2005, respondió que sólo aceptará la auditoría "si (Morales) está dispuesto a no aceptar el resultado del Tribunal Supremo Electoral" mientras se realice la auditoría y le reconoce un "carácter vinculante".
La respuesta llegó poco después a través del ministro de Cominicación, Manuel Canelas: "Nosotros nos sometemos a lo que concluya la auditoría".
García detalló que la auditoría, que fue acordada la semana pasada por el gobierno y la OEA y que aún no tiene fecha, será acompañada "por México, Paraguay y Perú".
La oposición "ha decidido concentrarse y cercar la Casa Grande del Pueblo", como llama Morales a la Casa de Gobierno, alertó el mandatario la noche del lunes ante una multitudinaria concentración de trabajadores y campesinos, que festejaron su triunfo electoral en El Alto, ciudad vecina de La Paz.
Morales, de 60 años y en el poder desde 2006, asegura que las protestas forman parte de un plan de "golpe de Estado" en su contra que, según dijo el domingo, la oposición había decidido ejecutar como máximo este martes.
Mesa, que pide la anulación de las elecciones, rechazó esas acusaciones y desafió el lunes al gobierno en una masiva concentración, especialmente de jóvenes universitarios, en un barrio acomodado de La Paz: "Aquí estoy, o voy a la cárcel o voy a la presidencia".
La misión de observadores de la OEA, la ONU y la Unión Europea, además de ocho países, entre ellos EEUU, habían manifestado su apoyo a la realización de un balotaje para zanjar las diferencias.