Captura de Ovidio Guzmán, hijo del “Chapo”, revive la sombra del “Culiacanazo”

La escalada violenta de esta semana en Culiacán tras la recaptura de Ovidio Guzmán, alias “El Ratón” e hijo de narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, recordó lo que sucedió el 17 de octubre de 2019 en el llamado “Culiacanazo”.

Ese día alias “El Ratón” fue detenido por las autoridades mexicanas, pero liberado a sangre y fuego por miembros del Cartel, quienes al enterarse de su captura, bloquearon la ciudad, secuestraron a una veintena de soldados y atacaron edificios en los que residían familiares de los militares.

Para detener la violencia el presidente Andrés Manuel López Obrador autorizó la liberación del hijo del Chapo Guzmán. El mandatario defendió entonces su decisión afirmando que se había evitado un baño de sangre.

López Obrador destacó que esta vez la situación fue “completamente distinta”, pues la operación se ejecutó en la periferia de la ciudad y no en pleno centro de Culiacán para no poner en riesgo a la población.

Sin embargo, la violencia se extendió al aeropuerto internacional de Culiacán, en donde en un intento desesperado por impedir el traslado de alias “El Ratón” y aupados por el recuerdo del “Culiacanazo”, comandos armados del Cartel de Sinaloa abrieron fuego contra una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana. Las balas también alcanzaron un avión de pasajeros de la Aeroméxico.

Videos difundidos en redes sociales muestran a los pasajeros atrincherados para protegerse de las balas, lo mismo que a trabajadores aeroportuarios resguardándose en los mostradores.

Las operaciones en la terminal aérea fueron detenidas, provocando suspensiones de vuelos en varios aeropuertos. Las autoridades además reportaron saqueos en algunos barrios de Culiacán.

En total hubo 19 bloqueos y varios vehículos de carga y automóviles ardieron en las calles que además lucían desoladas tras registrarse escenas de pánico entre personas que buscaban lugar para protegerse.

A raíz de la escalada violenta, las autoridades suspendieron las clases en instituciones educativas, un partido de la liga profesional de fútbol y otro de béisbol.

Miles de soldados mexicanos retomaron este viernes el control de Culiacán. En algunos puntos, sin embargo, la circulación sigue interrumpida por vehículos reducidos a cenizas, pero no se han reportado  nuevos enfrentamientos ni bloqueos.

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La escalada violenta de esta semana en Culiacán tras la recaptura de Ovidio Guzmán, alias “El Ratón” e hijo de narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, recordó lo que sucedió el 17 de octubre de 2019 en el llamado “Culiacanazo”.

Ese día alias “El Ratón” fue detenido por las autoridades mexicanas, pero liberado a sangre y fuego por miembros del Cartel, quienes al enterarse de su captura, bloquearon la ciudad, secuestraron a una veintena de soldados y atacaron edificios en los que residían familiares de los militares.

Para detener la violencia el presidente Andrés Manuel López Obrador autorizó la liberación del hijo del Chapo Guzmán. El mandatario defendió entonces su decisión afirmando que se había evitado un baño de sangre.

López Obrador destacó que esta vez la situación fue “completamente distinta”, pues la operación se ejecutó en la periferia de la ciudad y no en pleno centro de Culiacán para no poner en riesgo a la población.

Sin embargo, la violencia se extendió al aeropuerto internacional de Culiacán, en donde en un intento desesperado por impedir el traslado de alias “El Ratón” y aupados por el recuerdo del “Culiacanazo”, comandos armados del Cartel de Sinaloa abrieron fuego contra una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana. Las balas también alcanzaron un avión de pasajeros de la Aeroméxico.

Videos difundidos en redes sociales muestran a los pasajeros atrincherados para protegerse de las balas, lo mismo que a trabajadores aeroportuarios resguardándose en los mostradores.

Las operaciones en la terminal aérea fueron detenidas, provocando suspensiones de vuelos en varios aeropuertos. Las autoridades además reportaron saqueos en algunos barrios de Culiacán.

En total hubo 19 bloqueos y varios vehículos de carga y automóviles ardieron en las calles que además lucían desoladas tras registrarse escenas de pánico entre personas que buscaban lugar para protegerse.

A raíz de la escalada violenta, las autoridades suspendieron las clases en instituciones educativas, un partido de la liga profesional de fútbol y otro de béisbol.

Miles de soldados mexicanos retomaron este viernes el control de Culiacán. En algunos puntos, sin embargo, la circulación sigue interrumpida por vehículos reducidos a cenizas, pero no se han reportado  nuevos enfrentamientos ni bloqueos.

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