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Un segundo hallazgo de papeles clasificados en una locación relacionada con el presidente Joe Biden tiene a la Casa Blanca en aprietos.
Una fuente cercana al asunto así lo confirmó al New York Times, en lo que constituiría el segundo hallazgo esta semana de documentos secretos de su tiempo como vicepresidente que habrían sido retenidos de forma indebida.
Sin embargo, no es muy claro dónde ni cuándo fueron recuperados, agrega el medio estadounidense.
La Casa Blanca ha reconocido el descubrimiento de un “pequeño número” de documentos clasificados (10, según algunas fuentes) en un armario Penn Biden Center for Diplomacy and Engagement, que el hoy presidente fundó tras su tiempo como fórmula de Barack Obama.
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El Departamento de Justicia de Estados Unidos investiga lo sucedido, lo que ha hecho inevitable las comparaciones con los hallazgos del FBI durante un allanamiento a la residencia de Donald Trump. El expresidente republicano tenía unos 11.000 documentos secretos y podría enfrentar cargos por obstrucción a la justicia.
“El de Biden ―quien asegura no saber qué contienen esos documentos— es cuando menos embarazoso para un presidente que presume de altos estándares éticos”, como escribió Sebastian Smith en la AFP.
Por lo mismo, el presidente Trump no tardó en reaccionar a la noticia del primer hallazgo: “¿Cuándo registrará el FBI las numerosas residencias de Joe Biden e incluso la Casa Blanca?”, escribió en su red Truth Social.
Al respecto, la Casa Blanca ha explicado que tan pronto se encontró el lote (el primero) de documentos, fueron entregados inmediatamente a las autoridades.
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Además, se ha defendido diciendo que está cooperando con la investigación. “La Casa Blanca está cooperando con los Archivos Nacionales y el Departamento de Justicia respecto al descubrimiento de lo que parecen ser registros de la administración de Obama y Biden, incluidos un pequeño número de documentos marcados como clasificados”, dijo el consejero especial de Biden Richard Sauber.
Ahí estaría una de las grandes diferencias con el caso de Trump, quien se negó a cooperar.
“Adicionalmente, los abogados de Biden han estado rastreando la posible localización de otros documentos extraviados, agregó. Lo que puede explicar el hallazgo de nuevos documentos el miércoles, y quizá de otros por venir”, reportó la AFP.
Para evitar las suspicacias políticas el fiscal general Merrick Garland designó a un fiscal federal de Chicago nombrado durante la administración Trump a revisar los documentos perdidos de Biden.
“En un encuentro con la prensa el miércoles, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, evitó responder a preguntas excusándose en la investigación en curso del Departamento de Justicia”, agregó la agencia de prensa. “Vamos a estar limitados en cuanto a lo que podemos decir aquí”, declaró.
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