DeSantis dijo que llegaría a “cortar gargantas” si es presidente: a qué se refería

Ron DeSantis, gobernador de Florida y aspirante a la nominación republicana para ser candidato a la presidencia de Estados Unidos, causó revuelo con unas declaraciones recientes. Pero esta vez no fue por su ya reconocido discurso antiinmigración, sino por unas palabras que ofendieron particularmente a los empleados públicos del país. DeSantis afirmó que, si llega a la Oficina Oval, empezaría a “cortar gargantas” desde el día uno.

¿A qué se refería? Hablaba de la burocracia del Estado. “Vamos a tener a todas estas personas del ‘estado profundo’, vamos a comenzar a cortar gargantas desde el primer día”, señaló en un evento en New Hampshire organizado por Scott Brown, un republicano que fungió como senador de Massachusetts.

Las palabras son del fin de semana pasado, pero apenas resonaron por las múltiples críticas y reacciones que han surgido por parte de quienes las consideran “repulsivas” y como una “amenaza”.

“La amenaza del gobernador DeSantis de ‘comenzar a degollar’ a los empleados federales es peligrosa, repugnante, vergonzosa y descalificante”, señaló, por ejemplo, Everett Kelley, presidente de la Federación Americana de Empleados Gubernamentales, quien, citado por The Guardian, exigió respeto al precandidato.

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Como explicó Alexander Nazaryan para Yahoo News, la idea de un “estado profundo” es “un concepto vago popularizado por el expresidente Donald Trump que se refiere a la burocracia federal en expansión. Generalmente es utilizado por la derecha para describir una sombría e inexplicable, por no mencionar ficticia, camarilla de élites poderosas”.

Ron DeSantis, de 44 años, es el segundo en la carrera por la nominación republicana, después de Donald Trump, de 77, quien lleva una amplia ventaja de cara a las elecciones de 2024, pese (o en parte a raíz de) sus tres imputaciones penales.

Según la primera encuesta del New York Times/Siena College de la campaña de 2024, el magnate cuenta con el 54 % de los apoyos, mientras que DeSantis tiene el 17 % de ellos; le sigue el exvicepresidente Mike Pence, con el 3 % de respaldo.

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DeSantis fue elegido por primera vez a la Cámara de Representantes en 2012; seis años después en 2018 fue elegido gobernador de Florida, y fue reelegido en las más recientes elecciones locales.

Estudió Historia en Yale y Derecho en Harvard, estuvo en la marina de Estados Unidos y fue asesor legal de los Navy Seals desplegados en Irak.

Está casado con Casey DeSantis, una presentadora de televisión local, con quien tiene tres hijos, a quien, a diferencia de Melania Trump, se la ha visto muy activa durante la campaña.

Pese a eso, Ron DeSantis es criticado por su supuesta falta de carisma, que contrasta con las habilidades de Donald Trump para movilizar a las masas.

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Ron DeSantis, gobernador de Florida y aspirante a la nominación republicana para ser candidato a la presidencia de Estados Unidos, causó revuelo con unas declaraciones recientes. Pero esta vez no fue por su ya reconocido discurso antiinmigración, sino por unas palabras que ofendieron particularmente a los empleados públicos del país. DeSantis afirmó que, si llega a la Oficina Oval, empezaría a “cortar gargantas” desde el día uno.

¿A qué se refería? Hablaba de la burocracia del Estado. “Vamos a tener a todas estas personas del ‘estado profundo’, vamos a comenzar a cortar gargantas desde el primer día”, señaló en un evento en New Hampshire organizado por Scott Brown, un republicano que fungió como senador de Massachusetts.

Las palabras son del fin de semana pasado, pero apenas resonaron por las múltiples críticas y reacciones que han surgido por parte de quienes las consideran “repulsivas” y como una “amenaza”.

“La amenaza del gobernador DeSantis de ‘comenzar a degollar’ a los empleados federales es peligrosa, repugnante, vergonzosa y descalificante”, señaló, por ejemplo, Everett Kelley, presidente de la Federación Americana de Empleados Gubernamentales, quien, citado por The Guardian, exigió respeto al precandidato.

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Como explicó Alexander Nazaryan para Yahoo News, la idea de un “estado profundo” es “un concepto vago popularizado por el expresidente Donald Trump que se refiere a la burocracia federal en expansión. Generalmente es utilizado por la derecha para describir una sombría e inexplicable, por no mencionar ficticia, camarilla de élites poderosas”.

Ron DeSantis, de 44 años, es el segundo en la carrera por la nominación republicana, después de Donald Trump, de 77, quien lleva una amplia ventaja de cara a las elecciones de 2024, pese (o en parte a raíz de) sus tres imputaciones penales.

Según la primera encuesta del New York Times/Siena College de la campaña de 2024, el magnate cuenta con el 54 % de los apoyos, mientras que DeSantis tiene el 17 % de ellos; le sigue el exvicepresidente Mike Pence, con el 3 % de respaldo.

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DeSantis fue elegido por primera vez a la Cámara de Representantes en 2012; seis años después en 2018 fue elegido gobernador de Florida, y fue reelegido en las más recientes elecciones locales.

Estudió Historia en Yale y Derecho en Harvard, estuvo en la marina de Estados Unidos y fue asesor legal de los Navy Seals desplegados en Irak.

Está casado con Casey DeSantis, una presentadora de televisión local, con quien tiene tres hijos, a quien, a diferencia de Melania Trump, se la ha visto muy activa durante la campaña.

Pese a eso, Ron DeSantis es criticado por su supuesta falta de carisma, que contrasta con las habilidades de Donald Trump para movilizar a las masas.

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