Manuel Paniagua Mendoza, piloto de un avión ultraligero, murió el jueves 10 de octubre luego de que su aeronave, usada para realizar labores de riesgo, se estrellara en Costa Rica.
Poco después del incidente, empezó a circular un video que grabó antes de salir a trabajar y tomar vuelo. Las imágenes muestran un hangar donde se ven varias aeronaves, incluida la accidentada, que tenía matrícula UL-TI-148. Luego, sale Paniagua Mendoza caminando hacia campo abierto diciendo: “Ya vamos para el cielo”.
Ese era un mensaje dirigido, al parecer, a su papá: “Buenos días, buenos días, papacito lindo, ya acá en la brega. Amaneció lindo acá, en Puntarenas. Ya vamos para el cielo, gracias a Dios. La bendición caiga sobre nosotros”. Los reportes indican que, previo al accidente, el hombre estaba realizando tareas agrícolas. Las autoridades investigan si hubo una falla mecánica detrás de lo sucedido.
Los aviones ultraligeros son livianos, fabricados con fibra de carbono o de vidrio, con capacidad para uno o dos pasajeros. Aguantan un peso máximo de despegue de 450 kilogramos y alcanzan una velocidad de 100 kilómetros por hora. Los más modernos pueden estar en el aire 6 o 7 horas.
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