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                                                                                                                                En Brasil, estos campesinos pueden tomar tu tierra si no la usas

                                                                                                                                El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) busca ocupar las tierras ociosas que están en manos de los ricos, colonizarlas y cultivarlas.

                                                                                                                                Jack Nicas | The New York Times

                                                                                                                                Foto de referencia. El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), el movimiento inspirado en el marxismo más grande del mundo, organiza a cientos de miles de pobres de Brasil para ocupar las tierras ociosas que están en manos de los ricos, colonizarlas y cultivarlas.
                                                                                                                                Foto: Pixabay - Pixabay
                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Ahora, tres meses después, es un pueblo bullicioso. En un domingo reciente, los niños andaban en bicicleta por los nuevos caminos de tierra, las mujeres labraban la tierra de los jardines y los hombres ponían lonas en los refugios. Unas 530 familias viven en el campamento de Itabela, un pueblo en el noreste de Brasil, y ya se juntaron para arar y sembrar en el campo frijoles, maíz y yuca.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                Manthay y los otros colonos sin invitación son parte del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), quizás el movimiento inspirado en el marxismo más grande del mundo que opera dentro de una democracia y, después de 40 años de ocupaciones de tierras, a veces sangrientas, una importante fuerza política, social y cultural en Brasil.

                                                                                                                                El movimiento, liderado por activistas que se autodenominan militantes, organiza a cientos de miles de pobres de Brasil para ocupar las tierras ociosas que están en manos de los ricos, colonizarlas y cultivarlas, a menudo como grandes colectivos. Aseguran que están revirtiendo la profunda desigualdad alimentada por la distribución desigual de la tierra en Brasil a lo largo de su historia.

                                                                                                                                Aunque los izquierdistas comprenden la causa —las gorras rojas del movimiento que muestran a una pareja sosteniendo un machete en alto se han vuelto algo común en los bares hípsteres—, muchos brasileños la consideran comunista y criminal. Eso ha creado un dilema para el nuevo presidente izquierdista, Luiz Inácio Lula da Silva, un partidario del movimiento desde hace mucho tiempo que ahora está tratando mejorar las relaciones entre el Congreso y la poderosa industria agrícola.

                                                                                                                                En América Latina, otros movimientos inspirados en los principios del marxismo (trabajadores que se levantan en una lucha de clases contra el capitalismo) han tratado de abordar las desigualdades sistémicas, pero ninguno se ha acercado al tamaño, la ambición o la sofisticación del MST de Brasil.

                                                                                                                                Read more!
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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Pero ahora, envalentonados por la elección de Lula, un aliado político desde hace mucho tiempo, los seguidores del movimiento están aumentando sus expropiaciones de tierra.

                                                                                                                                “Elegimos a Lula, pero eso no es suficiente”, declaró João Pedro Stédile, cofundador del movimiento, en un mensaje transmitido a los miembros el domingo de Pascua, en el que anunció una ofensiva revolucionaria para ocupar nuevas tierras este “abril rojo”.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Las nuevas ocupaciones han dado lugar a un contramovimiento llamado “Invasión Cero”. Miles de agricultores dicen no confiar en la protección del gobierno sobre sus tierras y se están organizando para enfrentar a los ocupantes ilegales y expulsarlos, aunque, hasta ahora, ha habido poca violencia.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                A pesar de las tácticas agresivas del movimiento sin tierra, los tribunales y el gobierno de Brasil han reconocido la legalidad de miles de asentamientos bajo leyes que establecen que la tierra de cultivo debe ser productiva.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                📌 Le puede interesar: Estados Unidos y sus flexiones ante la migración

                                                                                                                                Eso es lo que la gente que acampa en Itabela desea.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                “La ciudad no es buena para nosotros”, dijo Marclésio Teles, de 35 años, un recolector de café parado afuera de la choza que construyó para su familia de cinco, con su hija discapacitada en silla de ruedas a su lado. “Un lugar como este es un lugar de paz”.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Daniel Alves, de 54 años, solía trabajar en los campos de otra persona antes de comenzar a ocupar esta tierra en 2010. Ahora, tiene 27 cultivos diferentes en 8 hectáreas, donde destacan plátanos, granos de pimienta, pitahaya de color rosa brillante y la fruta amazónica copoazú, todos orgánicos. Vende los productos en las ferias locales.

                                                                                                                                Alves dijo que seguía siendo pobre —su choza estaba cubierta con lonas— pero que era feliz.

                                                                                                                                “Este movimiento saca a la gente de la miseria”, concluyó.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                *The New York Times Service

                                                                                                                                👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Invitamos a verlas en El Espectador.

                                                                                                                                Foto de referencia. El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), el movimiento inspirado en el marxismo más grande del mundo, organiza a cientos de miles de pobres de Brasil para ocupar las tierras ociosas que están en manos de los ricos, colonizarlas y cultivarlas.
                                                                                                                                Foto: Pixabay - Pixabay
                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Ahora, tres meses después, es un pueblo bullicioso. En un domingo reciente, los niños andaban en bicicleta por los nuevos caminos de tierra, las mujeres labraban la tierra de los jardines y los hombres ponían lonas en los refugios. Unas 530 familias viven en el campamento de Itabela, un pueblo en el noreste de Brasil, y ya se juntaron para arar y sembrar en el campo frijoles, maíz y yuca.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                Manthay y los otros colonos sin invitación son parte del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), quizás el movimiento inspirado en el marxismo más grande del mundo que opera dentro de una democracia y, después de 40 años de ocupaciones de tierras, a veces sangrientas, una importante fuerza política, social y cultural en Brasil.

                                                                                                                                El movimiento, liderado por activistas que se autodenominan militantes, organiza a cientos de miles de pobres de Brasil para ocupar las tierras ociosas que están en manos de los ricos, colonizarlas y cultivarlas, a menudo como grandes colectivos. Aseguran que están revirtiendo la profunda desigualdad alimentada por la distribución desigual de la tierra en Brasil a lo largo de su historia.

                                                                                                                                Aunque los izquierdistas comprenden la causa —las gorras rojas del movimiento que muestran a una pareja sosteniendo un machete en alto se han vuelto algo común en los bares hípsteres—, muchos brasileños la consideran comunista y criminal. Eso ha creado un dilema para el nuevo presidente izquierdista, Luiz Inácio Lula da Silva, un partidario del movimiento desde hace mucho tiempo que ahora está tratando mejorar las relaciones entre el Congreso y la poderosa industria agrícola.

                                                                                                                                En América Latina, otros movimientos inspirados en los principios del marxismo (trabajadores que se levantan en una lucha de clases contra el capitalismo) han tratado de abordar las desigualdades sistémicas, pero ninguno se ha acercado al tamaño, la ambición o la sofisticación del MST de Brasil.

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Pero ahora, envalentonados por la elección de Lula, un aliado político desde hace mucho tiempo, los seguidores del movimiento están aumentando sus expropiaciones de tierra.

                                                                                                                                “Elegimos a Lula, pero eso no es suficiente”, declaró João Pedro Stédile, cofundador del movimiento, en un mensaje transmitido a los miembros el domingo de Pascua, en el que anunció una ofensiva revolucionaria para ocupar nuevas tierras este “abril rojo”.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Las nuevas ocupaciones han dado lugar a un contramovimiento llamado “Invasión Cero”. Miles de agricultores dicen no confiar en la protección del gobierno sobre sus tierras y se están organizando para enfrentar a los ocupantes ilegales y expulsarlos, aunque, hasta ahora, ha habido poca violencia.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                A pesar de las tácticas agresivas del movimiento sin tierra, los tribunales y el gobierno de Brasil han reconocido la legalidad de miles de asentamientos bajo leyes que establecen que la tierra de cultivo debe ser productiva.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                📌 Le puede interesar: Estados Unidos y sus flexiones ante la migración

                                                                                                                                Eso es lo que la gente que acampa en Itabela desea.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                “La ciudad no es buena para nosotros”, dijo Marclésio Teles, de 35 años, un recolector de café parado afuera de la choza que construyó para su familia de cinco, con su hija discapacitada en silla de ruedas a su lado. “Un lugar como este es un lugar de paz”.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Daniel Alves, de 54 años, solía trabajar en los campos de otra persona antes de comenzar a ocupar esta tierra en 2010. Ahora, tiene 27 cultivos diferentes en 8 hectáreas, donde destacan plátanos, granos de pimienta, pitahaya de color rosa brillante y la fruta amazónica copoazú, todos orgánicos. Vende los productos en las ferias locales.

                                                                                                                                Alves dijo que seguía siendo pobre —su choza estaba cubierta con lonas— pero que era feliz.

                                                                                                                                “Este movimiento saca a la gente de la miseria”, concluyó.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                *The New York Times Service

                                                                                                                                👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Invitamos a verlas en El Espectador.

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                                                                                                                                Ver todas las noticias
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