En Uruguay hay 600.000 armas, el 10% es de la policía
En Uruguay hay 600 mil armas y sólo el 10% está en manos de la policía, reveló la ministra del Interior, Daisy Tourné. La ministra se refirió al tema durante un seminario sobre “Uso responsable de armas de fuego” con motivo del 41 aniversario de la Dirección de Grupos de Apoyo de la policía, informó el miércoles la página de internet de la presidencia.
Agencia AP
La ministra consideró que el 87% de las muertes ocurren en los hogares y sólo el 13% se da en la vía pública.
“Un arma es un gran problema, un gran daño y un enorme negocio”, dijo la ministra y señaló que el tráfico de armas va unido con el narcotráfico y la trata de personas.
Tourné señaló “que el descontrol mundial en la venta y manejo de armas estimula los conflictos y retroalimenta la pobreza. América Latina es el continente más violento y en países como Brasil y El Salvador, constituye la principal causa de muerte”.
Tourné dijo que en Uruguay las muertes accidentales son el 29%, por homicidio el 22% y por suicidio el 49%. “Cuando la causa es la violencia doméstica, casi el 70% ocurre con armas de fuego y la mayoría sucede en el domicilio de la víctima”, acotó.
La ministra concluyó sosteniendo que “portar un arma no es un derecho del ciudadano, sino que debe ser una concesión hacia aquellas personas que cumplan debidamente con ciertos requisitos”.
La ministra consideró que el 87% de las muertes ocurren en los hogares y sólo el 13% se da en la vía pública.
“Un arma es un gran problema, un gran daño y un enorme negocio”, dijo la ministra y señaló que el tráfico de armas va unido con el narcotráfico y la trata de personas.
Tourné señaló “que el descontrol mundial en la venta y manejo de armas estimula los conflictos y retroalimenta la pobreza. América Latina es el continente más violento y en países como Brasil y El Salvador, constituye la principal causa de muerte”.
Tourné dijo que en Uruguay las muertes accidentales son el 29%, por homicidio el 22% y por suicidio el 49%. “Cuando la causa es la violencia doméstica, casi el 70% ocurre con armas de fuego y la mayoría sucede en el domicilio de la víctima”, acotó.
La ministra concluyó sosteniendo que “portar un arma no es un derecho del ciudadano, sino que debe ser una concesión hacia aquellas personas que cumplan debidamente con ciertos requisitos”.