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El secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, presentó este miércoles las prioridades de política exterior del presidente Joe Biden, y contrarrestar la influencia de Moscú en América Latina figura en la lista.
Blinken compartió la preocupación del representante Albio Sires (Dem-Nueva Jersey), quien manifestó que Rusia estaba tratando de usar a Venezuela para desestabilizar a Colombia y otros países de la región.
“Comparto esa preocupación. Lo vemos en Venezuela”, dijo Blinken. “Vamos a dedicar más atención, más tiempo y más recursos para contrarrestar la creciente influencia rusa en América Latina”, agregó el secretario de Estado, quien señaló además que la administración de Donald Trump ignoró en gran medida el avance de Moscú en la región.
Pero las posiciones de Sires y Blinken recibieron críticas de inmediato por parte de organizaciones defensoras de los derechos humanos. Win Without War, una red de activistas que trabajan por una política exterior estadounidense más pacífica y progresista, reprochó el hecho de que se esté criticando las intenciones de Moscú de desestabilizar a Colombia cuando el gobierno debería centrarse en cómo las sanciones de ese país también están impulsando la crisis en Venezuela y la misma desestabilización de la región.
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En Colombia se ha hablado sobre una supuesta estrategia del Kremlin para desestabilizar al país desde que el gobierno de Iván Duque expulsó en diciembre de 2020 a dos funcionarios de la embajada de Rusia en Bogotá por, según la inteligencia colombiana, tratar de reclutar colaboradores para extraer información sobre empresas del sector energético y universidades.
Esta polémica trama de espionaje, sobre la cual hubo mucha especulación en los medios locales, tensó las relaciones entre Colombia y Rusia. Por esta razón, los comentarios de Blinken vuelven a revivir el escándalo de los espías rusos y atizar las relaciones bilaterales entre Bogotá y Moscú.
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Pero la influencia rusa en América Latina no fue lo único que destacó en la audiencia de Blinken. Estas son algunas de las claves de la participación del jefe de la diplomacia estadounidense en la Cámara de Representantes este miércoles:
- China: Blinken apuntó a que Washington tiene una agenda difícil con Pekín. Puntualmente, el secretario de Estado le pidió al gobierno chino que presente pruebas de que no está cometiendo un genocidio contra la minoría musulmana de los uigures. Se reunirá con su homólogo chino en Alaska la próxima semana.
- Armas nucleares: Blinken rechazó el impulso implacable de Rusia, China e Irán para adquirir armas nucleares.
- Afganistán: Blinken resaltó el compromiso del Congreso por llevar a las partes en conflicto en Afganistán al diálogo y terminar con la guerra, pero no emitió una decisión sobre la fecha límite que puso el anterior gobierno (primero de mayo) para retirar a las tropas estadounidenses de ese país. Esto dependerá de los avances en el diálogo y del compromiso de los talibanes.
- Etiopía: Blinken declaró que en la región del Tigray en Etiopía se estaba llevando a cabo una “limpieza étnica”. La administración Trump descuidó los asuntos en África, por lo que demuestra un interés del nuevo gobierno por acercarse a este continente.
- Los logros, hasta ahora: Blinken apuntó que hasta ahora la administración Biden ha cumplido con sus promesas de campaña y enumeró una lista de victorias en los primeros dos meses de gobierno, como la reincorporación al Acuerdo de París; la celebración de una cumbre con aliados asiáticos; frenar la retirada de tropas de Alemania y la anulación de la prohibición de viaje de ciertos países musulmanes que adoptó Donald Trump.
- Las acciones, hasta ahora: Blinken destacó varios de los movimientos de la administración Biden hasta el momento, como imponer sanciones a Rusia y a Birmania, reanudar la diplomacia en Afganistán y levantar la “política de Ciudad de México”, la cual le prohibía a las organizaciones extranjeras que recibieran financiación del gobierno estadounidense apoyar a grupos a favor del aborto.
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