Un senador uruguayo fue destituido y enviado a prisión, acusado de delitos sexuales
Gustavo Penadés salió del Parlamento de Uruguay y cumple una pena de prisión preventiva de 180 días, mientras continúa su proceso judicial, luego de ser inculpado por la presunta comisión de 22 delitos, entre ellos explotación sexual y violación.
La cámara alta del Parlamento de Uruguay votó este miércoles por unanimidad la destitución del senador Gustavo Penadés, destacada figura del oficialista Partido Nacional, imputado con prisión preventiva como presunto autor de múltiples delitos sexuales contra menores de edad. Él, suspendido en junio de sus fueros parlamentarios mientras era investigado por la Fiscalía por denuncias de pedofilia, fue expulsado del Senado con el voto de los 29 senadores presentes en la sesión.
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La votación tuvo lugar luego de que los coordinadores de todos los partidos políticos con representación parlamentaria propusieran aplicar un artículo de la Constitución que prevé la remoción de un legislador “por actos de conducta que le hicieren indigno de su cargo”. “No nos dimos cuenta de que estábamos al lado de un monstruo”, dijo el senador Sebastián da Silva, correligionario de Penadés, al pedir “perdón a las víctimas”.
El martes, Penadés fue inculpado por la presunta comisión de 22 delitos: once de retribución a la explotación sexual de menores de edad, cuatro de abuso sexual especialmente agravados, tres de abuso sexual agravados, uno de violación, uno de desacato, uno de corrupción de menores y uno de atentado violento al pudor. Además, mientras prosigue el proceso judicial, deberá cumplir prisión preventiva por 180 días.
Penadés, de 57 años y quien renunció en junio al Partido Nacional, niega tajantemente las acusaciones. Muchas de las personas que declararon en su contra “tenían corta edad” en el momento del presunto abuso y explotación sexual, en su mayoría “13 y 14 años”, y los hechos denunciados ocurrieron a lo largo de varios años, con un testimonio incluso de 2020, según detalles revelados el 7 de junio, durante la sesión de desafuero de Penadés.
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El presidente Luis Lacalle Pou, que en mayo respaldó al entonces senador, un operador político clave para su gobierno, dijo que entonces “no había elementos de prueba, testimonios, testigos”, pero esto cambió ahora. “De confirmarse en una sentencia esta situación, obviamente (Penadés) no es la persona que uno conoció”, declaró a periodistas.
Durante la sesión del Senado del miércoles, legisladores del opositor Frente Amplio recordaron el apoyo a Penadés de integrantes del gobierno y señalaron una supuesta maniobra del ahora exsenador con funcionarios, con el fin de poner en duda los testimonios de los denunciantes. “Todavía el delito no se ha probado, pero hay mucha complicididad del aparato del Estado metido en esto”, sostuvo la senadora frenteamplista Silvia Nane.
La fiscal Alicia Ghione, a cargo del caso, dijo que el jerarca policial Carlos Tarocco fue detenido el martes, acusado de entorpecer la investigación. Ese mismo día, también fue imputado con prisión preventiva el exprofesor de historia del Liceo Militar Sebastián Mauvezin, aparente facilitador de los señalados encuentros sexuales de Penadés con adolescentes, por la presunta comisión de siete delitos de contribución a la explotación sexual de menores.
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La cámara alta del Parlamento de Uruguay votó este miércoles por unanimidad la destitución del senador Gustavo Penadés, destacada figura del oficialista Partido Nacional, imputado con prisión preventiva como presunto autor de múltiples delitos sexuales contra menores de edad. Él, suspendido en junio de sus fueros parlamentarios mientras era investigado por la Fiscalía por denuncias de pedofilia, fue expulsado del Senado con el voto de los 29 senadores presentes en la sesión.
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El martes, Penadés fue inculpado por la presunta comisión de 22 delitos: once de retribución a la explotación sexual de menores de edad, cuatro de abuso sexual especialmente agravados, tres de abuso sexual agravados, uno de violación, uno de desacato, uno de corrupción de menores y uno de atentado violento al pudor. Además, mientras prosigue el proceso judicial, deberá cumplir prisión preventiva por 180 días.
Penadés, de 57 años y quien renunció en junio al Partido Nacional, niega tajantemente las acusaciones. Muchas de las personas que declararon en su contra “tenían corta edad” en el momento del presunto abuso y explotación sexual, en su mayoría “13 y 14 años”, y los hechos denunciados ocurrieron a lo largo de varios años, con un testimonio incluso de 2020, según detalles revelados el 7 de junio, durante la sesión de desafuero de Penadés.
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Durante la sesión del Senado del miércoles, legisladores del opositor Frente Amplio recordaron el apoyo a Penadés de integrantes del gobierno y señalaron una supuesta maniobra del ahora exsenador con funcionarios, con el fin de poner en duda los testimonios de los denunciantes. “Todavía el delito no se ha probado, pero hay mucha complicididad del aparato del Estado metido en esto”, sostuvo la senadora frenteamplista Silvia Nane.
La fiscal Alicia Ghione, a cargo del caso, dijo que el jerarca policial Carlos Tarocco fue detenido el martes, acusado de entorpecer la investigación. Ese mismo día, también fue imputado con prisión preventiva el exprofesor de historia del Liceo Militar Sebastián Mauvezin, aparente facilitador de los señalados encuentros sexuales de Penadés con adolescentes, por la presunta comisión de siete delitos de contribución a la explotación sexual de menores.
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