¿Hacia dónde va la política migratoria de Chile?
La migración extranjera en Chile ha aumentado significativamente en la última década. A raíz de esto, el país austral ha decidido cambiar su ley migratoria en busca de regular la llegada de miles de foráneos.
Diego Bazzani
Chile es uno de los países que presenta un mayor crecimiento en las cifras de migrantes en América Latina. Según el INE (Instituto Nacional de Estadística de Chile), el territorio chileno acoge a más de 1 millón cuatrocientas mil personas de diversos países de Latinoamérica como Colombia, Perú, Haití y Venezuela.
“El aumento de la población migrante en Chile ha sido explosivo. Cuando asumió la presidenta Bachelet en 2014 había alrededor de quinientas mil personas, mientras que hoy en día hay más de 1 millón y medio de personas”, dice el sociólogo, profesor de la Universidad de Chile, y exjefe de la Unidad de Migración e Inclusión Social del Ministerio de Desarrollo Social, Lorenzo Agar Corbino.
En consecuencia, este país del sur del continente tiene dentro de su agenda revisar sus políticas migratorias, en aras de intentar regular y moderar la entrada de personas extranjeras dentro de su territorio.
El incremento en la llegada de migrantes
Actualmente, la mayor población extranjera en el país austral son los inmigrantes venezolanos, quienes representan alrededor del 30 % de todos los foráneos residentes en Chile. En los últimos meses ha habido un repunte en la llegada de migrantes irregulares, quienes ingresan al país por las regiones de Arica y Tarapacá, en el norte del país.
Esto ha desencadenado fuertes choques entre las poblaciones fronterizas y algunos de los migrantes. “Sucede que con la pandemia se cerraron las fronteras, por lo que no hay prácticamente visas de turismo o de responsabilidad democrática. En consecuencia, las poblaciones migratorias como la venezolana o la colombiana siguen intentando ingresar a Chile por pasos no habilitados”, dice Lorenzo Agar.
Asimismo, en los últimos meses se han presentado múltiples protestas en contra de la migración irregular en el norte del país. El febrero pasado, por ejemplo, cientos de personas salieron a marchar en la ciudad de Iquique apalancados por el presunto asesinato del camionero Bayron Castillo a manos de tres ciudadanos venezolanos.
Sugerimos: Chile pidió perdón a mujer esterilizada a la fuerza tras diagnóstico de VIH
Las razones para emigrar a Chile
Chile se ha convertido en un polo de atracción para personas de toda Latinoamérica. Se estima que hoy en día, el 8 % de los residentes actuales del país son extranjeros. “La principal razón para que las personas de afuera vengan aquí es que Chile es el país con mayor ingreso per cápita del sur del continente”, afirma el colombochileno Iván Riascos, quien es el presidente de la fundación Red Migrante, una organización que ayuda y provee información a las personas que desean establecerse en Chile.
De igual manera, para la inmigrante venezolana Adriana Martínez, la nación austral tiene el beneficio de que “este es un país que siempre ha generado buenas oportunidades laborales, así seas extranjero y no tengas una amplia red de apoyo”. Hoy en día, Chile tiene una de las tasas de desempleo más bajas del continente, que ronda el 7,8 %, teniendo en cuenta a la Encuesta Nacional de Empleo (ENE) impulsada por el INE
La migración extranjera se ha concentrado principalmente en los grandes centros urbanos del país. Por ejemplo, el 80 % de los colombianos residentes en Chile viven en la región metropolitana de Santiago de Chile o en la ciudad norteña de Antofagasta. “En Santiago, ya hay comunas (barrios) muy marcadas para extranjeros, en donde viven peruanos, haitianos, venezolanos y colombianos como por ejemplo en La Estación Central o La Florida”, dice el barranquillero Erick Romero, quien vive en la capital desde hace 6 años.
El posible cambio de regulación migratoria y sus consecuencias
En abril de 2021, el gobierno de Sebastián Piñera expidió la Ley de Migración y Extranjería 21.325. La reglamentación de esta iniciativa y su entrada en vigor implican un cambio en las reglas de juego para emigrar al país austral. “La ley únicamente reglamenta a la migración regular, se da un cambio importante pues ya no se podrá venir con un estatus de turista para luego modificarlo al de residente. Si alguien quiere venir a Chile tiene que pedir una Visa de Oportunidad Laboral desde el país de origen”, explica el profesor Agar Corbino.
Le puede interesar: Con o sin Maduro: esto dicen Petro y Hernández sobre las relaciones con Venezuela
Por su parte, Iván Riascos afirma que “aunque la nueva ley endurece algunos aspectos, esta ayuda a organizar la migración, por ejemplo, se facilita la reunificación familiar, si alguien tiene a sus padres, hijos o esposa con residencia en Chile se puede quedar en el país muy fácilmente”.
En cuanto a la migración irregular, la ley dictamina que las personas que ingresen al país de una manera que no esté acorde con la legislación chilena pueden ser reconducidas a la frontera. Para el académico Agar, este aspecto de la norma va a ser difícil de cumplir, debido a que “la policía boliviana no acepta a los migrantes que no sean de nacionalidad boliviana, por lo que en ese caso Chile debe emprender un proceso de expulsión hacia el país de origen de la persona, lo cual es muchísimo más complicado”.
El panorama con el gobierno Boric
Ante el aumento de quejas y protestas de la población chilena ante la migración irregular, el presidente Gabriel Boric declaró en febrero del presente año, antes de posesionarse que “Chile tiene que recuperar el control de sus fronteras, pero la gente que haya entrado legalmente, bueno, es algo que vamos a revisar con Cancillería y con la persona que designemos encargado de extranjería”.
Asimismo, el mandatario ha mantenido el estado de excepción en el norte del país (zona por donde entra la mayor parte de los migrantes irregulares) proclamado por su antecesor. “No puede recaer el peso de una crisis migratoria solo en un grupo de países, en este caso Colombia, Perú y Chile, por eso yo he hablado con mandatarios de diferentes regiones de América Latina, para que demos una discusión para generar un sistema de cuotas y justamente descomprimir esta situación”, insistió el mandatario en una entrevista hecha por la Radio Cooperativa de Chile.
Para el profesor Agar el tema migratorio en el gobierno de Gabriel Boric será crucial para saber cuál será el futuro de los extranjeros en el país, pues es el gobierno del Frente Amplio quien debe establecer la nueva política migratoria: “Lo que hoy tenemos es una ley de migraciones, pero aún no tenemos una política migratoria de fondo en Chile. Esa es la principal tarea que va a tener este gobierno en este aspecto”.
Un punto importante con el que tendrá que lidiar el actual gobierno chileno es la ratificación del Pacto de Marrakech, que regula la migración internacional regular. Durante su campaña, el presidente afirmó: “Tenemos que ir comprometidamente hacia una política de migración segura, ordenada, regular y respetuosa de los derechos humanos, ratificando el Pacto de Marrakech”.
Así pues, la firma de este tratado internacional implicaría nuevos cambios en la legislación migratoria chilena, que modificarían principalmente la forma en la que Chile trata a los migrantes que llegan a su territorio por las vías regulares.
👀🌎📄 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias en el mundo? Te invitamos a verlas en El Espectador.
Chile es uno de los países que presenta un mayor crecimiento en las cifras de migrantes en América Latina. Según el INE (Instituto Nacional de Estadística de Chile), el territorio chileno acoge a más de 1 millón cuatrocientas mil personas de diversos países de Latinoamérica como Colombia, Perú, Haití y Venezuela.
“El aumento de la población migrante en Chile ha sido explosivo. Cuando asumió la presidenta Bachelet en 2014 había alrededor de quinientas mil personas, mientras que hoy en día hay más de 1 millón y medio de personas”, dice el sociólogo, profesor de la Universidad de Chile, y exjefe de la Unidad de Migración e Inclusión Social del Ministerio de Desarrollo Social, Lorenzo Agar Corbino.
En consecuencia, este país del sur del continente tiene dentro de su agenda revisar sus políticas migratorias, en aras de intentar regular y moderar la entrada de personas extranjeras dentro de su territorio.
El incremento en la llegada de migrantes
Actualmente, la mayor población extranjera en el país austral son los inmigrantes venezolanos, quienes representan alrededor del 30 % de todos los foráneos residentes en Chile. En los últimos meses ha habido un repunte en la llegada de migrantes irregulares, quienes ingresan al país por las regiones de Arica y Tarapacá, en el norte del país.
Esto ha desencadenado fuertes choques entre las poblaciones fronterizas y algunos de los migrantes. “Sucede que con la pandemia se cerraron las fronteras, por lo que no hay prácticamente visas de turismo o de responsabilidad democrática. En consecuencia, las poblaciones migratorias como la venezolana o la colombiana siguen intentando ingresar a Chile por pasos no habilitados”, dice Lorenzo Agar.
Asimismo, en los últimos meses se han presentado múltiples protestas en contra de la migración irregular en el norte del país. El febrero pasado, por ejemplo, cientos de personas salieron a marchar en la ciudad de Iquique apalancados por el presunto asesinato del camionero Bayron Castillo a manos de tres ciudadanos venezolanos.
Sugerimos: Chile pidió perdón a mujer esterilizada a la fuerza tras diagnóstico de VIH
Las razones para emigrar a Chile
Chile se ha convertido en un polo de atracción para personas de toda Latinoamérica. Se estima que hoy en día, el 8 % de los residentes actuales del país son extranjeros. “La principal razón para que las personas de afuera vengan aquí es que Chile es el país con mayor ingreso per cápita del sur del continente”, afirma el colombochileno Iván Riascos, quien es el presidente de la fundación Red Migrante, una organización que ayuda y provee información a las personas que desean establecerse en Chile.
De igual manera, para la inmigrante venezolana Adriana Martínez, la nación austral tiene el beneficio de que “este es un país que siempre ha generado buenas oportunidades laborales, así seas extranjero y no tengas una amplia red de apoyo”. Hoy en día, Chile tiene una de las tasas de desempleo más bajas del continente, que ronda el 7,8 %, teniendo en cuenta a la Encuesta Nacional de Empleo (ENE) impulsada por el INE
La migración extranjera se ha concentrado principalmente en los grandes centros urbanos del país. Por ejemplo, el 80 % de los colombianos residentes en Chile viven en la región metropolitana de Santiago de Chile o en la ciudad norteña de Antofagasta. “En Santiago, ya hay comunas (barrios) muy marcadas para extranjeros, en donde viven peruanos, haitianos, venezolanos y colombianos como por ejemplo en La Estación Central o La Florida”, dice el barranquillero Erick Romero, quien vive en la capital desde hace 6 años.
El posible cambio de regulación migratoria y sus consecuencias
En abril de 2021, el gobierno de Sebastián Piñera expidió la Ley de Migración y Extranjería 21.325. La reglamentación de esta iniciativa y su entrada en vigor implican un cambio en las reglas de juego para emigrar al país austral. “La ley únicamente reglamenta a la migración regular, se da un cambio importante pues ya no se podrá venir con un estatus de turista para luego modificarlo al de residente. Si alguien quiere venir a Chile tiene que pedir una Visa de Oportunidad Laboral desde el país de origen”, explica el profesor Agar Corbino.
Le puede interesar: Con o sin Maduro: esto dicen Petro y Hernández sobre las relaciones con Venezuela
Por su parte, Iván Riascos afirma que “aunque la nueva ley endurece algunos aspectos, esta ayuda a organizar la migración, por ejemplo, se facilita la reunificación familiar, si alguien tiene a sus padres, hijos o esposa con residencia en Chile se puede quedar en el país muy fácilmente”.
En cuanto a la migración irregular, la ley dictamina que las personas que ingresen al país de una manera que no esté acorde con la legislación chilena pueden ser reconducidas a la frontera. Para el académico Agar, este aspecto de la norma va a ser difícil de cumplir, debido a que “la policía boliviana no acepta a los migrantes que no sean de nacionalidad boliviana, por lo que en ese caso Chile debe emprender un proceso de expulsión hacia el país de origen de la persona, lo cual es muchísimo más complicado”.
El panorama con el gobierno Boric
Ante el aumento de quejas y protestas de la población chilena ante la migración irregular, el presidente Gabriel Boric declaró en febrero del presente año, antes de posesionarse que “Chile tiene que recuperar el control de sus fronteras, pero la gente que haya entrado legalmente, bueno, es algo que vamos a revisar con Cancillería y con la persona que designemos encargado de extranjería”.
Asimismo, el mandatario ha mantenido el estado de excepción en el norte del país (zona por donde entra la mayor parte de los migrantes irregulares) proclamado por su antecesor. “No puede recaer el peso de una crisis migratoria solo en un grupo de países, en este caso Colombia, Perú y Chile, por eso yo he hablado con mandatarios de diferentes regiones de América Latina, para que demos una discusión para generar un sistema de cuotas y justamente descomprimir esta situación”, insistió el mandatario en una entrevista hecha por la Radio Cooperativa de Chile.
Para el profesor Agar el tema migratorio en el gobierno de Gabriel Boric será crucial para saber cuál será el futuro de los extranjeros en el país, pues es el gobierno del Frente Amplio quien debe establecer la nueva política migratoria: “Lo que hoy tenemos es una ley de migraciones, pero aún no tenemos una política migratoria de fondo en Chile. Esa es la principal tarea que va a tener este gobierno en este aspecto”.
Un punto importante con el que tendrá que lidiar el actual gobierno chileno es la ratificación del Pacto de Marrakech, que regula la migración internacional regular. Durante su campaña, el presidente afirmó: “Tenemos que ir comprometidamente hacia una política de migración segura, ordenada, regular y respetuosa de los derechos humanos, ratificando el Pacto de Marrakech”.
Así pues, la firma de este tratado internacional implicaría nuevos cambios en la legislación migratoria chilena, que modificarían principalmente la forma en la que Chile trata a los migrantes que llegan a su territorio por las vías regulares.
👀🌎📄 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias en el mundo? Te invitamos a verlas en El Espectador.