Kenny Johnson, de Atlanta, Georgia, vende sus camisas caseras a sus seguidores de Donald Trump antes de que el expresidente estadounidense y candidato presidencial republicano participe en un evento de campaña en el estado.
Foto: EFE - ERIK S. LESSER
El Partido Demócrata y el Partido Republicano tienen un duelo activo por el estado de Georgia. Saben que sus 16 votos del Colegio Electoral serán definitorios para obtener las llaves de la Casa Blanca. ¿La clave allí? El voto afro.
En 2020, el sueño demócrata de conseguir una victoria en este estado por fin se cumplió, luego de 28 años. La organización política, liderada por figuras como la de Stacey Abrams, que centró la agenda en las necesidades de los afroamericanos, cambió el rumbo de la historia.