Nikki Haley cedió su espacio a Trump: “El tiempo para suspender mi campaña llegó”
Tras las primarias del supermartes, en las que Joe Biden y Donald Trump fueron los claros ganadores, la única rival que quedaba en pie para enfrentar al republicano era Haley, exembajadora ante Naciones Unidas y exgobernadora de Carolina del Sur. Sin embargo, en un acto público del miércoles, ella oficializó su renuncia a la carrera por la Presidencia.
Nikki Haley, la que hasta hace poco era la única rival de Donald Trump para ganar la nominación republicana para las elecciones presidenciales de noviembre, anunció su retiro, después de que varios medios de comunicación, como The New York Times y el Wall Street Journal, afirmaran que daría un paso al costado tras los resultados del supermartes.
Desde Charleston, Carolina del Sur, Haley afirmó: “Estoy llena de gratitud por el gran apoyo que hemos recibido de todo nuestro gran país, pero ha llegado el momento de suspender mi campaña”. Con referencia a la candidatura del expresidente republicano, agregó: “Lo felicito y le deseo lo mejor”, y dejó en claro que es tarea suya ganarse los votos de aquellos dentro y fuera del Partido Republicano: “Con toda seguridad, él será el candidato”.
Su salida se venía especulando desde horas de la mañana de este miércoles, cuando, a la espera de su pronunciamiento oficial, se vaticinaba que terminaría con su campaña, teniendo en cuenta que en el ciclo electoral únicamente logró consolidar dos victorias: Vermont, durante las primarias del 5 de marzo, y Washington D. C. Su renuncia le deja a Donald Trump prácticamente el camino libre, al menos por ahora, para ser el candidato de los republicanos, aunque falta ver qué pasará con sus procesos judiciales.
A lo largo de su aspiración a la Presidencia, la exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora ante las Naciones Unidas trató de pintar a Trump, su exjefe, como un agente del caos envejecido y mentalmente enfermo, incapaz de respetar a los veteranos o miembros del servicio, y poco dispuesto a ser fiel a la Constitución. Sin embargo, su discurso no caló mucho en los electores, a quienes intentó convencer con su perfil de ser el ala moderada del Partido Republicano y la opción para restablecer la “normalidad” frente al “caos de Trump”. Desde que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, abandonó la carrera por la Casa Blanca, Haley quedó como la única contrincante del magnate. Faltan algunas fechas en el calendario electoral, pero se cree que en noviembre habrá un nuevo round entre Joe Biden y el expresidente republicano.
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Su salida se venía especulando desde horas de la mañana de este miércoles, cuando, a la espera de su pronunciamiento oficial, se vaticinaba que terminaría con su campaña, teniendo en cuenta que en el ciclo electoral únicamente logró consolidar dos victorias: Vermont, durante las primarias del 5 de marzo, y Washington D. C. Su renuncia le deja a Donald Trump prácticamente el camino libre, al menos por ahora, para ser el candidato de los republicanos, aunque falta ver qué pasará con sus procesos judiciales.
A lo largo de su aspiración a la Presidencia, la exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora ante las Naciones Unidas trató de pintar a Trump, su exjefe, como un agente del caos envejecido y mentalmente enfermo, incapaz de respetar a los veteranos o miembros del servicio, y poco dispuesto a ser fiel a la Constitución. Sin embargo, su discurso no caló mucho en los electores, a quienes intentó convencer con su perfil de ser el ala moderada del Partido Republicano y la opción para restablecer la “normalidad” frente al “caos de Trump”. Desde que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, abandonó la carrera por la Casa Blanca, Haley quedó como la única contrincante del magnate. Faltan algunas fechas en el calendario electoral, pero se cree que en noviembre habrá un nuevo round entre Joe Biden y el expresidente republicano.
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