Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Jacinda Ardern dejó este miércoles (martes aún en América) el cargo de primera ministra de Nueva Zelanda tras su sorpresiva renuncia a la jefatura del gobierno la semana pasada.
Su aliado Chris Hipkins, de 44 años, juró como nuevo primer ministro ante el gobernador general de Nueva Zelanda en una ceremonia en la capital Wellington. “Este es el mayor privilegio y responsabilidad de mi vida”, declaró Hipkins tras asumir el cargo. “Estoy motivado y emocionado con los desafíos por delante”.
Ardern afirmó la semana pasada que no tenía la “energía” para continuar, tras conducir al país por desastres naturales, el peor ataque terrorista de su historia y la pandemia del covid-19.
📝 Sugerimos: La última lección de liderazgo de Jacina Ardern, ¿cuál es su legado?
En su última aparición pública como primera ministra la mañana del miércoles, salió de la sede del Parlamento ante cientos de transeúntes que estallaron en aplausos espontáneos. Su gobierno de centroizquierda enfrentó dificultades los últimos dos años con la creciente inflación, una posible recesión y el repunte de la oposición conservadora.
Hipkins, arquitecto de la respuesta neozelandesa a la pandemia, enfrenta ahora la tarea de levantar los bajos índices de aprobación del gobierno antes de las elecciones generales de octubre.
Padre de dos hijos y apodado “Chippy”, Hipkins se considera un “kiwi normal, ordinario”, procede de una familia obrera y disfruta de ir en bicicleta al trabajo.
“El covid-19 y la pandemia crearon una crisis sanitaria. Ahora creó una crisis económica y allí es donde mi gobierno se enfocará”, declaró Hipkins previamente.
📌Le puede interesar: Mike Pence, exvicepresidente de Trump, también se llevó documentos clasificados
¿Qué dijo Jacinda Ardern en su discurso final?
“Me marcho con un amor y afecto por Aotearoa Nueva Zelanda y su gente mayor de cuando comencé. No pensé que eso fuera posible”, dijo Ardern en un breve discurso durante la celebración del cumpleaños del profeta maorí Tahupōtiki Wiremu Rātana, fundador de la fe Ratana, en lo que supuso su última intervención como líder del país.
La saliente gobernante rechazó de forma velada las especulaciones de que la escalada del acoso y de las amenazas en su contra hayan influido de forma decisiva en su decisión.
“Quiero que ustedes sepan que mi abrumadora experiencia en este trabajo, de Nueva Zelanda y neozelandeses, ha sido una de amor, empatía y amabilidad”, aseguró al mencionar las “discusiones” sobre las razones para su renuncia, y agregó: “Eso es lo que la mayoría de Nueva Zelanda me ha demostrado”.
📰 También recomendamos: En EE. UU. ya hay más tiroteos que días: ¿cuál es el estado más afectado?
Ardern, quien se convirtió en la política más joven del mundo en ocupar la jefatura de Gobierno cuando llegó al poder en 2017 a los 37 años, anunció su inesperada renuncia el pasado jueves, cuando admitió que ya no tiene “suficiente energía para seguir con el trabajo”.
Durante los cinco años y medio en los que estuvo al frente del país, su gestión directa y empática ha sido muy aplaudida dentro y fuera de Nueva Zelanda, aunque la jefa de Estado ha visto su popularidad caer en medio de las estrictas restricciones durante la pandemia de covid y su impacto interno, como el alza de la inflación o la amenaza de una recesión.
Esos factores generaron una creciente ola de críticas, sobre todo por parte del movimiento antivacuna, que culminó en una escalada de acoso y amenazas “sin precedentes”, según denunciaron líderes políticos, aunque la mandataria aseguró que eso no fue “un factor decisivo” para su decisión.
“No lo dejo porque sea duro, lo dejo porque este trabajo conlleva una gran responsabilidad, y no tengo suficiente energía para hacerle justicia”, explicó al anunciar su renuncia el pasado jueves.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Invitamos a verlas en El Espectador.