Oposición gana la gobernación del estado de Barinas, bastión del chavismo
Sergio Garrido se quedó con el 55,4 % de los votos y rompió con la “dinastía” de los Chávez que había desde 1998.
Pasadas las 10 de la noche del domingo, el Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) informó que el opositor Sergio Garrido había ganado las elecciones a la gobernación del estado de Barinas, cuna y bastión del chavismo. Cuando el conteo de votos llegaba al 98 %, el CNE informó que Garrido se quedó con el 55,36 % (172.497), mientras que Jorge Arreaza, el candidato del chavismo, logó el 41,27 % (128.583).
La elección es significativa, pues rompe con la “dinastía” implantada por el oficialismo en el estado desde 1998, cuando Hugo Chávez llegó a la Presidencia. El máximo cargo en Barinas fue ocupado desde entonces por el padre, Hugo de los Reyes, y posteriormente por dos hermanos del presidente, Adán y Argenis.
Antes de que se oficializaran los resultados, Arreaza había reconocido su derrota: “Barinas querida. La información que recibimos de nuestras estructuras del PSUV indican que, aunque aumentamos en votación, no hemos logrado el objetivo. Agradezco de corazón a nuestra heroica militancia. Seguiremos protegiendo al pueblo barinés desde todos los espacios”, escribió en Twitter el candidato chavista.
Vale la pena recordar que estos comicios ya se habían llevado a cabo el 21 de noviembre pasado, pero una decisión judicial ocho días después obligó a repetirlos. El Tribunal Supremo de Justicia determinó que Freddy Superlano, quien iba ganando por menos del 1 %, se presentó en la contienda pese a estar inhabilitado por la Contraloría General de la República.
“La oposición ganó y no les gustó, porque tienen que seguir con la hegemonía y la dinastía de ellos”, dijo a la AFP Nelson León, profesor de música jubilado de 68 años, que votó este domingo cerca de la Plaza Bolívar de la capital regional, la homónima ciudad de Barinas.
En esta ocasión, con un margen mucho más amplio, es Garrido, de 54 años, quien ha derrotado a Arreaza, de 48, exyerno y exministro de Hugo Chávez, así como exministro y exvicepresidente de Nicolás Maduro.
Garrido era el candidato de Mesa de la Unidad Democrática, coalición opositora de la que forma parte su colectividad, Acción Democrática, partido del que es secretario general. El gobernador electo se ha desempeñado como concejal de Barinas y actualmente ejerce como diputado en el Consejo Legislativo del estado.
Así la cosas, la oposición logra su cuarta gobernación en el país, en tanto que el oficialismo mantiene la mayoría, con 19 gobernaciones.
A las elecciones fueron convocados el domingo 607.000 de los 870.000 habitantes de Barinas para votar en 543 centros custodiados por 25.000 efectivos de seguridad, 15.000 de ellos militares.
La jornada se desarrolló en relativa normalidad, aunque con denuncias de ventajismo por parte del oficialismo, pues carteles y vallas con el rostro de Arreaza se encontraban en las ciudades y pueblos, mientras que ministros y funcionarios gubernamentales inauguraron obras públicas durante la campaña y entregaron viviendas populares a ciudadanos, informó la AFP.
Lea más sobre esto en: En medio de denuncias de ventajismo, avanza elección en Barinas, cuna del chavismo
Asimismo, Roberto Picón, del CNE, expresó que “los mecanismos de fiscalización y penalización disponibles para el CNE son insuficientes para controlar una acción concertada del Estado, en campaña electoral, como la que se ha evidenciado en Barinas”.
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Pasadas las 10 de la noche del domingo, el Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) informó que el opositor Sergio Garrido había ganado las elecciones a la gobernación del estado de Barinas, cuna y bastión del chavismo. Cuando el conteo de votos llegaba al 98 %, el CNE informó que Garrido se quedó con el 55,36 % (172.497), mientras que Jorge Arreaza, el candidato del chavismo, logó el 41,27 % (128.583).
La elección es significativa, pues rompe con la “dinastía” implantada por el oficialismo en el estado desde 1998, cuando Hugo Chávez llegó a la Presidencia. El máximo cargo en Barinas fue ocupado desde entonces por el padre, Hugo de los Reyes, y posteriormente por dos hermanos del presidente, Adán y Argenis.
Antes de que se oficializaran los resultados, Arreaza había reconocido su derrota: “Barinas querida. La información que recibimos de nuestras estructuras del PSUV indican que, aunque aumentamos en votación, no hemos logrado el objetivo. Agradezco de corazón a nuestra heroica militancia. Seguiremos protegiendo al pueblo barinés desde todos los espacios”, escribió en Twitter el candidato chavista.
Vale la pena recordar que estos comicios ya se habían llevado a cabo el 21 de noviembre pasado, pero una decisión judicial ocho días después obligó a repetirlos. El Tribunal Supremo de Justicia determinó que Freddy Superlano, quien iba ganando por menos del 1 %, se presentó en la contienda pese a estar inhabilitado por la Contraloría General de la República.
“La oposición ganó y no les gustó, porque tienen que seguir con la hegemonía y la dinastía de ellos”, dijo a la AFP Nelson León, profesor de música jubilado de 68 años, que votó este domingo cerca de la Plaza Bolívar de la capital regional, la homónima ciudad de Barinas.
En esta ocasión, con un margen mucho más amplio, es Garrido, de 54 años, quien ha derrotado a Arreaza, de 48, exyerno y exministro de Hugo Chávez, así como exministro y exvicepresidente de Nicolás Maduro.
Garrido era el candidato de Mesa de la Unidad Democrática, coalición opositora de la que forma parte su colectividad, Acción Democrática, partido del que es secretario general. El gobernador electo se ha desempeñado como concejal de Barinas y actualmente ejerce como diputado en el Consejo Legislativo del estado.
Así la cosas, la oposición logra su cuarta gobernación en el país, en tanto que el oficialismo mantiene la mayoría, con 19 gobernaciones.
A las elecciones fueron convocados el domingo 607.000 de los 870.000 habitantes de Barinas para votar en 543 centros custodiados por 25.000 efectivos de seguridad, 15.000 de ellos militares.
La jornada se desarrolló en relativa normalidad, aunque con denuncias de ventajismo por parte del oficialismo, pues carteles y vallas con el rostro de Arreaza se encontraban en las ciudades y pueblos, mientras que ministros y funcionarios gubernamentales inauguraron obras públicas durante la campaña y entregaron viviendas populares a ciudadanos, informó la AFP.
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Asimismo, Roberto Picón, del CNE, expresó que “los mecanismos de fiscalización y penalización disponibles para el CNE son insuficientes para controlar una acción concertada del Estado, en campaña electoral, como la que se ha evidenciado en Barinas”.
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