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Una vez entras a TikTok, es muy fácil perderse entre videos de influencers, coreografías, recetas y recomendaciones de todo tipo. Hay otra categoría de videos que cada día gana más seguidores: cómo prepararse para migrar y qué hacer si algo sale mal.
Muchas cosas pueden salir mal en una travesía migratoria. Ese fue el caso de la familia Huertas. Formada por Marvin, su esposa, su hijo (de 14 años) y su padre (de 64), estuvieron perdidos por 23 días en la selva del Darién.
Marvin salió de Venezuela con su familia a finales de agosto del año pasado con el objetivo de asegurar un mejor futuro para su hijo. Antes de emprender el viaje, se preparó viendo documentales en YouTube y leyendo publicaciones en grupos de Facebook. Al llegar a la frontera entre Colombia y Panamá, Marvin se puso en contacto con una traficante para hacer el cruce por la selva del Darién. Ella le detalló las rutas disponibles, que variaban en longitud, dificultad y costos, entre US$350 y US$950 por persona.
A pesar de haber pagado más de US$2.000 por una de las rutas más cortas, la presencia de agentes policiales colombianos en la frontera hizo que la traficante redirigiera a Marvin y su familia a una ruta más larga y difícil. Y no le dijo que, en vez de uno, serían cuatro días.
Lo primero que hicieron fue entregarles unos brazaletes para que los guardias armados de la selva pudieran identificarlos y protegerlos durante el trayecto. Entonces, empezaron a caminar.
En la ruta había estaciones o campamentos. En el primer campamento había wifi y comida. Fue ese día, el 6 de septiembre, cuando Marvin se puso en contacto con su primo Alberto. Sin embargo, tras abandonar el primer campamento, los pies de Nelo, padre de Marvin, se ensangrentaron al punto de estar en carne viva. Sin haberlo previsto, a partir de ese momento la familia se quedó atascada en medio de la selva.
Marvin me explicó: “No podíamos avanzar por mi padre. No teníamos suficiente comida, pero otros migrantes nos ayudaron. Migrantes de Venezuela, Colombia, Ecuador, Haití e incluso de China nos dieron comida y medicinas. Nos grababan a medida que iban pasando. Ahora sé que a medida que nos grababa más gente, nuestras posibilidades de sobrevivir eran mayores”.
Tras pasar dos semanas perdidos en la selva, la esposa y el hijo de Marvin decidieron salir con otro grupo en busca de ayuda. Grabaron un último video de su ubicación, que las autoridades utilizaron para dar con su paradero.
El 29 de septiembre a la 1:30 p. m., 23 días después de ingresar al Darién, el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá llegó para rescatar a Marvin y a su padre, quien infortunadamente falleció por una infección renal días después de ser rescatado. Las primeras palabras de uno de los oficiales a Marvin fueron: “Eres famoso en TikTok, tu historia está en todas partes. El jefe llamó y dijo que teníamos que rescatarte inmediatamente”. Lo que Marvin no sabía en ese momento es que su historia se había vuelto viral en TikTok. De hecho, así fue como conocí a Marvin.
Un video sobre la familia Huertas publicado en TikTok por @Historiademigrantes, cuenta creada por la venezolana Sasha Arteaga, se volvió viral con 384.900 vistas y 8.400 me gusta. En el video, Arteaga cuenta la historia de la familia Huertas e insta a sus seguidores a proporcionar cualquier actualización o información sobre el paradero de ellos en los comentarios.
Cada día, más de 2.000 migrantes atraviesan el difícil terreno de la selva del Darién. El año pasado, más de 252.000 venezolanos cruzaron el Darién, alrededor del 60 % del total de migrantes que realizaron el peligroso viaje. Un marcado contraste con los 3.000 venezolanos que cruzaron entre 2010 y 2021. El Darién es uno de los cruces migratorios más peligrosos del mundo. Entonces, ¿cómo se preparan las personas para emprender este viaje y qué ocurre si se pierden? Descubrí mis respuestas en TikTok.
Otra cuenta de TikTok, @Lamaspolemica, administrada por la influencer venezolana Elieska Ocando, se unió a la causa de la familia Huertas el 27 de septiembre, amplificando el mensaje de @Historiasdemigrantes e instando a sus seguidores a etiquetar la cuenta oficial del Servicio Nacional de Fronteras de Panamá: @senafrontpanama. Los comentarios en su video de TikTok revelaron que muchas personas habían presenciado y, en algunos casos, ayudado a la familia Huertas a lo largo de la selva del Darién.
La familia de Marvin en Venezuela estaba monitoreando de cerca la situación. De hecho, Alberto, primo de Marvin, fue quien encabezó el esfuerzo poniéndose en contacto con numerosas cuentas de redes sociales como @Historiademigrantes y @Lamaspolemica. Movilizó a familiares y amigos para captar la atención de las autoridades y los medios de comunicación a través del alcance viral de TikTok.
Solo en 2023, el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá rescató a 628 migrantes y recuperó 21 cadáveres en la selva del Darién, en su mayoría venezolanos, según reveló Vanessa Calviño, jefa de comunicaciones del Servicio Nacional de Fronteras de Panamá, quien destacó: “Recuerdo muy bien este caso en particular por varios factores: se trataba de una familia completa y el grupo familiar coordinó una campaña para pedir apoyo, por lo que recibimos mensajes desde varias plataformas, por Facebook, Instagram, por mensajes directos y correos electrónicos institucionales”. Agregó que la familia Huertas utilizó el hashtag #DarienNoEsUnaRuta, el principal hashtag del Servicio Nacional de Fronteras, para llamar su atención.
Para fortuna de Marvin y su familia, la estrategia funcionó. A diferencia de muchas otras patrullas fronterizas en el mundo, el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá opera a través de diversas redes sociales y plataformas, todas unificadas bajo el mismo nombre de usuario @Senafrontpanama. Su presencia se extiende a plataformas como X, YouTube, Instagram, TikTok, WhatsApp y su sitio web.
Vanessa reveló que su agencia es contactada regularmente para reportar personas desaparecidas, fallecidas o solicitudes de atención médica en la zona del Darién. Aunque los informes verbales de los migrantes en las ciudades locales son la forma más común de contacto, las redes sociales desempeñan un papel crucial.
En un reciente estudio publicado por el Barómetro, la organización destacó que TikTok es una de las plataformas de redes sociales más utilizadas por los migrantes para documentar y compartir sus travesías a través del Darién. Según Laura Cortés, directora ejecutiva del Barómetro, mientras WhatsApp ocupa el primer lugar en popularidad, seguido de Instagram y Facebook, TikTok ocupa la cuarta posición. En particular, el contenido de video es el método preferido de documentación, ya que permite a los migrantes mostrar los obstáculos en tiempo real y transmitir información a lo largo de su viaje.
Laura anotó: “Las personas migrantes necesitan información buena y de calidad, y se termina informando a través de TikTok porque no hay información buena y accesible a su disposición”.
En mi investigación, he observado que, aunque migrantes de diversas nacionalidades utilizan TikTok, la prevalencia de la plataforma parece especialmente pronunciada entre los migrantes latinoamericanos.
Una tiktoker de Namibia también compartió su viaje a través del Darién hasta llegar a Estados Unidos, aportando información valiosa y relacionándose con otros usuarios angloparlantes que le pidieron consejos de viaje. Reuters también ha informado de un aumento de los migrantes chinos que cruzan el Tapón del Darién y utilizan Douyin, la versión china de TikTok, para difundir información. Esto pone de relieve la versatilidad de la plataforma para atender a diversas comunidades de la población migrante.
TikTok permite documentar y compartir información valiosa, pero también plantea riesgos, ya que expone a personas que decidieron dejarlo todo a nuevas formas de vulneración y explotación.
La odisea de la familia Huertas sirve como un lente a través del cual se evidencia la intrincada interacción de la tecnología y la migración. El inesperado papel de TikTok en su rescate muestra la doble naturaleza de las redes sociales, un instrumento que puede ayudar u obstaculizar el viaje de un migrante.
Tanto los gobiernos como las organizaciones intergubernamentales deben comprender el papel de las redes sociales para promover vías seguras para la migración y entender mejor las necesidades reales de los migrantes.
El incremento en las restricciones impuestas por los gobiernos y la falta de información oficial sobre rutas seguras dirigen a los migrantes hacia rutas más peligrosas, obligándolos a tomar caminos irregulares controlados por grupos armados. De hecho, según Human Rights Watch, redes sociales como TikTok pueden beneficiar a los traficantes al permitirles difundir información falsa para convencer a los migrantes a tomar ciertas rutas y al facilitar sus rastreo a través de plataformas digitales.
TikTok es un espacio en el que conviven migrantes creadores de contenido tratando de ayudar a sus pares, al tiempo que traficantes y contrabandistas de personas buscan atraerlos a sus redes criminales. Esta dura realidad pone a los migrantes en una posición vulnerable, convirtiéndose involuntariamente en objetivos de múltiples violencias a lo largo de su viaje.
La historia de la familia Huertas subraya la resistencia y la vulnerabilidad entretejidas en el proceso migratorio. La migración ya no se limita a los caminos físicos, sino que se extiende a nuevas rutas digitales.
Si no fuera por TikTok no sabemos si Marvin y su familia estarían vivos.
La búsqueda de refugio continúa, no solo a pie sino también a través de la viralidad de las redes sociales. Los migrantes están organizándose en plataformas como TikTok y asegurándose de llenar el vacío de Estados que no garantizan su seguridad.
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