A Pedro Castillo, presidente de Perú, se le están complicando aún más las cosas ad portas de cumplir un año en el poder. El último golpe bajo: la Comisión de Fiscalización del Congreso recomendó acusar constitucionalmente al mandatario por presuntos delitos de organización criminal, negociación incompatible y aprovechamiento indebido del cargo. ¿Qué le deparará esto al mandatario?
“En general, es un presidente que se sigue debilitando, con acusaciones de corrupción que involucran a personas que estuvieron muy cerca de él y que protegió. Su popularidad cayó rápido, y aunque ha logrado cierta estabilidad en 20 % entre los más pobres y sectores rurales, este último mes ha vuelto a caer ligeramente”, le comentó a este diario Eduardo Dargent, politólogo de la Pontificia Universidad Católica del Perú.
A la noticia de la comisión del Congreso se sumaron dos golpes más: la moción de censura contra el ahora exministro del Interior, Dimitri Senmache, por un caso que involucra a Castillo, y la renuncia del presidente al partido Perú Libre, que lo llevó al poder. Vamos a explicar el asunto por partes.
Por un lado, el parlamento sostuvo que Senmache es responsable en la fuga de Juan Silva Villegas, exministro de Transportes y Comunicaciones, quien tenía una orden de impedimento de salida del país por su presunta participación en la red criminal, por la que también están investigando a Castillo, para adjudicar obras a cambio de beneficios ilegales. Este es el cuarto ministro del gabinete en ser censurado en menos de un año.
“Son hechos que están relacionados, porque conforme avanzan las investigaciones de la Fiscalía sobre el presidente, va aumentando el número de delatores, testigos y evidencias, y se hace más difícil para quienes todavía apoyan a Castillo seguir respaldándolo”, le comentó a El Espectador Carlos Meléndez, académico de la Universidad Diego Portales.
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Este lunes, Castillo nombró a su sexto ministro del Interior en menos de un año. Mariano González, quien fue titular de Defensa en el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski, llegó al Ministerio en reemplazo de Senmache. La cartera del Interior es la más inestable en la gestión del mandatario; en once meses fue liderada por Juan Carrasco (69 días), Luis Barranzuela (27 días), Avelino Guillén (85 días), Alfonso Chávarry (110 días) y Dimitri Senmache (41 días).
Las investigaciones contra Castillo
El fiscal general dice que encontró indicios de que el mandatario de los peruanos lideró una organización criminal que llegó a beneficiarse con coimas de empresarios que, el año pasado, ganaron irregularmente una licitación de más de US$62 millones para la construcción de un puente, según cifras recopiladas por El País, de España.
Y es un proceso con varios prófugos. Están denunciados y con orden de captura Juan Silva, exministro; Bruno Pacheco, exsecretario de Palacio, y un sobrino de Castillo. Sin mencionar que la Fiscalía recibió los testimonios de los empresarios Karelim López y Zamir Villaverde, quienes admitieron haber representado a empresas que ganaron las adjudicaciones y que han presentado audios haciendo coordinaciones con los funcionarios imputados.
Hasta mayo de este año, el mandatario ya había sido incluido en tres investigaciones por presuntos actos de corrupción y una sobre plagio.
La salida de Perú Libre, ¿se avecina otro intento de vacancia?
La alianza entre el presidente Pedro Castillo y Vladimir Cerrón, fundador de Perú Libre, terminó el jueves 30 de junio. Cerrón, condenado por corrupción en 2019 e inhabilitado para ejercer cargos públicos, habría sido el gestor de toda la campaña de Castillo y quien, hasta hace unas semanas, le hablaba al oído.
“La invitación a renunciar [al partido] tiene más bien el aspecto de una atildada amenaza. Funciona claramente como una indicación de que los votos del cerronismo en el Congreso no están necesariamente con el presidente Castillo y, ante una nueva iniciativa de vacancia, todo podría suceder”, se lee en una editorial del diario El Comercio.
En esto coincide Wilmar Elera, vocero de la bancada de Somos Perú, quien comentó que, tras la separación de Pedro Castillo y Perú Libre, el Congreso podría alcanzar los votos suficientes para sacar al presidente de la República por incapacidad moral.
“Teóricamente, esto es posible, pero en la práctica es difícil. La bancada de Perú Libre se ha ido reduciendo; antes era de 37 miembros y ahora es un grupo parlamentario de doce, y no necesariamente estas personas están articuladas”, explicó Meléndez, quien agregó que Castillo ha sabido ganarse algunas lealtades en otros grupos parlamentarios “independientes”.
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Dargent también explicó que “es paradójico lo que te voy a decir, hay razones para la estabilidad y que todavía [Castillo] se mantenga por un tiempo, pero también razones para que caiga”. El experto comentó que, en este momento, muchos congresistas buscan quedarse en sus puestos. “Saben que si cae Castillo es muy probable que caigan todos. Sin mencionar que el Ejecutivo les brinda cosas para sus regiones y también coinciden en temas de política pública, lo que en cierta medida da estabilidad”, agregó el analista.
Para Carlos Meléndez, en sumas y restas, definitivamente el presidente podrá perder un gran número de apoyos, “pero todavía podría llegar a tener los 44 votos que se requieren para impedir una destitución presidencial”.
Los puntos determinantes, ¿una izquierda debilitada?
Se avecinan unas elecciones regionales y municipales que, según dice Meléndez, serán claves para demostrar la real dimensión del andamiaje político de los grupos de izquierda en el país. El 2 de octubre, los peruanos están llamados a las urnas para elegir a 25 gobernadores regionales, cerca de 200 alcaldes provinciales y casi 1.700 alcaldes municipales.
“Las elecciones regionales van a desenmascarar realmente el poder que tiene Vladimir Cerrón, porque ninguno de sus candidatos a gobernadores está realmente siendo competitivo por ahora”, comentó el experto de la Universidad Diego Portales. Agregó que en octubre podríamos ver una victoria de varios movimientos independientes, de caudillos locales, y no de la izquierda.
“El poder que tienen ahora, el número de parlamentarios que tiene Vladimir Cerrón a través de Perú Libre y la victoria electoral de Pedro Castillo fueron una anécdota, fue un episodio del volátil electorado peruano. Si no logran ganar una alcaldía local provincial importante o algún gobierno regional, la derecha se va a quitar el vendaje de los ojos y se dará cuenta de que no están ante un gran aparato movilizado por todo el país”, agregó Meléndez.
Sin mencionar que se avecina el primer año de Pedro Castillo en el poder, un asunto que podría resultar en otro punto de quiebre en su administración. El presidente puede hacer algunos ajustes en su gabinete de ministros, “sobre todo ahora que ha salido Perú Libre de la coalición oficialista”, comentó Meléndez.
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