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Una ardilla “superestrella” se ha vuelto el símbolo de la libertad que, según los republicanos, el actual gobierno demócrata quiere arrebatarles a los ciudadanos.
Se trata de Peanut, un roedor que era tenido como mascota en el estado de Nueva York, que contaba con cientos de miles de seguidores en redes sociales (más de 700.000 en Instagram) y que fue confiscada y sacrificada bajo sospecha de rabia por las autoridades en las últimas horas.
“El mismo gobierno al que no le importan los cientos de miles de inmigrantes ilegales que llegan a nuestro país no quiere que tengamos mascotas”, dijo J. D. Vance, senador por Ohio y fórmula vicepresidencial de Donald Trump durante un mitin en Carolina del Norte. “Es una locura”, agregó.
Según Vance, Trump enfureció con la noticia de la muerte de Peanut, quien fue sacrificada junto a un mapache que fue confiscado del mismo predio, en la ciudad de Pine, estado de Nueva York, gobernado por Kathy Hochul, del Partido Demócrata.
El Departamento de Conservación Ambiental del Estado de Nueva York explicó que la ardilla fue sacrificada para realizar pruebas de rabia después de que mordió a un funcionario involucrado en el procedimiento, según registraron distintos medios de comunicación. El mapache también fue sacrificado para realizar pruebas de rabia, según la entidad.
Según The New York Times, el dueño de Peanut se llama Mark Longo, de 34 años, quien encontró al animal hace siete años en la ciudad de Nueva York. “Su madre fue atropellada por un coche y él estaba caminando por una calle muy transitada del centro de Manhattan”, dijo Longo en una entrevista citada por el medio neoyorkino. “Terminó subiéndose por mi pierna”.
Fue el miércoles pasado que funcionarios de la autoridad ambiental llegaron a la residencia Longo. “Tras múltiples informes del público sobre el alojamiento potencialmente inseguro de animales salvajes que podrían transmitir la rabia y la tenencia ilegal de animales salvajes como mascotas, el DEC llevó a cabo una investigación”, dijo el departamento el jueves en un comunicado citado por el Times. “La investigación del DEC está en curso y se proporcionará información adicional a medida que esté disponible”.
El mismo medio recogió la denuncia de Longo, según quien los oficiales saquearon su casa. “Me hicieron sentarme afuera durante cinco horas”, dijo. “Ni siquiera me dejaban alimentar a mis caballos”.
Longo busca ahora interponer acciones legales, que ha estado promoviendo con la etiqueta “Justiceforpeanut” (Justicia para Peanut). La campaña GoFundMe que lanzó ha recaudado hasta ahora 140.000 dólares, según la BBC.
“En el estado de Nueva York, tenemos santuarios para inmigrantes ilegales mientras mascotas inocentes son asesinadas”, escribió Nick Langworthy, congresista republicano por Nueva York.
Hasta Elon Musk, dueño de X, Tesla y SpaceX, acérrimo defensor de Donald Trump, se sumó a la controversia a pocas horas de las elecciones del martes, en la que se elegirá entre Donald Trump y Kamala Harris para la presidencia. “Vota ¡Por PNut! ¡Por la libertad!”.
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