La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum (d), y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Foto: EFE - Isaac Esquivel
Septiembre no volvió a ser un mes común para los mexicanos. La nación sabe desde hace 40 años que hay que prepararse para cualquier eventualidad. Sin embargo, nadie en el país estaba listo para los sacudones que ha provocado –y seguirá provocando– el Congreso mexicano, cuyas réplicas apenas empezarán a sentirse en octubre.