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La Campaña Colombia fuera de Colombia y otras organizaciones de la sociedad civil en Washington le piden al presidente estadounidense, Joe Biden, aprobar el alivio migratorio, conocido también como el programa Salida Forzosa Diferida (DED, por sus silgas en inglés), para más de 200.000 colombianos indocumentados, aprovechando la visita del presidente Gustavo Petro al país norteamericano. De cara a la reunión que los dos jefes de Estado sostendrán en pocas horas, estas iniciativas están convocando a un encuentro al frente de la Casa Blanca, en el Parque Lafayette Square, entre la 1:30 p. m. y las 2:30 p. m. de hoy.
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“Como resultado de los más de 60 años de conflicto armado, cientos de miles de ciudadanos colombianos se han visto obligados a abandonar el país y a vivir irregularmente como indocumentados en Estados Unidos”, se lee en el comunicado emitido por Colombia fuera de Colombia. “El alivio migratorio le daría al gobierno colombiano actual el tiempo necesario para implementar los acuerdos de paz, acompañado de políticas de justicia social, especialmente para las comunidades afrocolombianas, indígenas y campesinas, que han sido las más afectadas por el conflicto armado”, concluye el texto.
Los intentos de Colombia para lograr beneficios migratorios en Estados Unidos
En noviembre pasado, el Gobierno de Colombia, a través de su embajada en Washington, le pidió formalmente a Estados Unidos que “considere la autorización de un beneficio migratorio temporal” para los colombianos que se encuentren en ese país. De hecho, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, recibieron una carta en la que se le pide a la administración Biden que los colombianos sean incluidos en el DED, que busca que los connacionales no sean devueltos al llegar a Estados Unidos. Esto, dado que el programa, del que se han beneficiado países como Venezuela (cuyo plazo caducó en julio de 2022) o Liberia, permite a migrantes de países con conflictos o desastres naturales permanecer en el país norteamericano.
Uno de los beneficios de estar en él, al que por ahora solo pertenecen Liberia y Hong Kong, es obtener un permiso de trabajo por un corto período de tiempo, que puede ayudar a regularizar la situación de miles de colombianos que no tienen su situación migratoria definida. “Nuestro objetivo es que nuestra gente pueda regresar a Colombia de manera digna, si así lo desea, o ajustar su estatus migratorio en los Estados Unidos, si tiene las vías legales para hacerlo”, se lee en la carta del gobierno Petro a la Casa Blanca, que fue firmada por el embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo.
Ahora bien, el panorama no es sencillo. El mismo Murillo ha dicho: “Tenemos diferentes perspectivas, pero vamos a trabajar para avanzar en cada uno de sus asuntos (…). Es un buen momento para la discusión”. Por su parte, Brian Nichols, subsecretario de Estado de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, en entrevista con NTN24, agregó: “Hay varios factores en consideración. Creo que la situación en Colombia es buena, en cuanto a seguridad, comparado con años anteriores. En cuanto a estabilidad política (…), las cosas van bien en Colombia (…), siempre hemos estudiado eso. Para mí, cuando las cosas van tan bien, es difícil justificar esa medida”.
En medio de ello, la sociedad civil ha presionado. Por ejemplo, en febrero pasado, la ONG Semillas Colombia, en medio de un evento en el condado de Broward, en el norte de Miami, llevó a cabo una jornada a favor del DED. Su directivo, Juan Carlos Naranjo, le dijo a EFE que el grupo emprendió una campaña que incluye el cabildeo con congresistas estadounidenses para lograr un programa que beneficie a solicitantes de asilo colombianos, así como se ha hecho con venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos, entre otros ciudadanos más. Con respecto al programa, añadió que se trata de un mecanismo viable, pues está contemplado dentro los poderes ejecutivos del presidente. Explicó que unos 7.000 colombianos están indocumentados en el condado de Miami-Dade, entre los cerca de 200.000 que hay en el país.
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