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¿Cómo curar algo que no está diagnosticado? Es una pregunta que debería hacerse sobre su salud física y mental, pero también sobre su comportamiento. En su hogar o su entorno personal puede estar merodeando una actitud destructiva y usted podría contagiarse de esta con facilidad.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, Somos Panas Colombia, la campaña de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) en el país, lanzó una herramienta virtual para que los colombianos y las colombianas se realicen un “autoexamen” y conozcan si se han contagiado de una de las condiciones más aterradoras de esta era: la xenofobia.
La xenofobia es una forma de odio u hostilidad hacia los extranjeros que se alimenta del miedo y los prejuicios a personas procedentes de otros países. Los prejuicios son construidos por una realidad distorsionada que hace que se profundice el rechazo y la discriminación. Lo que hay que entender es que esa actitud hacia los extranjeros surge de una construcción de ideas que está muy alejada de la realidad.
Las actitudes xenófobas no distinguen estratos: cualquiera que tenga bajos niveles de empatía y no logre comprender la realidad de las otras personas, o dicho de manera más coloquial “ponerse en sus zapatos”, puede contagiarse. Pero también hay otras maneras de contraer este tipo de actitudes destructivas, como la presión social o ser víctima de manipulación de la información.
El objetivo del Empatímetro, como llamó Somos Panas al test, es medir los niveles de empatía y solidaridad de los colombianos y colombianas frente a los migrantes. Los resultados de la evaluación pueden ser tres: empático, indiferente o en riesgo de cargar con el peso de la xenofobia.
“Los movimientos mixtos a gran escala de personas pueden llegar a causar miedo; el miedo se va convirtiendo poco a poco en xenofobia, y sin darnos cuenta, la xenofobia se normaliza, gana terreno y se transforma en una carga pesada que nos resta empatía y solidaridad”, dijo Rocío Castañeda, vocera de Acnur en Colombia.
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Desde que comenzó la más reciente ola de la migración venezolana por América Latina se han visto múltiples representaciones de xenofobia que están marcadas por el miedo, la desinformación y los prejuicios que cargan las personas locales. Como explica Castañeda, “es clave saber quiénes están en riesgo de cargarla porque la xenofobia limita, impide ver las posibilidades que brinda la integración, y lo peor es que causa daño y dolor, no solo a los migrantes, sino también a nosotros mismos”.
El ejercicio tarda nada más un par de minutos y cualquier persona puede realizarlo desde su teléfono celular o desde un computador entrado a la página de Somos Panas Colombia. La invitación de la campaña es a que cada ciudadano o ciudadana revive sus actitudes y descubra qué tan cerca está de la discriminación. Esto funciona como las citas médicas: no puede curar algo que no está diagnosticado.
El primer paso es reconocer si tiene un problema y luego de esto encontrar los mecanismos para sanar y protegerse. Acnur Colombia también ofrece un entrenamiento adecuado para liberarse de la xenofobia que puede encontrar haciendo clic en el siguiente enlace.
¿Cómo ayudar a reducir los niveles de xenofobia? Este proceso enriquecedor y necesario requiere que todos y todas tengan una mirada abierta frente a los grandes aportes de los flujos migratorios en el mundo. Lo que se ha aprendido durante estos últimos años brinda nuevos espacios de reflexión y crecimiento a la sociedad. Los colombianos pueden empezar a descubrirse desde la diferencia y las similitudes con el pueblo venezolano. La xenofobia es un tema del que todos debemos informarnos
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