Sacudón político en Perú: Castillo tendrá que nombrar su tercer gabinete
La renuncia de la presidenta del Consejo de Ministros de Perú, Mirtha Vásquez, precipitó la última crisis de Gobierno peruano. ¿Qué sigue?
El lunes en la noche, la presidenta del Consejo de Ministros de Perú, Mirtha Vásquez, presentó su renuncia ante “la imposibilidad de lograr consensos en beneficio del país”. Su salida expuso de nuevo las debilidades en el Gobierno de Pedro Castillo, quien deberá conformar su tercer gabinete en sus primeros seis meses de mandato.
“Como siempre he anunciado en mis intervenciones, el gabinete está en constante evaluación. Por tal motivo, he decidido renovarlo y conformar un nuevo equipo”, señaló Castillo en Twitter, luego de conocerse la renuncia de Vásquez.
Aunque Castillo trató de dar la impresión de que el cambio había sido por decisión suya, fue muy claro que la renuncia de Vásquez se presentó antes por el descontento que había en el gabinete con el presidente.
¿Por qué renunció Vásquez?
La funcionaria decidió dejar el Gobierno tras la más reciente crisis en el Ministerio de Interior. El jefe de esa cartera, Avelino Guillén, renunció el viernes de la semana pasada luego de manifestar su desilusión con el mandatario por no recibir su apoyo durante una disputa con el comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), Javier Gallardo.
- Guillén y Gallardo se enfrentaron desde mediados de enero por los relevos y ascensos dentro de las fuerzas de seguridad que el exministro de Interior consideró irregulares.
- Gallardo sacó a más de 1.700 agentes experimentados en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción, lo que molestó a Guillén.
“Esperaba que el presidente de la República respaldara a su ministro, pero prefirió guardar silencio y ponerse de perfil. Ese es un silencio estruendoso, porque dice mucho, ha expresado una posición de respaldo claro y directo al señor comandante general de la Policía. Me siento en calma porque, a pesar de todas las limitaciones y enormes retos, alcanzamos los objetivos que inicialmente nos habíamos propuesto”, sostuvo Guillén.
📄 Te puede interesar: Crece la polémica por el libro “La traición de Ana Frank”, ¿qué dicen sobre él?
Se preveía que Vásquez, aliada de Guillén, apoyaría al exministro de Interior y presentaría su propia renuncia para manifestar su inconformidad con el silencio de Castillo en el lío por los ascensos en la Policía. La presidenta del Consejo de Ministros había actuado de mediadora en la disputa entre Guillén y Gallardo, pidiéndole a Castillo apoyar al primer y jubilar al segundo. Sin embargo, su plan no fue escuchado por el mandatario, quien continuó guardando silencio frente a la corrupción en la Policía.
“La crisis en el sector del Ministerio del Interior no es un asunto cualquiera ni coyuntural, es la expresión de un problema estructural de corrupción en diversas instancias del Estado que nos viene golpeando y que es momento de abordar y confrontar con firmeza”, dijo Vásquez en su carta de renuncia.
La falta de firmeza de Castillo contra las denuncias de corrupción en la Policía lo ha dejado completamente solo, pero no es la primera vez que su debilidad le trae problemas de gobernabilidad.
Luego de llegar al cargo, el presidente conformó un gabinete repleto de aliados de Vladimir Cerrón, amo y señor del partido Perú Libre, con el que Castillo ganó las elecciones. Entre ellos estaba Guido Bellido, quien compartía las posturas radicales de Cerrón y llegó a ocupar el cargo de presidente del Consejo de Ministros. Sin embargo, a los pocos meses de conformado su gabinete, el mandatario comenzó a cambiar las piezas y ajustarlas a una tendencia más socialdemócrata para desmarcarse del extremismo de Cerrón, quien no recibió bien el recambio.
Si bien Perú está acostumbrado a ver cambios constates de presidentes y ministros, la situación actual ya resulta excesiva incluso para sus propios estándares, como señala Juan Diego Quesada en El País. Y es que, para noviembre de 2021, Castillo ya se había convertido en el presidente latinoamericano que más cambios de ministros había tenido en sus primeros 110 días de gobierno. En promedio, un ministro salía de su gabinete cada 11 días.
👀 Te recomendamos: EE. UU. empezó a enviar venezolanos deportados a Colombia, según fuentes de CNN
Este segundo cambio de gabinete de Castillo, que daría lugar a su tercer equipo de ministros en sus primeros seis meses de gobierno, deja manifiesta la debilidad del mandatario. En medio de la crisis de gobierno, la oposición ha dicho que prepara una acusación constitucional contra el presidente para destituirlo.
“He decidido presentar Acusación Constitucional contra el presidente Castillo por sus permanentes infracciones constitucionales, su incapacidad flagrante y la evidente corrupción de su Gobierno. El Congreso decidirá su destitución, a través del juicio político correspondiente”, anunció la tercera vicepresidenta del Congreso de Perú, Patricia Chirinos.
Ahora Castillo deberá correr para conformar su nuevo gabinete y recuperarse cuanto antes de la crisis que dejó la salida de Vásquez para dar una imagen de fortaleza. Entre los nombres que se barajan para sustituir a la presidente del Consejo de Ministros están Hernando Cevallos, actual ministro de Salud; Marisol Espinoza, exvicepresidenta durante el mandato de Ollana Humala; y Roger Nájar, quien fue congresista por el partido Unión por el Perú.
👀🌎📄 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias en el mundo? Te invitamos a verlas en El Espectador.
El lunes en la noche, la presidenta del Consejo de Ministros de Perú, Mirtha Vásquez, presentó su renuncia ante “la imposibilidad de lograr consensos en beneficio del país”. Su salida expuso de nuevo las debilidades en el Gobierno de Pedro Castillo, quien deberá conformar su tercer gabinete en sus primeros seis meses de mandato.
“Como siempre he anunciado en mis intervenciones, el gabinete está en constante evaluación. Por tal motivo, he decidido renovarlo y conformar un nuevo equipo”, señaló Castillo en Twitter, luego de conocerse la renuncia de Vásquez.
Aunque Castillo trató de dar la impresión de que el cambio había sido por decisión suya, fue muy claro que la renuncia de Vásquez se presentó antes por el descontento que había en el gabinete con el presidente.
¿Por qué renunció Vásquez?
La funcionaria decidió dejar el Gobierno tras la más reciente crisis en el Ministerio de Interior. El jefe de esa cartera, Avelino Guillén, renunció el viernes de la semana pasada luego de manifestar su desilusión con el mandatario por no recibir su apoyo durante una disputa con el comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), Javier Gallardo.
- Guillén y Gallardo se enfrentaron desde mediados de enero por los relevos y ascensos dentro de las fuerzas de seguridad que el exministro de Interior consideró irregulares.
- Gallardo sacó a más de 1.700 agentes experimentados en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción, lo que molestó a Guillén.
“Esperaba que el presidente de la República respaldara a su ministro, pero prefirió guardar silencio y ponerse de perfil. Ese es un silencio estruendoso, porque dice mucho, ha expresado una posición de respaldo claro y directo al señor comandante general de la Policía. Me siento en calma porque, a pesar de todas las limitaciones y enormes retos, alcanzamos los objetivos que inicialmente nos habíamos propuesto”, sostuvo Guillén.
📄 Te puede interesar: Crece la polémica por el libro “La traición de Ana Frank”, ¿qué dicen sobre él?
Se preveía que Vásquez, aliada de Guillén, apoyaría al exministro de Interior y presentaría su propia renuncia para manifestar su inconformidad con el silencio de Castillo en el lío por los ascensos en la Policía. La presidenta del Consejo de Ministros había actuado de mediadora en la disputa entre Guillén y Gallardo, pidiéndole a Castillo apoyar al primer y jubilar al segundo. Sin embargo, su plan no fue escuchado por el mandatario, quien continuó guardando silencio frente a la corrupción en la Policía.
“La crisis en el sector del Ministerio del Interior no es un asunto cualquiera ni coyuntural, es la expresión de un problema estructural de corrupción en diversas instancias del Estado que nos viene golpeando y que es momento de abordar y confrontar con firmeza”, dijo Vásquez en su carta de renuncia.
La falta de firmeza de Castillo contra las denuncias de corrupción en la Policía lo ha dejado completamente solo, pero no es la primera vez que su debilidad le trae problemas de gobernabilidad.
Luego de llegar al cargo, el presidente conformó un gabinete repleto de aliados de Vladimir Cerrón, amo y señor del partido Perú Libre, con el que Castillo ganó las elecciones. Entre ellos estaba Guido Bellido, quien compartía las posturas radicales de Cerrón y llegó a ocupar el cargo de presidente del Consejo de Ministros. Sin embargo, a los pocos meses de conformado su gabinete, el mandatario comenzó a cambiar las piezas y ajustarlas a una tendencia más socialdemócrata para desmarcarse del extremismo de Cerrón, quien no recibió bien el recambio.
Si bien Perú está acostumbrado a ver cambios constates de presidentes y ministros, la situación actual ya resulta excesiva incluso para sus propios estándares, como señala Juan Diego Quesada en El País. Y es que, para noviembre de 2021, Castillo ya se había convertido en el presidente latinoamericano que más cambios de ministros había tenido en sus primeros 110 días de gobierno. En promedio, un ministro salía de su gabinete cada 11 días.
👀 Te recomendamos: EE. UU. empezó a enviar venezolanos deportados a Colombia, según fuentes de CNN
Este segundo cambio de gabinete de Castillo, que daría lugar a su tercer equipo de ministros en sus primeros seis meses de gobierno, deja manifiesta la debilidad del mandatario. En medio de la crisis de gobierno, la oposición ha dicho que prepara una acusación constitucional contra el presidente para destituirlo.
“He decidido presentar Acusación Constitucional contra el presidente Castillo por sus permanentes infracciones constitucionales, su incapacidad flagrante y la evidente corrupción de su Gobierno. El Congreso decidirá su destitución, a través del juicio político correspondiente”, anunció la tercera vicepresidenta del Congreso de Perú, Patricia Chirinos.
Ahora Castillo deberá correr para conformar su nuevo gabinete y recuperarse cuanto antes de la crisis que dejó la salida de Vásquez para dar una imagen de fortaleza. Entre los nombres que se barajan para sustituir a la presidente del Consejo de Ministros están Hernando Cevallos, actual ministro de Salud; Marisol Espinoza, exvicepresidenta durante el mandato de Ollana Humala; y Roger Nájar, quien fue congresista por el partido Unión por el Perú.
👀🌎📄 ¿Ya te enteraste de las últimas noticias en el mundo? Te invitamos a verlas en El Espectador.