Terremoto en Haití deja muchos daños y víctimas: esto se sabe hasta ahora

El terremoto de este 14 de agosto dejó destrozos, varias casas y edificios se vinieron al suelo. (Imagen tomada de Twitter del editor de Le Nouvelliste Franz Duval)

Foto: @Frantzduval

Durante varios segundos, a las 8:29 de la mañana del sábado 14 de agosto, la tierra se sacudió fuertemente en Haití. En Puerto Príncipe, capital del país, miles salieron a las calles presas del pánico de un sacudón tan potente que se sintió hasta Cuba, según reportes.

“Estaba dentro de mi casa cuando empezó a temblar, estaba cerca de una ventana y vi caer todas las cosas”, dijo a la AFP Christella Saint Hilaire, de 21 años, que vive cerca del epicentro del terremoto.

“Me cayó un trozo de pared en la espalda pero no estoy demasiado herida”, continuó la joven. “Varias casas se han derrumbado por completo”.

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El Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Cuba (Cenais) informó este sábado que se sintieron en el oriente del país los efectos del terremoto de esta mañana en Haití, menos de 24 horas después de reportar uno de menor intensidad en la misma zona.

La situación es “dramática”, dijo el primer ministro del país caribeño, Ariel Henry, quien reveló que el movimiento provocó “varias pérdidas de vidas humanas y materiales”. En un mensaje en Twitter, Henry llamó “al espíritu de solidaridad y compromiso de todos los haitianos” para enfrentar “esta dramática situación que vivimos actualmente”.

Magnitud del movimiento: El sismo tuvo una magnitud 7,2 grados en la escala de Richter, según el Servicio Geológico de Estados Unidos, que emitió una alerta de tsunami.

Tsunami: Las autoridades de EE. UU. emitieron una alerta de tsunami en la capital y algunas costas de Haití debido al terremoto y advirtieron que es “probable” que el sismo deje “un alto número de víctimas”.

La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. (NOAA, en inglés), que vigila la emergencia de posibles tsunamis en todo el mundo, avisó de la “amenaza” de que se produzcan olas gigantescas casi una hora después de que se registrara el fuerte terremoto.

”Olas de tsunami que pueden llegar a 1 o 3 metros sobre el nivel de la marea son posibles en algunas costas de Haití”, indicó la NOAA.

Añadió que dicho tsunami podría alcanzar las costas de Puerto Príncipe, las de la ciudad sureña de Jacmel y las de Jérémie (suroeste) y que la amenaza podría durar “muchas horas después de la ola inicial”, ya que el intervalo entre olas peligrosas puede ser “de cinco minutos a una hora”.

Víctimas: El intenso sismo dejó al menos 29 muertos, según el director de protección civil del país, Jerry Chandler..

Daños materiales: el editor del periódico Le Nouvelliste, Frantz Duval, asegura que el movimiento más fuerte se sintió en las provincias.

“Varias regiones registraron el terremoto, particularmente en los departamentos de Sud y Grand-Anse más cercanos al epicentro”, reporta el periódico Le Nouvelliste, que informa sobre daños en varias localidades donde las casas se derrumbaron.

También causó daños a la infraestructura en varias localidades, de acuerdo con reportes de medios locales. Las autoridades aún no han dado una información oficial, pero los medios dan cuenta de importantes daños en las localidades de Saint-Louis du Sud, Les Cayes y Jérémie, en el sur.

Edificios religiosos, escuelas y viviendas resultaron dañados por el terremoto, según los residentes de la zona afectada. En vídeos compartidos en internet, los residentes filmaron las ruinas de varios edificios de hormigón.

El hospital de Les Cayes ha recibido una gran cantidad de heridos, de acuerdo con los reportes.

En videos compartidos en línea, los residentes han filmado las ruinas de varios edificios de concreto, incluida una iglesia en la que aparentemente se estaba llevando a cabo una ceremonia el sábado por la mañana en la ciudad de Les Anglais, 200 kilómetros al suroeste de Puerto Príncipe.

El terremoto de 2010: este nuevo sismo trae muy malos recuerdos a todos los que vivieron el terremoto del 13 de enero de 2010, en el que cerca de 316.000 personas murieron, 350.000 resultaron heridas y más de 1,5 millones se quedaron sin hogar, según cifras del gobierno haitiano.

Con un agravante, las consecuencias todavía se sienten una década después: poco se ha levantado de lo que quedó en ruinas, la miseria, la inseguridad y la insalubridad son rampantes y Haití sigue haciendo trágico honor a su fama de nación más pobre del Hemisferio. Eso sumado al reciente magnicidio de su presidente Jovenel Moise, quien fue asesinado en su casa el 7 de julio, según las autoridades por un comando de mercenarios colombianos.

Era lo que le faltaba al país que además de enfrentar una crisis sanitaria por el coronavirus, el peor momento de su economía, además de un repunte de inseguridad, ahora debe lidiar con un nuevo desastre natural.