Tras expulsión de su embajador en Perú, México dice que no cambia de posición
“La conducta de nuestro embajador ha estado apegada a derecho”, dijo el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
El canciller de México, Marcelo Ebrard, se refirió a la expulsión de su embajador en Perú, comunicada ayer por Lima.
“La conducta de nuestro embajador ha estado apegada a derecho y al principio de no intervención. México no variará su posición”, informó el diplomático.
El martes, el gobierno peruano le dio al embajador Pablo Monroy 72 horas para abandonar el país en respuesta a la “injerencia” que consideran han hecho las “altas autoridades” de México.
Vale la pena recordar que desde la destitución y detención del vacado presidente Pedro Castillo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha defendido a Castillo afirmando que fue víctima de un “golpe blando” en el que, a su juicio, participaron medios de comunicación y las “élites económicas y políticas” peruanas.
De contexto: Perú expulsa al embajador de México por “injerencia del país en asuntos internos”
México, además, se sumó al comunicado conjunto que también incluyó a Colombia, Argentina y Bolivia, en el que sus gobiernos manifestaron su preocupación por la situación del expresidente peruano, al que consideran “víctima de un antidemocrático hostigamiento”.
Ese pronunciamiento, junto con las declaraciones del presidente colombiano Gustavo Petro también han generado asperezas con Colombia.
El gobierno del país vecino, por ejemplo, entregó a la embajada de Colombia una nota diplomática “mediante la cual se transmite el profundo malestar del Gobierno del Perú ante las reiteradas declaraciones del presidente Gustavo Petro sobre la situación política en el país”.
Le puede interesar: “Injerencia inaceptable”: Cancillería peruana sobre declaraciones de Gustavo Petro
Además, llamó a consultas al embajador en Bogotá, Félix Denegri.
La tensión con México, por otro lado, escaló también por cuenta del asilo que su gobierno les dio a la esposa de Castillo, Lilia Paredes, y a sus hijos.
Ebrard, en un primer momento, confirmó que los familiares del expresidente, al estar en la embajada en Perú, se encontraban en territorio mexicano.
El martes también se conoció que los parientes de Castillo también recibirán del gobierno peruano un salvoconducto para poder viajar a México como asilados, en concordancia con las convenciones internacionales.
La cancillería peruana dijo, por su parte, que en su país “no existe persecución política”, y recordó que la esposa de Castillo, Lilia Paredes, es investigada por la fiscalía por presunta corrupción en un caso que involucra a su esposo.
Castillo, el pasado 7 de diciembre, ordenó en televisión nacional el cierre del Congreso, entre otras medidas, lo que fue considerado como un intento de autogolpe de Estado que le valió la destitución y detención preventiva por acusaciones de rebelión.
Perú advirtió también que se reserva el derecho de pedir su extradición, si la justicia lo dispone.
El Legislativo peruano, en su intento por conjurar la crisis política y social que vive el país, que ya cuenta al menos 26 muertos en medio de las protestas que se registran en las calles, votó el martes a favor de adelantar las elecciones para 2024.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Le invitamos a verlas en El Espectador.
El canciller de México, Marcelo Ebrard, se refirió a la expulsión de su embajador en Perú, comunicada ayer por Lima.
“La conducta de nuestro embajador ha estado apegada a derecho y al principio de no intervención. México no variará su posición”, informó el diplomático.
El martes, el gobierno peruano le dio al embajador Pablo Monroy 72 horas para abandonar el país en respuesta a la “injerencia” que consideran han hecho las “altas autoridades” de México.
Vale la pena recordar que desde la destitución y detención del vacado presidente Pedro Castillo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha defendido a Castillo afirmando que fue víctima de un “golpe blando” en el que, a su juicio, participaron medios de comunicación y las “élites económicas y políticas” peruanas.
De contexto: Perú expulsa al embajador de México por “injerencia del país en asuntos internos”
México, además, se sumó al comunicado conjunto que también incluyó a Colombia, Argentina y Bolivia, en el que sus gobiernos manifestaron su preocupación por la situación del expresidente peruano, al que consideran “víctima de un antidemocrático hostigamiento”.
Ese pronunciamiento, junto con las declaraciones del presidente colombiano Gustavo Petro también han generado asperezas con Colombia.
El gobierno del país vecino, por ejemplo, entregó a la embajada de Colombia una nota diplomática “mediante la cual se transmite el profundo malestar del Gobierno del Perú ante las reiteradas declaraciones del presidente Gustavo Petro sobre la situación política en el país”.
Le puede interesar: “Injerencia inaceptable”: Cancillería peruana sobre declaraciones de Gustavo Petro
Además, llamó a consultas al embajador en Bogotá, Félix Denegri.
La tensión con México, por otro lado, escaló también por cuenta del asilo que su gobierno les dio a la esposa de Castillo, Lilia Paredes, y a sus hijos.
Ebrard, en un primer momento, confirmó que los familiares del expresidente, al estar en la embajada en Perú, se encontraban en territorio mexicano.
El martes también se conoció que los parientes de Castillo también recibirán del gobierno peruano un salvoconducto para poder viajar a México como asilados, en concordancia con las convenciones internacionales.
La cancillería peruana dijo, por su parte, que en su país “no existe persecución política”, y recordó que la esposa de Castillo, Lilia Paredes, es investigada por la fiscalía por presunta corrupción en un caso que involucra a su esposo.
Castillo, el pasado 7 de diciembre, ordenó en televisión nacional el cierre del Congreso, entre otras medidas, lo que fue considerado como un intento de autogolpe de Estado que le valió la destitución y detención preventiva por acusaciones de rebelión.
Perú advirtió también que se reserva el derecho de pedir su extradición, si la justicia lo dispone.
El Legislativo peruano, en su intento por conjurar la crisis política y social que vive el país, que ya cuenta al menos 26 muertos en medio de las protestas que se registran en las calles, votó el martes a favor de adelantar las elecciones para 2024.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Le invitamos a verlas en El Espectador.