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Un hombre armado entró a una tienda de Walmart en Chesapeake, Virginia, el martes por la noche, y mató a seis personas, dejando heridas a otras cuatro. El agresor, que era un empleado del lugar, también fue encontrado muerto, según las autoridades. Este hecho se convirtió en el segundo tiroteo masivo de alto perfil en los últimos tres días en Estados Unidos, luego de que cinco personas fueron asesinadas en un bar LGBTQ en Colorado Springs, el 19 de noviembre.
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En una conferencia de prensa, el jefe de la Policía de Chesapeake, Mark Solesky, proporcionó una cronología del tiroteo y dijo que los agentes llegaron “a los dos minutos” de la primera llamada al 911. Según él, aunque no dio muchos detalles, el tirador, que usó una pistola, parecía haberse suicidado. Agregó que hasta no notificar lo sucedido a sus familiares, no se iba a revelar la identidad del atacante, pero confirmó que era un empleado de Walmart. En su intervención, también comentó que “no hay un motivo claro” de lo sucedido y que no hay indicios de que la Policía conociera al pistolero antes del tiroteo.
El senador del estado de Virginia, Lionell Spruill, aseguró que los legisladores del estado han “introducido medidas una y otra vez” destinadas a reducir la violencia armada, pero han enfrentado una feroz resistencia de los republicanos, e incluso de algunos demócratas, en la legislatura estatal. Por su parte, el gobernador, Glenn Youngkin, se pronunció ante los hechos y, a través de Twitter, escribió: “Los actos atroces de violencia no tienen cabida en nuestras comunidades”.
Our hearts break with the community of Chesapeake this morning. I remain in contact with law enforcement officials throughout this morning and have made available any resources as this investigation moves forward. Heinous acts of violence have no place in our communities.
— Governor Glenn Youngkin (@GovernorVA) November 23, 2022
Virginia se suma a la ola de tiroteos masivos en Estados Unidos
Según las cifras de Gun Violence Archive, el ataque en Chesapeake es el séptimo que ocurre en la última semana. De acuerdo con esta base de datos, que clasifica los tiroteos masivos como los ataques en los que al menos cuatro personas resultan heridas o muertas, sin incluir al perpetrador, ha habido siete eventos de este estilo desde el 18 de noviembre de este año y al menos tres docenas de personas han resultado lesionadas en medio de ellos.
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Es más, en lo que va del año, han tomado lugar más de 600 tiroteos masivos en el país, según el grupo. De hecho, los estadounidenses aún no se recuperan del ataque que tomó lugar en un supermercado Tops en Buffalo, que dejó 10 fallecidos y tres heridos, y del tiroteo en una escuela de Uvalde, Texas, que dejó 21 muertos y 17 lesionados. Más recientemente, tres miembros del equipo de fútbol de la Universidad de Virginia fueron asesinados en Charlottesville por un exjugador de fútbol americano que abrió fuego en un garaje y el 19 de noviembre cinco personas murieron en un ataque llevado a cabo en Club Q, un bar gay en Colorado Springs.
El tiroteo en Walmart fue uno de varios ataques en los supermercados estadounidenses y grandes puntos de venta minorista en los últimos años. Además de lo ocurrido en Buffalo en mayo pasado, en el 2021, un tiroteo mortal en un supermercado de Boulder, Colorado, dejó 10 muertos. Meses después, otro ataque en un Kroger de Collierville, Tennessee, a unas 30 millas al este de Memphis, dejó una persona muerta y al menos otras 14 heridas.
Además, en 2019, un hombre armado de 21 años acechó a los compradores en un Walmart en El Paso, dejando 23 muertos y 26 heridos. También en ese mismo año, cuatro personas murieron en un ataque antisemita en el Supermercado JC Kosher en Jersey City. Según una investigación de Jillian Peterson, profesora de la Universidad de Hamline, y de James Densley, profesor de la Universidad Estatal Metropolitana, el aumento de estos ataques en los supermercados desde dicho año se explica por el hecho de que los perpetradores estudian a los demás y aprenden de ellos. Según los docentes, antes de este año solo se produjo un tiroteo masivo en un supermercado en 1999.
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