Tiroteos en Estados Unidos: ¿será 2022 el año con más violencia armada?
La situación es preocupante: según los datos registrados, cada semana hay casi 13 tiroteos masivos y cada día mueren unas 49 personas debido a la violencia armada en Estados Unidos. En lo que va del año se han registrado 607 tiroteos masivos.
2022 podría convertirse en el año con más tiroteos masivos registrados en Estados Unidos, según datos recopilados por el Archivo de Violencia Armada (Gun Violence Archive). Este grupo de investigación, cabe destacar, define este tipo de eventos como un ataque en el que cuatro personas o más reciben un disparo.
Hasta el 24 de noviembre de 2022 se han registrado 607 tiroteos en el país, muy cerca de los 610 informados en 2020 y no muy lejos de los 690 de 2021. Se teme que con el ritmo actual se pueda alcanzar la cifra del año pasado. Tan solo en la última semana se registraron dos tiroteos masivos en cuestión de tres días.
El martes en la noche, un tirador asesinó a seis personas en un supermercado Walmart en el estado de Virginia, en el este de Estados Unidos. El atacante, era un empleado de la tienda que se suicidó después.
La matanza se produjo a menos de 48 horas de que los estadounidenses de todo el país celebren el Día de Acción de Gracias. Las primeras llamadas a los servicios de emergencia comenzaron a llegar poco después de las 10:00 p. m. del martes, cuando la tienda aún estaba abierta.
Esta tragedia ocurrió solo tres días después de que cinco personas murieran y 18 más quedaran heridas en un tiroteo en un club nocturno LGBTIQ Colorado Springs, en el centro de Estados Unidos. Los hechos ocurrieron en el Club Q, donde aparentemente los asistentes rendían homenaje a personas trans que fueron víctimas de ataques violentos.
El sospechoso del ataque, identificado como Anderson Lee Aldrich, utilizó un rifle largo y abrió fuego poco antes de la medianoche. La policía dijo que dos personas dentro del lugar se enfrentaron a él para impedir que siguiera matando. El ataque revivió el horror experimentado en la discoteca gay Pulse en Orlando, Florida, donde un hombre asesinó a 49 personas en 2016.
Los tiroteos masivos reavivan constantemente el debate sobre el control de las armas, un tema con mucha polarización en el país, por lo que no se ha podido avanzar en el Congreso en un proyecto de reforma al porte de armas. Según los datos registrados, cada semana hay casi 13 tiroteos masivos y cada día mueren unas 49 personas debido a la violencia armada.
Desde 1966, casi todos los años se han suscitado tiroteos en escuelas de Estados Unidos, pero en 2021 hubo un récord de 250 ataques con armas de fuego en estos espacios. Esto representa el doble del número anual de tiroteos registrados en escuelas en los tres años anteriores. En el caso de los supermercados, se tiene un registro de 448 ataques y 132 muertes en 12 mini supermercados, solo entre enero del 2020 y principios de este año.
Desde el 2020, Estados Unidos se convirtió en el país más armado del mundo, lo que tendría relación con el récord de tiroteos registrado el año pasado, con 690 sucesos y 20.900 víctimas. Este año ya hay 18.100 fallecidos, según el Archivo de Violencia Armada. En lo que va de noviembre, se reportaron al menos 32 tiroteos masivos en todo el país, lo que resultó en 43 muertes y 177 personas heridas. Las cifras no están muy lejos de lo visto en el mismo periodo de 2021, cuando se reportaron 36 tiroteos masivos que dejaron 34 muertos y 160 heridos.
A pesar del horror registrado, la respuesta del público ha sido sorpresiva. Un día después del tiroteo en Colorado Springs, Gallup divulgó los resultados de una encuesta que mostraron que el apoyo en Estados Unidos a un mayor control de armas se redujo del 66 % al 57 % entre junio y octubre.
El asunto fue central en las elecciones de medio término, llevadas a cabo el pasado 8 de noviembre. En los comicios, que buscaban renovar un tercio del Senado, toda la Cámara de Representantes, así como gobernaciones y más cargos de orden estatal, otros temas coyunturales, como la inflación, el aborto y la migración, se posicionaron por encima del control de armas.
En dos estados, Iowa y Oregon, el asunto de las armas fue explícitamente a las urnas, con resultados en direcciones opuestas. El primero consagró el derecho constitucional a portar armas, entre otros puntos, mientras que el segundo aprobó la exigencia de un permiso para poder comprar un arma y otras restricciones.
2022 podría convertirse en el año con más tiroteos masivos registrados en Estados Unidos, según datos recopilados por el Archivo de Violencia Armada (Gun Violence Archive). Este grupo de investigación, cabe destacar, define este tipo de eventos como un ataque en el que cuatro personas o más reciben un disparo.
Hasta el 24 de noviembre de 2022 se han registrado 607 tiroteos en el país, muy cerca de los 610 informados en 2020 y no muy lejos de los 690 de 2021. Se teme que con el ritmo actual se pueda alcanzar la cifra del año pasado. Tan solo en la última semana se registraron dos tiroteos masivos en cuestión de tres días.
El martes en la noche, un tirador asesinó a seis personas en un supermercado Walmart en el estado de Virginia, en el este de Estados Unidos. El atacante, era un empleado de la tienda que se suicidó después.
La matanza se produjo a menos de 48 horas de que los estadounidenses de todo el país celebren el Día de Acción de Gracias. Las primeras llamadas a los servicios de emergencia comenzaron a llegar poco después de las 10:00 p. m. del martes, cuando la tienda aún estaba abierta.
Esta tragedia ocurrió solo tres días después de que cinco personas murieran y 18 más quedaran heridas en un tiroteo en un club nocturno LGBTIQ Colorado Springs, en el centro de Estados Unidos. Los hechos ocurrieron en el Club Q, donde aparentemente los asistentes rendían homenaje a personas trans que fueron víctimas de ataques violentos.
El sospechoso del ataque, identificado como Anderson Lee Aldrich, utilizó un rifle largo y abrió fuego poco antes de la medianoche. La policía dijo que dos personas dentro del lugar se enfrentaron a él para impedir que siguiera matando. El ataque revivió el horror experimentado en la discoteca gay Pulse en Orlando, Florida, donde un hombre asesinó a 49 personas en 2016.
Los tiroteos masivos reavivan constantemente el debate sobre el control de las armas, un tema con mucha polarización en el país, por lo que no se ha podido avanzar en el Congreso en un proyecto de reforma al porte de armas. Según los datos registrados, cada semana hay casi 13 tiroteos masivos y cada día mueren unas 49 personas debido a la violencia armada.
Desde 1966, casi todos los años se han suscitado tiroteos en escuelas de Estados Unidos, pero en 2021 hubo un récord de 250 ataques con armas de fuego en estos espacios. Esto representa el doble del número anual de tiroteos registrados en escuelas en los tres años anteriores. En el caso de los supermercados, se tiene un registro de 448 ataques y 132 muertes en 12 mini supermercados, solo entre enero del 2020 y principios de este año.
Desde el 2020, Estados Unidos se convirtió en el país más armado del mundo, lo que tendría relación con el récord de tiroteos registrado el año pasado, con 690 sucesos y 20.900 víctimas. Este año ya hay 18.100 fallecidos, según el Archivo de Violencia Armada. En lo que va de noviembre, se reportaron al menos 32 tiroteos masivos en todo el país, lo que resultó en 43 muertes y 177 personas heridas. Las cifras no están muy lejos de lo visto en el mismo periodo de 2021, cuando se reportaron 36 tiroteos masivos que dejaron 34 muertos y 160 heridos.
A pesar del horror registrado, la respuesta del público ha sido sorpresiva. Un día después del tiroteo en Colorado Springs, Gallup divulgó los resultados de una encuesta que mostraron que el apoyo en Estados Unidos a un mayor control de armas se redujo del 66 % al 57 % entre junio y octubre.
El asunto fue central en las elecciones de medio término, llevadas a cabo el pasado 8 de noviembre. En los comicios, que buscaban renovar un tercio del Senado, toda la Cámara de Representantes, así como gobernaciones y más cargos de orden estatal, otros temas coyunturales, como la inflación, el aborto y la migración, se posicionaron por encima del control de armas.
En dos estados, Iowa y Oregon, el asunto de las armas fue explícitamente a las urnas, con resultados en direcciones opuestas. El primero consagró el derecho constitucional a portar armas, entre otros puntos, mientras que el segundo aprobó la exigencia de un permiso para poder comprar un arma y otras restricciones.