El Tribunal Supremo de Justicia venezolano convalidó la reelección de Maduro

En medio de críticas por la falta de transparencia de los resultados electorales del 28 de julio y de los llamados de fraude que ha hecho la oposición, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela acaba de certificar la reelección del presidente Nicolás Maduro para un tercer mandato presidencial de seis años. La sentencia, leída por Caryslia Rodríguez Rodríguez, presidenta de la máxima corte, estableció que el tribunal “certifica de forma inobjetable el material electoral peritado y convalida esta sala los resultados de la elección presidencial del 28 de julio de 2024, emitidos por el Consejo Nacional Electoral, donde resultó electo el ciudadano Nicolás Maduro Moros para el período constitucional 2025-2031”.

La decisión se conoce después de que la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos sobre la República Bolivariana de Venezuela asegurara que el tribunal y la autoridad electoral “carecen de independencia e imparcialidad”, lo que ha jugado un rol importante en “la maquinaria represiva del Estado”. Los miembros de este grupo, creado por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, recordaron que Rodríguez Rodríguez es miembro del partido gobernante y como tal ha resultado electa en otros cargos. Apenas esta semana, el excandidato Enrique Márquez había solicitado una recusación, al denunciar la cercanía de ella con la agrupación política en el poder.

La oposición venezolana, en cabeza de María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, ya había dicho que consideraría “ineficaz y nula” la certificación de la reelección de Maduro. En una carta divulgada por redes sociales, afirmaron que “los magistrados estarían violando los derechos inalienables de los electores e incurrirían en responsabilidad penal, civil y administrativa”.

Conociendo la más reciente decisión, el candidato presidencial no demoró en pronunciarse en X, antes Twitter: “La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo. Los órganos del Estado emanan de la soberanía popular y a ella están sometidos”. Pocas horas antes incluso mencionó: “Ninguna sentencia sustituirá la soberanía popular. El país y el mundo conocen su parcialidad y, por ende, su incapacidad de resolver el conflicto. Su decisión solo agravará la crisis. Los venezolanos no estamos dispuestos a renunciar a nuestra libertad ni a nuestro derecho a cambiar en paz para vivir mejor”.

Horas antes de la sentencia, Machado también escribió en X: “Échenle bola”. Sobre el pronunciamiento de la Misión de la ONU agregó: “No existe maniobra alguna que pueda otorgarle un ápice de legitimidad a Nicolás Maduro frente al golpe de Estado a la Constitución que pretenden perpetrar. El pueblo habló. La soberanía popular se respeta”.

Ahora bien, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, reaccionó positivamente a la sentencia de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia. Ante la Agencia Venezolana de Noticias aseguró: “Esta sentencia cierra un capítulo del 28 de julio. A nivel internacional, esta elección generó un importante interés. Hemos recibido constantes felicitaciones. Hemos denunciado el golpe de Estado con origen desde el exterior, queda claro y descrito cómo fue llevado a cabo el proceso electoral. Es importante que el mundo lo sepa: en Venezuela ha triunfado la Constitución, el Estado de derecho y las instituciones”.

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La decisión se conoce después de que la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos sobre la República Bolivariana de Venezuela asegurara que el tribunal y la autoridad electoral “carecen de independencia e imparcialidad”, lo que ha jugado un rol importante en “la maquinaria represiva del Estado”. Los miembros de este grupo, creado por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, recordaron que Rodríguez Rodríguez es miembro del partido gobernante y como tal ha resultado electa en otros cargos. Apenas esta semana, el excandidato Enrique Márquez había solicitado una recusación, al denunciar la cercanía de ella con la agrupación política en el poder.

La oposición venezolana, en cabeza de María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, ya había dicho que consideraría “ineficaz y nula” la certificación de la reelección de Maduro. En una carta divulgada por redes sociales, afirmaron que “los magistrados estarían violando los derechos inalienables de los electores e incurrirían en responsabilidad penal, civil y administrativa”.

Conociendo la más reciente decisión, el candidato presidencial no demoró en pronunciarse en X, antes Twitter: “La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo. Los órganos del Estado emanan de la soberanía popular y a ella están sometidos”. Pocas horas antes incluso mencionó: “Ninguna sentencia sustituirá la soberanía popular. El país y el mundo conocen su parcialidad y, por ende, su incapacidad de resolver el conflicto. Su decisión solo agravará la crisis. Los venezolanos no estamos dispuestos a renunciar a nuestra libertad ni a nuestro derecho a cambiar en paz para vivir mejor”.

Horas antes de la sentencia, Machado también escribió en X: “Échenle bola”. Sobre el pronunciamiento de la Misión de la ONU agregó: “No existe maniobra alguna que pueda otorgarle un ápice de legitimidad a Nicolás Maduro frente al golpe de Estado a la Constitución que pretenden perpetrar. El pueblo habló. La soberanía popular se respeta”.

Ahora bien, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, reaccionó positivamente a la sentencia de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia. Ante la Agencia Venezolana de Noticias aseguró: “Esta sentencia cierra un capítulo del 28 de julio. A nivel internacional, esta elección generó un importante interés. Hemos recibido constantes felicitaciones. Hemos denunciado el golpe de Estado con origen desde el exterior, queda claro y descrito cómo fue llevado a cabo el proceso electoral. Es importante que el mundo lo sepa: en Venezuela ha triunfado la Constitución, el Estado de derecho y las instituciones”.

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