Así responde Países Bajos a la pandemia de coronavirus
Jeroen Roodenburg, embajador del Reino de los Países Bajos en Colombia, cuenta cómo ha sido el proceso de adaptación de su país a los efectos de la pandemia de coronavirus.
Camilo Gómez Forero
El Gobierno de Países Bajos ha sido uno de los que ha adoptado ‘estrategias inteligentes’ para enfrentar la pandemia de coronavirus y amortiguar los costos económicos y sociales que esta emergencia ha causado. Jeroen Roodenburg, embajador del Reino de los Países Bajos en Colombia, cuenta cómo ha sido el proceso de adaptación de su país a los efectos de esta crisis mundial, destacando que la solidaridad y el intercambio de experiencias entre distintas naciones es vital para seguir adelante.
El gobierno con base en La Haya ha sido acusado de no ser lo suficientemente ‘solidario’ con sus socios del sur del continente y se ha negado a aceptar el plan de reconstrucción económica para los países afectados por la pandemia de coronavirus, el cual será debatido de nuevo este 17 y 18 de julio en Bruselas. Roodenburg señala que hay discrepancias en cuanto al monto del gasto en este presupuesto, pero apunta a que continuarán trabajando con Europa para lograr una “unión más fuerte”. Le recomendamos: Unión Europea: Las grietas que abrió el coronavirus dentro del bloque
¿Qué opinión tiene los Países Bajos sobre el paquete económico de rescate para la Unión Europea?
El gobierno holandés tiene como objetivo acelerar la recuperación sostenible de esta crisis excepcional del Covid-19 a través de la cooperación europea y de la promoción de un mayor crecimiento económico. Las medidas adoptadas para lograrlo deben conducir a Estados miembros más fuertes y a una Unión más fuerte. En este sentido, los Países Bajos es positivo acerca de las características generales de las propuestas presentadas, pero al igual que otros Estados miembros, ve puntos críticos sobre el monto, la distribución y la financiación del gasto previsto, entre otros.
¿Cuáles han sido los aprendizajes del gobierno sobre la respuesta a la pandemia hasta ahora?
Nuestro gobierno se dio cuenta que pudo haber actuado antes. Hubo un momento crítico en principios de abril cuando casi llegamos a la capacidad máxima de camas de cuidados intensivos. Ahora, somos conscientes que la prevención es clave para controlar el virus, ya disponemos de un total de 1.700 camas en cuidados intensivos.
El enfoque holandés está centrado en no sobrecargar la atención médica y proteger a las personas vulnerables de la sociedad. Lo importante es que debemos ayudarnos unos a otros. En estos momentos, es muy importante la solidaridad internacional, así lo manifestó el primer ministro Mark Rutte al presidente Iván Duque, ellos han intercambiado opiniones y experiencias sobre el abordaje de la pandemia.
Es así como mi gobierno entregó en donación el pasado fin de semana a Colombia treinta ventiladores portátiles de última generación, para ayudar a aumentar la capacidad de respuesta del país.
Sobre ese intercambio de experiencias vale la pena hacer ciertas observaciones sobre el caso holandés. Países Bajos es un líder mundial en el campo del teletrabajo. A diferencia de otras naciones, la transición de dejar la oficina ha sido más amable. ¿Cuál ha sido su fórmula?
La suerte que tiene los Países Bajos es que el 98 % de los habitantes tiene internet de muy buena calidad. Eso es fundamental para que la gente pueda trabajar de manera eficaz desde casa. Además, desde hace tiempo muchas personas trabajan como “freelance”, independientes que trabajan para diferentes empresas, la mayoría lo hacen desde casa ya que alquilar una oficina no saldría rentable. El tema clave de nuestra cultura de trabajo es nuestro lema: no importa cómo, cuándo y dónde haces tu trabajo, importan los resultados.
Los empleadores tienen la confianza en que, incluso trabajando desde casa, sus empleados cumplirán con sus tareas. Pero también se debe reconocer que trabajar en casa durante la pandemia ha conllevado retos para muchas personas en los Países Bajos, al igual que en otras partes del mundo, no tanto por la falta de recursos tecnológicos como por la afectación a la productividad, la salud mental y la falta de contacto personal con los colegas.
A medida que usamos más la web, esta debe ser más segura para trabajar. Necesitamos un ciberespacio estable y seguro. ¿Qué ofrece el gobierno holandés en este ámbito?
La seguridad digital, más específicamente la confidencialidad, integridad y accesibilidad de los procesos y sistemas digitalizados, es esencial para el crecimiento social y económico. No podemos quedarnos quietos, hay una creciente amenaza digital. La inseguridad cibernética es un problema transfronterizo complejo que requiere una respuesta colectiva, a nivel nacional e internacional, por parte de actores públicos y privados en el campo de la concienciación, supervisión, pruebas e intervención. El gobierno holandés está desarrollando estrategias en estas líneas, buscando el importante balance entre ciberseguridad y libertad de expresión.
En efecto, es un tema muy sensible, en los Países Bajos tenemos una ley muy estricta de protección de datos personales. El proyecto de ley que se ha propuesto trata de poder legalmente adquirir datos, de manera anónima, de los proveedores de telecomunicaciones para ayudar al Instituto Nacional de Salud Pública para investigar el Covid-19. Después del verano el proyecto de ley será discutido en la Cámara de Representantes y el Senado.
Las universidades también debieron reforzarse en el campo virtual. ¿Cómo quedaron las instituciones holandesas tras el brote?
En el caso de las universidades, la adaptación fue más o menos rápida. En este momento ya ha iniciado el periodo de vacaciones y se espera que, en septiembre, cuando inicia el año académico en los Países Bajos, la mayoría de las universidades comenzarán sus clases con un modelo híbrido que alterna clases presenciales (por ejemplo, para las asignaturas que tienen componentes prácticos) en grupos reducidos, con clases virtuales para la gran mayoría.
El impacto que veremos en las universidades este año será probablemente más fuerte en términos de los estudiantes internacionales, que son el doce por ciento del total de estudiantes universitarios. Esto también afecta a los estudiantes colombianos, el segundo mayor grupo de estudiantes provenientes de América latina en los Países Bajos. De acuerdo con un estudio llevado a cabo por la Organización Neerlandesa para la Educación Superior, NUFFIC, en una encuesta realizada en el mes de mayo a estudiantes internacionales con planes de viajar en septiembre a los Países Bajos, el 80 %de los encuestados todavía tienen la intención de comenzar sus estudios este año. Sin embargo, de ellos, un 44 % han indicado su preferencia por aplazar un año sus estudios si las clases se van a dar de manera completamente virtual.
¿Y qué pasará con los estudiantes de primaria?
Para los niños, niñas y jóvenes es importante seguir educándose y poder socializar con otros niños de la misma edad. El gobierno holandés entendió que, en la medida de lo posible, la educación primaria debía ser una de las primeras cosas que tendría que abrirse de nuevo, por supuesto acatando todas las recomendaciones del Instituto Nacional de Salud Pública. Por el momento, no hemos visto un incremento de la propagación del virus a causa de la reapertura de las escuelas.
El turismo ha sido uno de los sectores más golpeados por la pandemia. ¿Cómo está la situación de esta industria en el país?
La industria del turismo se ha visto muy afectada, a pesar de la relajación que inició ya hace algunas semanas en los Países Bajos. Debido a la crisis del Covid-19, se calcula que doce millones menos de turistas extranjeros visitarán los Países Bajos este año, lo que significa una disminución del 60 % en comparación con el año pasado. Sin embargo, ya son populares los destinos en las playas y el turismo de naturaleza. Los tours en bicicleta por el país sin duda ayudarán a reactivar el sector del turismo y gastronómico.
Por ahora, la cantidad de vuelos que entran al aeropuerto de Schiphol está aumentando poco a poco, pero sigue estando alrededor de un 90% menos que lo normal. Son más los turistas mismos quienes deciden no viajar al exterior.
¿Cómo va a cambiar el turismo en el país? En Ámsterdam, los ciudadanos demandan que se acabe el turismo masivo y que se terminen las ofertas como las del Distrito Rojo…
Nuestra capital tiene una gran atracción para los visitantes extranjeros por muchas razones: los paseos por los icónicos canales, las visitas a los más de cincuenta museos de clase mundial o los cientos de conciertos, por ejemplo, de la famosa Orquesta Real del Concertgebouw. Para los visitantes que vienen a los Países Bajos por primera vez, los llamados íconos de Ámsterdam son casi una necesidad de visitar, pero normalmente estos aún no están familiarizados con el encanto que tienen otros sectores de la ciudad misma, u otras ciudades y regiones del país. Al hacer un uso inteligente del atractivo de Ámsterdam, se tiene como objetivo atraer a los visitantes a lugares menos conocidos en nuestro país.
Finalmente, la pandemia obliga a cambios en el sistema de transporte también. ¿Cómo podemos posicionar la bicicleta y medios más amables con el planeta en la pospandemia?
Hoy, más que nunca, entidades como la Embajada holandesa del Ciclismo (Dutch Cycling Embassy), están asesorando a gobiernos regionales y locales en el mundo para adoptar políticas de movilidad que integren el uso de la bicicleta. En Colombia ya tenemos una estrecha colaboración con el ministerio de transporte y con algunos gobiernos locales. Gracias a las grandes figuras del ciclismo colombiano como Bernal, Quintana, Urán, Cháves, entre otros, la bicicleta es muy popular aquí, ambas naciones compartimos esta pasión. En los Países Bajos, no podemos imaginarnos una vida sin bicicleta.
Incluso antes de la pandemia, la bicicleta se convirtió en el medio de transporte del futuro, por ser el más limpio y económico. Gracias a los viajes en bicicleta, que en los Países Bajos son de alrededor de un 25% cada día, en un período de cinco años se evitó la emisión de 1,41 millones de toneladas de CO2. La transformación hacia una infraestructura diseñada para bicicletas es clave para frenar el calentamiento global. Y si hay una infraestructura adecuada, los habitantes estarán más motivados a utilizarla. En términos del manejo de la pandemia, la posibilidad de respirar las microgotas mientras se monta en bicicleta es limitada; según los expertos, es “la forma perfecta de autoprotección”.
El Gobierno de Países Bajos ha sido uno de los que ha adoptado ‘estrategias inteligentes’ para enfrentar la pandemia de coronavirus y amortiguar los costos económicos y sociales que esta emergencia ha causado. Jeroen Roodenburg, embajador del Reino de los Países Bajos en Colombia, cuenta cómo ha sido el proceso de adaptación de su país a los efectos de esta crisis mundial, destacando que la solidaridad y el intercambio de experiencias entre distintas naciones es vital para seguir adelante.
El gobierno con base en La Haya ha sido acusado de no ser lo suficientemente ‘solidario’ con sus socios del sur del continente y se ha negado a aceptar el plan de reconstrucción económica para los países afectados por la pandemia de coronavirus, el cual será debatido de nuevo este 17 y 18 de julio en Bruselas. Roodenburg señala que hay discrepancias en cuanto al monto del gasto en este presupuesto, pero apunta a que continuarán trabajando con Europa para lograr una “unión más fuerte”. Le recomendamos: Unión Europea: Las grietas que abrió el coronavirus dentro del bloque
¿Qué opinión tiene los Países Bajos sobre el paquete económico de rescate para la Unión Europea?
El gobierno holandés tiene como objetivo acelerar la recuperación sostenible de esta crisis excepcional del Covid-19 a través de la cooperación europea y de la promoción de un mayor crecimiento económico. Las medidas adoptadas para lograrlo deben conducir a Estados miembros más fuertes y a una Unión más fuerte. En este sentido, los Países Bajos es positivo acerca de las características generales de las propuestas presentadas, pero al igual que otros Estados miembros, ve puntos críticos sobre el monto, la distribución y la financiación del gasto previsto, entre otros.
¿Cuáles han sido los aprendizajes del gobierno sobre la respuesta a la pandemia hasta ahora?
Nuestro gobierno se dio cuenta que pudo haber actuado antes. Hubo un momento crítico en principios de abril cuando casi llegamos a la capacidad máxima de camas de cuidados intensivos. Ahora, somos conscientes que la prevención es clave para controlar el virus, ya disponemos de un total de 1.700 camas en cuidados intensivos.
El enfoque holandés está centrado en no sobrecargar la atención médica y proteger a las personas vulnerables de la sociedad. Lo importante es que debemos ayudarnos unos a otros. En estos momentos, es muy importante la solidaridad internacional, así lo manifestó el primer ministro Mark Rutte al presidente Iván Duque, ellos han intercambiado opiniones y experiencias sobre el abordaje de la pandemia.
Es así como mi gobierno entregó en donación el pasado fin de semana a Colombia treinta ventiladores portátiles de última generación, para ayudar a aumentar la capacidad de respuesta del país.
Sobre ese intercambio de experiencias vale la pena hacer ciertas observaciones sobre el caso holandés. Países Bajos es un líder mundial en el campo del teletrabajo. A diferencia de otras naciones, la transición de dejar la oficina ha sido más amable. ¿Cuál ha sido su fórmula?
La suerte que tiene los Países Bajos es que el 98 % de los habitantes tiene internet de muy buena calidad. Eso es fundamental para que la gente pueda trabajar de manera eficaz desde casa. Además, desde hace tiempo muchas personas trabajan como “freelance”, independientes que trabajan para diferentes empresas, la mayoría lo hacen desde casa ya que alquilar una oficina no saldría rentable. El tema clave de nuestra cultura de trabajo es nuestro lema: no importa cómo, cuándo y dónde haces tu trabajo, importan los resultados.
Los empleadores tienen la confianza en que, incluso trabajando desde casa, sus empleados cumplirán con sus tareas. Pero también se debe reconocer que trabajar en casa durante la pandemia ha conllevado retos para muchas personas en los Países Bajos, al igual que en otras partes del mundo, no tanto por la falta de recursos tecnológicos como por la afectación a la productividad, la salud mental y la falta de contacto personal con los colegas.
A medida que usamos más la web, esta debe ser más segura para trabajar. Necesitamos un ciberespacio estable y seguro. ¿Qué ofrece el gobierno holandés en este ámbito?
La seguridad digital, más específicamente la confidencialidad, integridad y accesibilidad de los procesos y sistemas digitalizados, es esencial para el crecimiento social y económico. No podemos quedarnos quietos, hay una creciente amenaza digital. La inseguridad cibernética es un problema transfronterizo complejo que requiere una respuesta colectiva, a nivel nacional e internacional, por parte de actores públicos y privados en el campo de la concienciación, supervisión, pruebas e intervención. El gobierno holandés está desarrollando estrategias en estas líneas, buscando el importante balance entre ciberseguridad y libertad de expresión.
En efecto, es un tema muy sensible, en los Países Bajos tenemos una ley muy estricta de protección de datos personales. El proyecto de ley que se ha propuesto trata de poder legalmente adquirir datos, de manera anónima, de los proveedores de telecomunicaciones para ayudar al Instituto Nacional de Salud Pública para investigar el Covid-19. Después del verano el proyecto de ley será discutido en la Cámara de Representantes y el Senado.
Las universidades también debieron reforzarse en el campo virtual. ¿Cómo quedaron las instituciones holandesas tras el brote?
En el caso de las universidades, la adaptación fue más o menos rápida. En este momento ya ha iniciado el periodo de vacaciones y se espera que, en septiembre, cuando inicia el año académico en los Países Bajos, la mayoría de las universidades comenzarán sus clases con un modelo híbrido que alterna clases presenciales (por ejemplo, para las asignaturas que tienen componentes prácticos) en grupos reducidos, con clases virtuales para la gran mayoría.
El impacto que veremos en las universidades este año será probablemente más fuerte en términos de los estudiantes internacionales, que son el doce por ciento del total de estudiantes universitarios. Esto también afecta a los estudiantes colombianos, el segundo mayor grupo de estudiantes provenientes de América latina en los Países Bajos. De acuerdo con un estudio llevado a cabo por la Organización Neerlandesa para la Educación Superior, NUFFIC, en una encuesta realizada en el mes de mayo a estudiantes internacionales con planes de viajar en septiembre a los Países Bajos, el 80 %de los encuestados todavía tienen la intención de comenzar sus estudios este año. Sin embargo, de ellos, un 44 % han indicado su preferencia por aplazar un año sus estudios si las clases se van a dar de manera completamente virtual.
¿Y qué pasará con los estudiantes de primaria?
Para los niños, niñas y jóvenes es importante seguir educándose y poder socializar con otros niños de la misma edad. El gobierno holandés entendió que, en la medida de lo posible, la educación primaria debía ser una de las primeras cosas que tendría que abrirse de nuevo, por supuesto acatando todas las recomendaciones del Instituto Nacional de Salud Pública. Por el momento, no hemos visto un incremento de la propagación del virus a causa de la reapertura de las escuelas.
El turismo ha sido uno de los sectores más golpeados por la pandemia. ¿Cómo está la situación de esta industria en el país?
La industria del turismo se ha visto muy afectada, a pesar de la relajación que inició ya hace algunas semanas en los Países Bajos. Debido a la crisis del Covid-19, se calcula que doce millones menos de turistas extranjeros visitarán los Países Bajos este año, lo que significa una disminución del 60 % en comparación con el año pasado. Sin embargo, ya son populares los destinos en las playas y el turismo de naturaleza. Los tours en bicicleta por el país sin duda ayudarán a reactivar el sector del turismo y gastronómico.
Por ahora, la cantidad de vuelos que entran al aeropuerto de Schiphol está aumentando poco a poco, pero sigue estando alrededor de un 90% menos que lo normal. Son más los turistas mismos quienes deciden no viajar al exterior.
¿Cómo va a cambiar el turismo en el país? En Ámsterdam, los ciudadanos demandan que se acabe el turismo masivo y que se terminen las ofertas como las del Distrito Rojo…
Nuestra capital tiene una gran atracción para los visitantes extranjeros por muchas razones: los paseos por los icónicos canales, las visitas a los más de cincuenta museos de clase mundial o los cientos de conciertos, por ejemplo, de la famosa Orquesta Real del Concertgebouw. Para los visitantes que vienen a los Países Bajos por primera vez, los llamados íconos de Ámsterdam son casi una necesidad de visitar, pero normalmente estos aún no están familiarizados con el encanto que tienen otros sectores de la ciudad misma, u otras ciudades y regiones del país. Al hacer un uso inteligente del atractivo de Ámsterdam, se tiene como objetivo atraer a los visitantes a lugares menos conocidos en nuestro país.
Finalmente, la pandemia obliga a cambios en el sistema de transporte también. ¿Cómo podemos posicionar la bicicleta y medios más amables con el planeta en la pospandemia?
Hoy, más que nunca, entidades como la Embajada holandesa del Ciclismo (Dutch Cycling Embassy), están asesorando a gobiernos regionales y locales en el mundo para adoptar políticas de movilidad que integren el uso de la bicicleta. En Colombia ya tenemos una estrecha colaboración con el ministerio de transporte y con algunos gobiernos locales. Gracias a las grandes figuras del ciclismo colombiano como Bernal, Quintana, Urán, Cháves, entre otros, la bicicleta es muy popular aquí, ambas naciones compartimos esta pasión. En los Países Bajos, no podemos imaginarnos una vida sin bicicleta.
Incluso antes de la pandemia, la bicicleta se convirtió en el medio de transporte del futuro, por ser el más limpio y económico. Gracias a los viajes en bicicleta, que en los Países Bajos son de alrededor de un 25% cada día, en un período de cinco años se evitó la emisión de 1,41 millones de toneladas de CO2. La transformación hacia una infraestructura diseñada para bicicletas es clave para frenar el calentamiento global. Y si hay una infraestructura adecuada, los habitantes estarán más motivados a utilizarla. En términos del manejo de la pandemia, la posibilidad de respirar las microgotas mientras se monta en bicicleta es limitada; según los expertos, es “la forma perfecta de autoprotección”.