Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Las sirenas de la guerra volvieron a estremecer con su aullido la capital ucraniana. Desde el inicio del conflicto en el oriente de Europa, Kiev no había sido un blanco tan golpeado por los drones y los misiles rusos. Solo en mayo, el Ejército de Ucrania reportó que Kiev fue atacada en 18 ocasiones.
Este nuevo ataque ordenado por Moscú dejó al menos tres personas muertas: dos adultos y un niño de nueve años. La Administración Militar de la capital aseguró a través de Telegram que al menos 16 personas salieron heridas del bombardeo efectuado por misiles crucero y cohetes balísticos.
“Esta noche Rusia ha matado a una niña de 9 años, a su madre de 34 y a otra mujer de 33″, precisó la Policía ucraniana. En un primer momento se había informado de que la víctima menor tenía 11 años.
Rusia atacó la pasada madrugada la capital ucraniana con 10 misiles Iskander que iban dirigidos contra infraestructuras críticas de la capital ucraniana o sus alrededores.
📝 Sugerimos: Suecia, un paso más cerca de la OTAN: EE. UU. asegura que llegó el “momento”
Según ha informado la Fuerza Aérea ucraniana, los 10 misiles fueron derribados, pero provocaron daños y víctimas al caer tras ser interceptados por las defensas antiaéreas ucranianas.
La administración había reportado previamente que habían muerto dos niños, pero posteriormente aclaró que era uno.
Los restos de los misiles provocaron daños en una policlínica para niños, en dos escuelas y una comisaría de Policía y en varios edificios públicos y privados en tres distritos distintos de la capital ucraniana.
El alcalde de la ciudad, Vitalii Klychko, ha explicado que se investiga a la dirección de la clínica por no haber abierto el refugio a quienes se encontraban en el edificio durante el ataque.
En el centro de la ciudad se escucharon explosiones poco después de las 3 de la madrugada.
Por su parte, Rusia empezó el miércoles a evacuar a cientos de niños de localidades fronterizas con Ucrania, blanco de intensos bombardeos desde hace días, y donde la situación es “alarmante” según el Kremlin.
El jueves al menos dos personas resultaron heridas en la región de Belgorod en un ataque atribuido a las fuerzas ucranianas, escribió en Telegram el gobernador regional, Viacheslav Gladkov.
El gobernador anuncio el miércoles el inicio de la evacuación de menores en dos localidades de la región, que recibieron intensos disparos de artillería y de mortero.
📝 Sugerimos: La energía eólica, la nueva gran aliada de Ucrania en la guerra con Rusia
“A partir de hoy estamos evacuando a nuestros niños de los distritos de Shebekino y Graivoron”, dijo Gladkov. “Un primer grupo de 300 niños va a ser enviado hoy a Voronej”, una ciudad ubicada a unos 250 kilómetros más al noreste.
Un periodista de la agencia oficial Ria Novosti cerca de Voronej dijo que llegaron a la localidad autobuses con unas 150 personas a bordo.
Entre tanto, las tensiones con Occidente se agravaron el miércoles cuando Alemania anunció una drástica reducción del personal diplomático ruso en su territorio, con el cierre de cuatro de cinco consulados.
Moscú tachó la decisión de “provocación irreflexiva” y prometió una “respuesta justa”.
En Washington, el Pentágono anunció un nuevo paquete de armas por US$300 millones, incluyendo sistemas de defensa aérea y decenas de millones de rondas de municiones.
Más bombardeos
Por su parte, Gladkov aseguró que la situación estaba “empeorando” en Shebekino, donde se produjeron más bombardeos durante el día, pero sin víctimas.
El responsable difundió imágenes después de los bombardeos de la mañana con coches calcinados cerca de un área de juego, y un proyectil que había caído en una carretera.
“Nadie, gracias a Dios, murió”, dijo Gladkov, añadiendo que cuatro personas resultaron heridas.
Una persona falleció la víspera y otras dos quedaron heridas en un bombardeo ucraniano contra un centro de desplazados en la región.
📰 También recomendamos: El fuego continúa en Sudán: fracasa un nuevo intento de poner fin al conflicto
“Estamos realmente preocupados por esta situación. El bombardeo de objetivos civiles continúa” en Belgorod, dijo el miércoles el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
“No hemos oído ni una sola palabra de condena de la parte de Occidente”, denunció. “La situación es realmente alarmante. Se están tomando medidas”, añadió.
Kiev niega cualquier “implicación directa” en este ataque.
Esta advertencia llega en momentos en que parece que Rusia no logra contener los ataques en su territorio, y coincide con las afirmaciones de Kiev sobre los últimos preparativos de una gran contraofensiva en el terreno.
Las fuerzas rusas lanzaron esta semana varias oleadas de bombardeos contra la capital ucraniana, Kiev, con misiles y drones explosivos.
Estados Unidos afirmó que no apoya ningún ataque en territorio ruso y dijo que se ha centrado “en proporcionar a Ucrania el equipo y la capacitación que necesita para recuperar su propio territorio soberano”.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Invitamos a verlas en El Espectador.