Cambio de horario en invierno y verano: ¿por qué piden eliminarlo?

La noche del 26 al 27 de octubre durará una hora más en Europa. Exactamente a las 3:00 a. m., los relojes se retrasarán una hora, volviendo a marcar las 2:00 a. m. En Estados Unidos y Australia, este cambio ocurrirá una semana después. El objetivo de esta medida es aprovechar más las horas de luz diurna durante los meses de verano, lo que permitiría una mejor utilización de la luz solar y contribuiría a ahorrar energía. Sin embargo, aunque esta práctica de cambiar la hora dos veces al año tiene una larga tradición en muchos países, cada vez más voces en todo el mundo cuestionan el concepto de la hora de verano.

La noche del 26 al 27 de octubre durará una hora más en Europa. Exactamente a las 3:00 a. m., los relojes se retrasarán una hora, volviendo a marcar las 2:00 a. m. En Estados Unidos y Australia, este cambio ocurrirá una semana después. El objetivo de esta medida es aprovechar más las horas de luz diurna durante los meses de verano, lo que permitiría una mejor utilización de la luz solar y contribuiría a ahorrar energía. Sin embargo, aunque esta práctica de cambiar la hora dos veces al año tiene una larga tradición en muchos países, cada vez más voces en todo el mundo cuestionan el concepto de la hora de verano.

En 2024, el cambio de horario de verano se utiliza en gran parte de Estados Unidos, Canadá, en la franja fronteriza norte de México, Europa (excepto Rusia y Bielorrusia), Chile, Paraguay, Cuba, Bahamas, Haití y algunos países de Oceanía. En el resto del mundo, la mayoría de los países no aplican esta práctica.

En México, en noviembre de 2022, se aprobó la Ley de Husos Horarios, que eliminó el horario de verano en gran parte del país. Esta medida, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, estableció un horario estándar para México. Sin embargo, hay excepciones: algunos municipios fronterizos y dos estados del país siguen aplicando el cambio de horario. Brasil ya había abolido esta práctica hace algunos años, al igual que Turquía, Egipto y Namibia. Ucrania también dejará de aplicarlo: el 27 de octubre de 2024, este país cambiará los relojes por última vez.

Abolición en suspenso en Estados Unidos y Europa

El cambio de hora también es un tema controvertido en Europa y Estados Unidos. En los últimos años, algunos legisladores estadounidenses han comentado que esta tradición está llegando a su fin. Una serie de proyectos de ley tanto a nivel federal como estatal que buscan eliminar los cambios de hora bianuales están esperando ser discutidos o se encuentran estancados.

En marzo de 2022, el Senado de Estados Unidos aprobó la Ley de Protección de la Luz Solar (Sunshine Protection Act). El objetivo de esta ley era hacer permanente el horario de verano a partir de la primavera de 2023. En un principio, parecía que la ley se convertiría en realidad, ya que el Senado la aprobó de forma expedita y con unanimidad, algo poco común en estos tiempos. Sin embargo, la ley no fue tratada en la Cámara de Representantes, donde un proyecto similar también sigue estancado en comité. Incluso si alguno de los proyectos lograra pasar ambas cámaras, todavía necesitaría la firma del presidente Biden, quien no ha indicado su postura sobre el tema. Por lo tanto, por ahora, la tradición sigue en pie.

En Europa, la situación es similar. En 2018, la Comisión Europea realizó una encuesta en la que alrededor del 80 % de los 4,6 millones participantes se pronunciaron a favor de abolir el cambio de hora. Un año después, el Parlamento Europeo votó mayoritariamente a favor de eliminar la medida. Se había previsto que 2021 sería el último año con cambio de horario. Desde entonces, cada vez que se acerca el cambio de hora, los medios en toda Europa aclaran la pregunta: ¿volveremos a cambiar los relojes? Y este año la respuesta sigue siendo sí ya que la decisión aún no se ha implementado.

El problema radica en que los países de la UE no se ponen de acuerdo sobre qué horario mantener de manera permanente. Algunos prefieren el horario de verano, otros la hora estándar (invierno), mientras que Grecia y Chipre desean mantener la regla actual, y la mayoría de los gobiernos aún no han decidido. Si se mantuviera el horario de verano, en el oeste de España el sol no saldría hasta las 10 a. m. en invierno. Si se optara por la hora estándar, en el este de Polonia amanecería a las 3 a. m. en verano. Muchos gobiernos temen un mosaico de diferentes zonas horarias en Europa. Por tanto, el futuro del cambio de horario en Europa sigue siendo incierto.

Colombia solo ha utilizado una vez el horario de verano

Colombia solo ha implementado un cambio de horario una vez en su historia. Entre 1992 y 1993, durante el gobierno del entonces presidente César Gaviria Trujillo, la reducción de las reservas de agua en los embalses, agravada por el fenómeno de El Niño, condujo a una crisis energética nacional. Esta situación forzó a las autoridades a programar apagones eléctricos durante más de un año.

Para aprovechar mejor la luz del día y reducir el consumo de electricidad en horas pico, el gobierno decidió adelantar una hora los relojes a la medianoche del 2 de mayo de 1992. La medida, conocida como “Hora Gaviria”, duró nueve meses. Desde entonces, Colombia no ha vuelto a adoptar el horario de verano. Según un comunicado de la Presidencia de la época, los objetivos de ahorro se cumplieron con éxito, especialmente en las grandes ciudades. Sin embargo, este hecho no estuvo exento de críticas.

¿Ahorro de energía o daño a la salud?

¿Por qué tanta gente lucha contra el cambio de horario? El ajuste de los relojes es impopular porque genera un “mini jetlag” en nuestro cuerpo. Con este desfase horario, causado por el cambio de hora dos veces al año, nuestros ritmos circadianos deben ajustarse a un nuevo ciclo. Se estima que nuestro cuerpo tarda un día en adaptarse a una hora de jetlag. Numerosos estudios han demostrado que el cambio de horario tiene efectos negativos en la salud, con un aumento en los casos de problemas cardiacos, como infartos, y un incremento en los accidentes de tráfico, especialmente tras el cambio en primavera, cuando perdemos una hora de sueño.

Además, la eficacia de la medida en términos de ahorro energético es muy debatida. Antiguamente, la iluminación representaba una parte significativa del consumo eléctrico, pero con la adopción de tecnologías eficientes como las luces LED, este aspecto ha perdido relevancia. Estudios más recientes sugieren que los ahorros energéticos esperados por el cambio de horario son prácticamente insignificantes.

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