El “semáforo alemán” se pone en verde, ¿qué esperar de la Alemania de Olaf Scholz?
Una nueva coalición de partidos está a un paso de llegar al poder en Alemania. La legalización de la marihuana, la educación sobre el aborto y un régimen más amable con la migración están en la agenda, entre otras cosas. Si cumplen con todo, dejarán el país más progresista en una generación. ¿Cuál es el secreto de su unión?
Los cambios de mando suelen ser períodos ceremoniales marcados por la indiferencia y el desagrado, incluso por la violencia, como vimos este año en Estados Unidos. Sin embargo, Alemania ha dado un gran ejemplo sobre cómo se deberían abordar las transiciones de poder. La canciller Angela Merkel, quien después 16 años deja su cargo, incluyó en su gira de despedida a su sucesor, Olaf Scholz, para introducirlo ante el mundo durante las reuniones del G20 y manifestar que, pese al cambio de gobierno, su país se mantiene unido y estable. Habrá continuidad, transmite Merkel, pero también se puede notar que se aproximan cambios interesantes para el país. ¿Será un giro más hacia la izquierda?
A Olaf Scholz, quien encabezará una inédita coalición tripartita conformada por el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), el Partido Verde y el Partido Democrático Libre (FDP), le quedan pocas horas para asumir el cargo de canciller y le venía bien que Merkel, respetada en todo el continente europeo, le diera un espaldarazo para comenzar con autoridad. El “semáforo alemán”, como fue bautizada la coalición de Scholz por tener los colores rojo (del SPD), amarillo (del FDP) y verde (del Partido Verde), ya tiene dos luces funcionando y está a un paso de obtener la tercera.
El sábado, el SPD le dio un respaldo casi unánime al acuerdo de la coalición, mientras que el domingo los delegados del FDP también dieron su aval a la unión. Con esto, a Scholz solo le queda esperar a que los 125.000 delegados de los verdes voten este lunes a favor de la coalición. Si bien este es el obstáculo más difícil para el nuevo canciller, se espera que se apruebe sin contratiempos.
Si Scholz y su coalición logran cumplir con los planes presentados en el documento del acuerdo de coalición, la Alemania que dejarían sería la más progresista en toda una generación. En primer lugar, el enfoque verde marca toda su agenda. El nuevo gobierno espera que el país alcance la neutralidad de carbono en 2045. La energía solar será obligatoria en los techos de los edificios comerciales y en las nuevas viviendas privadas, y todos los estados del país deberán proporcionar una parte de su territorio para aerogeneradores, con el fin de aumentar la energía eólica. Con esto se espera que, en 2030, el 80 % de la electricidad del país sea proporcionada por energías renovables.
También se han planteado una serie de cambios que mejorarían las condiciones de vida de los alemanes. Se busca aumentar el salario mínimo a 12 euros la hora, para enfrentar la crisis en el mercado de trabajo. En Alemania, los empleos mal remunerados han aumentado, así como los empleos de contrato temporal (los minijobs alemanes), por lo que hay más de siete millones de alemanes que no están cotizando al sistema de pensiones. A esto se le suma una crisis de vivienda. El precio de los alquileres se ha disparado y para ciudades como Berlín, donde más del 80 % de los residentes vive en alquiler, esto es un gran problema. Se ha demostrado que a escala nacional hacen falta construcciones, por lo que la coalición de Scholz quiere levantar 400.000 nuevos apartamentos cada año, de los cuales una cuarta parte serán viviendas sociales.
🌎 Le puede interesar: “Santa, por favor trae munición”, el escandaloso trino de un congresista de EE. UU.
Pero quizá los cambios más progresistas de la Alemania de Scholz pueden llegar en otros aspectos. La coalición acordó incluir la legalización total de la marihuana en su documento de gobierno, lo que los convierte en el primer país de Europa en buscar la legalización total del cannabis, la tercera nación en adoptar esta medida luego de Uruguay y Canadá. No es una propuesta alocada: según un estudio de la Universidad Heinrich Heine, los ingresos fiscales de Alemania aumentarían en casi 4.000 millones de euros y se crearían cerca de 30.000 nuevos puestos de trabajo.
Aún más importante resulta la nueva política sobre migración, que promete un régimen más acogedor con los inmigrantes y refugiados: se facilitarán los permisos de residencia y se abre una nueva ventana para obtener la ciudadanía alemana, pues se les permitirá a los migrantes solicitar la ciudadanía después de haber vivido cinco años en el país; además se rebajarán los requisitos de idioma para ser accesibles a la ciudadanía y los solicitantes ya no tendrá que renunciar a sus otras ciudadanías para buscar la naturalización en Alemania. Esto es importante, teniendo en cuenta que miles de personas no han podido acceder a la ciudadanía alemana pese a haber vivido años en el país. Lo que quiere la coalición es una “generación de trabajadores invitados” que busca que más personas también se puedan formar en Alemania.
Otro cambio importante llega en materia de los derechos de las mujeres. La coalición planea levantar la prohibición que recae sobre los médicos para que no puedan dar información sobre el aborto, al derogar el artículo 219 del Código Penal de Alemania que prohíbe la “publicidad sobre el aborto”.
“El aborto debe formar parte de la educación y formación médica. La posibilidad de abortar gratuitamente forma parte de una asistencia sanitaria fiable”, señala el documento de la coalición.
Por último, hay una serie de políticas de impacto positivo para la comunidad LGBTI, como facilitar el cambio de sexo de las personas, el fin de la prohibición sobre donación de sangre para homosexuales y transexuales, y la tipificación de ataques contra esta comunidad como “delitos de odio”.
🌎 Le puede interesar: La legalización del cannabis en Uruguay ha generado más de 160 empresas
El acuerdo de coalición, además de ambicioso, no deja de ser inédito. Participan en él dos partidos de centro-izquierda, que tienen la promesa de subirles los impuestos a los ricos, y otro, el FDP, que se opone a esta idea. El secreto del éxito de los alemanes no solo está en su transición amable y ejemplar del poder para mostrar estabilidad, sino que sus partidos entienden que siempre hay algo en lo que pueden trabajar juntos para mejorar las condiciones de vida de la gente.
“Aunque mucho los separa en la dimensión económica, los tres están de acuerdo en materia de política social. Significa que tienen esta área a la que siempre pueden retirarse para enfatizar sus similitudes”, le explica Thorsten Faas, politólogo de la Universidad Libre de Berlín, al diario Financial Times.
👀🌎📄 ¿Ya estás enterado de las últimas noticias en el mundo? Te invitamos a verlas en El Espectador.
Los cambios de mando suelen ser períodos ceremoniales marcados por la indiferencia y el desagrado, incluso por la violencia, como vimos este año en Estados Unidos. Sin embargo, Alemania ha dado un gran ejemplo sobre cómo se deberían abordar las transiciones de poder. La canciller Angela Merkel, quien después 16 años deja su cargo, incluyó en su gira de despedida a su sucesor, Olaf Scholz, para introducirlo ante el mundo durante las reuniones del G20 y manifestar que, pese al cambio de gobierno, su país se mantiene unido y estable. Habrá continuidad, transmite Merkel, pero también se puede notar que se aproximan cambios interesantes para el país. ¿Será un giro más hacia la izquierda?
A Olaf Scholz, quien encabezará una inédita coalición tripartita conformada por el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), el Partido Verde y el Partido Democrático Libre (FDP), le quedan pocas horas para asumir el cargo de canciller y le venía bien que Merkel, respetada en todo el continente europeo, le diera un espaldarazo para comenzar con autoridad. El “semáforo alemán”, como fue bautizada la coalición de Scholz por tener los colores rojo (del SPD), amarillo (del FDP) y verde (del Partido Verde), ya tiene dos luces funcionando y está a un paso de obtener la tercera.
El sábado, el SPD le dio un respaldo casi unánime al acuerdo de la coalición, mientras que el domingo los delegados del FDP también dieron su aval a la unión. Con esto, a Scholz solo le queda esperar a que los 125.000 delegados de los verdes voten este lunes a favor de la coalición. Si bien este es el obstáculo más difícil para el nuevo canciller, se espera que se apruebe sin contratiempos.
Si Scholz y su coalición logran cumplir con los planes presentados en el documento del acuerdo de coalición, la Alemania que dejarían sería la más progresista en toda una generación. En primer lugar, el enfoque verde marca toda su agenda. El nuevo gobierno espera que el país alcance la neutralidad de carbono en 2045. La energía solar será obligatoria en los techos de los edificios comerciales y en las nuevas viviendas privadas, y todos los estados del país deberán proporcionar una parte de su territorio para aerogeneradores, con el fin de aumentar la energía eólica. Con esto se espera que, en 2030, el 80 % de la electricidad del país sea proporcionada por energías renovables.
También se han planteado una serie de cambios que mejorarían las condiciones de vida de los alemanes. Se busca aumentar el salario mínimo a 12 euros la hora, para enfrentar la crisis en el mercado de trabajo. En Alemania, los empleos mal remunerados han aumentado, así como los empleos de contrato temporal (los minijobs alemanes), por lo que hay más de siete millones de alemanes que no están cotizando al sistema de pensiones. A esto se le suma una crisis de vivienda. El precio de los alquileres se ha disparado y para ciudades como Berlín, donde más del 80 % de los residentes vive en alquiler, esto es un gran problema. Se ha demostrado que a escala nacional hacen falta construcciones, por lo que la coalición de Scholz quiere levantar 400.000 nuevos apartamentos cada año, de los cuales una cuarta parte serán viviendas sociales.
🌎 Le puede interesar: “Santa, por favor trae munición”, el escandaloso trino de un congresista de EE. UU.
Pero quizá los cambios más progresistas de la Alemania de Scholz pueden llegar en otros aspectos. La coalición acordó incluir la legalización total de la marihuana en su documento de gobierno, lo que los convierte en el primer país de Europa en buscar la legalización total del cannabis, la tercera nación en adoptar esta medida luego de Uruguay y Canadá. No es una propuesta alocada: según un estudio de la Universidad Heinrich Heine, los ingresos fiscales de Alemania aumentarían en casi 4.000 millones de euros y se crearían cerca de 30.000 nuevos puestos de trabajo.
Aún más importante resulta la nueva política sobre migración, que promete un régimen más acogedor con los inmigrantes y refugiados: se facilitarán los permisos de residencia y se abre una nueva ventana para obtener la ciudadanía alemana, pues se les permitirá a los migrantes solicitar la ciudadanía después de haber vivido cinco años en el país; además se rebajarán los requisitos de idioma para ser accesibles a la ciudadanía y los solicitantes ya no tendrá que renunciar a sus otras ciudadanías para buscar la naturalización en Alemania. Esto es importante, teniendo en cuenta que miles de personas no han podido acceder a la ciudadanía alemana pese a haber vivido años en el país. Lo que quiere la coalición es una “generación de trabajadores invitados” que busca que más personas también se puedan formar en Alemania.
Otro cambio importante llega en materia de los derechos de las mujeres. La coalición planea levantar la prohibición que recae sobre los médicos para que no puedan dar información sobre el aborto, al derogar el artículo 219 del Código Penal de Alemania que prohíbe la “publicidad sobre el aborto”.
“El aborto debe formar parte de la educación y formación médica. La posibilidad de abortar gratuitamente forma parte de una asistencia sanitaria fiable”, señala el documento de la coalición.
Por último, hay una serie de políticas de impacto positivo para la comunidad LGBTI, como facilitar el cambio de sexo de las personas, el fin de la prohibición sobre donación de sangre para homosexuales y transexuales, y la tipificación de ataques contra esta comunidad como “delitos de odio”.
🌎 Le puede interesar: La legalización del cannabis en Uruguay ha generado más de 160 empresas
El acuerdo de coalición, además de ambicioso, no deja de ser inédito. Participan en él dos partidos de centro-izquierda, que tienen la promesa de subirles los impuestos a los ricos, y otro, el FDP, que se opone a esta idea. El secreto del éxito de los alemanes no solo está en su transición amable y ejemplar del poder para mostrar estabilidad, sino que sus partidos entienden que siempre hay algo en lo que pueden trabajar juntos para mejorar las condiciones de vida de la gente.
“Aunque mucho los separa en la dimensión económica, los tres están de acuerdo en materia de política social. Significa que tienen esta área a la que siempre pueden retirarse para enfatizar sus similitudes”, le explica Thorsten Faas, politólogo de la Universidad Libre de Berlín, al diario Financial Times.
👀🌎📄 ¿Ya estás enterado de las últimas noticias en el mundo? Te invitamos a verlas en El Espectador.