Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Varios manifestantes se reunieron frente a la embajada de Catar en el centro de Londres para protestar en nombre de los peligros que enfrentan las personas LGBTQ+, las mujeres y los trabajadores migrantes en el país sede de la Copa del Mundo, a un día de que empiece la cita futbolística.
Peter Tatchell, uno de los manifestantes, dijo que los ojos del mundo están puestos en Catar y que es “indignante” que algunas figuras públicas, como David Beckham, promocionen el país anfitrión y el evento, pidiéndoles a los fanáticos que ignoren los abusos contra los derechos humanos y el historial del país en temas LGBTQ+.
Le sugerimos: Catar se disculpa con la televisión danesa por interrumpir una transmisión
Tatchell, de 70 años, quien fue arrestado en Doha en octubre por realizar una protesta de un solo hombre frente al Museo Nacional de Catar, aseguró: “Estamos aquí para arrojar luz sobre el abuso del régimen contra las mujeres, las personas LGBT y los trabajadores migrantes. También enviamos un mensaje de amor y solidaridad con esos cataríes muy valientes que luchan por la democracia y los derechos humanos”.
Agregó: “Puedo entender por qué los fanáticos querrían ver los partidos, pero les pediría que usen sus redes sociales para amplificar los abusos contra los derechos humanos en Catar y denunciar a la FIFA por su complicidad con lo que es una dictadura sexista, homofóbica y racista”.
En el lugar, que reunía a cerca de 50 personas, se escuchaba: “No hay libertad, no hay fútbol”, “Vergüenza para la FIFA, vergüenza para Catar”. El nombre de David Beckham fue abucheado y respondido con un cántico de “Vergüenza para Beckham”, quien aceptó un contrato de 150 millones de libras esterlinas para promocionar Catar.
Carl Fearn, copresidente de Gay Gooners, un grupo LGBTQ+ para fanáticos del Arsenal, pidió a la FIFA, la UEFA y el Comité Olímpico Internacional que nunca celebren un torneo en el que se criminalice ser LGBTQ+. “Nunca más debería celebrarse un torneo en el que sea posible ser ejecutado por ser LGBT+. Nuestra protesta no se trata de enarbolar banderas del arcoíris y tomarnos de la mano. Va más profundo que eso. Se trata del derecho de las personas LGBT+ a existir, y a existir en igualdad de condiciones con otras personas”, se lee en The Guardian.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Le invitamos a verlas en El Espectador.