Lady Di: el legado del trabajo humanitario de la “princesa del pueblo”
Diana de Gales, quien fue la esposa del heredero al trono Carlos de Inglaterra, dejó huella en numerosas facetas de su vida. Después de su divorcio, empezó a ser reconocida por sus labores sociales y humanitarias, al punto de ser llamada “la princesa del pueblo”.
Hoy se cumplen 25 años de la muerte de Diana de Gales, quien murió con solo 36 años, el 31 de agosto de 1997. La Princesa de Gales falleció en un accidente automovilístico en un túnel del Alma, en Paris. Junto a ella también murió su pareja en el momento, el empresario Dodi Al Fayed.
Conocida como “Lady Di”, hoy sigue siendo recordada en el Reino Unido por sus obras sociales, como ícono de la moda y por haber roto las rígidas convenciones entre la realeza británica y el pueblo. La Corona, de hecho, fue criticada por su aparente frialdad en las horas siguientes al deceso.
Diana de Gales, quien fue la esposa de Carlos de Inglaterra, con quien tuvo dos hijos, Guillermo y Enrique, dejó huella en numerosas facetas de su vida. Después de su divorcio del príncipe británico y su vida mediática, empezó a ser reconocida por sus labores sociales y humanitarias, al punto de ser llamada “la princesa del pueblo”.
Uno de los actos más conocidos de Lady Di fue la reivindicación de las personas con VIH, que para los años 80 eran muy estigmatizadas. Se creía hasta el momento que la enfermedad podía ser transmitida por contacto físico. En 1987, Diana inauguró el centro de atención de pacientes con VIH/Sida en Londres. Lo más significativo fue el momento en que Lady Di estrechó la mano de un paciente con la intención de romper el estigma.
Así mismo ocurrió con los enfermos de lepra. Para 1989, durante un viaje que realizó a Indonesia, fue reconocida como la patrona de La Misión de la lepra en Inglaterra y Gales, reconocimiento que llevó hasta su muerte. En Indonesia, fue captada por las cámaras tocando los vendajes de las personas con lepra, su objetivo era informar que la cura existía desde 1981 y que no era una enfermedad altamente contagiosa.
En 1992 fue nombrada la patrona de Centrepoint, liderando una organización que visitaba refugios de personas sin hogar. Debido a la influencia de Diana en esta organización, a hoy más del 70 % de las personas que entran en este proceso logran un cambio positivo en sus vidas. Desde el 2005, el príncipe Guillermo, el hijo mayor de la princesa, tomó el mando de la organización para continuar con el legado de Diana.
En 1997, Diana también caminó por un campo minado en Angola, en África. Para este año, el lugar era reconocido por tener la mayor tasa de personas amputadas, debido a las bombas enterradas allí después de varios conflictos bélicos. El acto de Lady Di logró recaudar recursos para Halo Trust, una organización para eliminar escombros y minas antipersona. También influenció el Tratado de Ottawa, donde se prohíbe la adquisición, producción, almacenamiento y utilización de ese tipo de artefacto.
Estos y muchos más actos simbólicos llevan a reconocer el legado de Lady Di, tras 25 años de su trágica muerte en París.
Hoy se cumplen 25 años de la muerte de Diana de Gales, quien murió con solo 36 años, el 31 de agosto de 1997. La Princesa de Gales falleció en un accidente automovilístico en un túnel del Alma, en Paris. Junto a ella también murió su pareja en el momento, el empresario Dodi Al Fayed.
Conocida como “Lady Di”, hoy sigue siendo recordada en el Reino Unido por sus obras sociales, como ícono de la moda y por haber roto las rígidas convenciones entre la realeza británica y el pueblo. La Corona, de hecho, fue criticada por su aparente frialdad en las horas siguientes al deceso.
Diana de Gales, quien fue la esposa de Carlos de Inglaterra, con quien tuvo dos hijos, Guillermo y Enrique, dejó huella en numerosas facetas de su vida. Después de su divorcio del príncipe británico y su vida mediática, empezó a ser reconocida por sus labores sociales y humanitarias, al punto de ser llamada “la princesa del pueblo”.
Uno de los actos más conocidos de Lady Di fue la reivindicación de las personas con VIH, que para los años 80 eran muy estigmatizadas. Se creía hasta el momento que la enfermedad podía ser transmitida por contacto físico. En 1987, Diana inauguró el centro de atención de pacientes con VIH/Sida en Londres. Lo más significativo fue el momento en que Lady Di estrechó la mano de un paciente con la intención de romper el estigma.
Así mismo ocurrió con los enfermos de lepra. Para 1989, durante un viaje que realizó a Indonesia, fue reconocida como la patrona de La Misión de la lepra en Inglaterra y Gales, reconocimiento que llevó hasta su muerte. En Indonesia, fue captada por las cámaras tocando los vendajes de las personas con lepra, su objetivo era informar que la cura existía desde 1981 y que no era una enfermedad altamente contagiosa.
En 1992 fue nombrada la patrona de Centrepoint, liderando una organización que visitaba refugios de personas sin hogar. Debido a la influencia de Diana en esta organización, a hoy más del 70 % de las personas que entran en este proceso logran un cambio positivo en sus vidas. Desde el 2005, el príncipe Guillermo, el hijo mayor de la princesa, tomó el mando de la organización para continuar con el legado de Diana.
En 1997, Diana también caminó por un campo minado en Angola, en África. Para este año, el lugar era reconocido por tener la mayor tasa de personas amputadas, debido a las bombas enterradas allí después de varios conflictos bélicos. El acto de Lady Di logró recaudar recursos para Halo Trust, una organización para eliminar escombros y minas antipersona. También influenció el Tratado de Ottawa, donde se prohíbe la adquisición, producción, almacenamiento y utilización de ese tipo de artefacto.
Estos y muchos más actos simbólicos llevan a reconocer el legado de Lady Di, tras 25 años de su trágica muerte en París.