Voluntarios en una de las cocinas de la World Central Kitchen (WCK) preparaban comida para ser servida a los palestinos desplazados en el campamento de Rafah, al sur de la Franja de Gaza, el 18 de marzo de 2024. La ONG detuvo sus operaciones tras el ataque que mató a siete de sus trabajadores.
Foto: EFE - HAITHAMI IMAD
NO PUEDES GANAR ESTA GUERRA MATANDO DE HAMBRE A TODA UNA POBLACIÓN.
En las peores condiciones que uno pueda imaginar —tras huracanes, terremotos, bombas y tiroteos— aparece lo mejor de la humanidad. No una o dos veces, sino siempre.
Las siete personas asesinadas el lunes en una misión de World Central Kitchen en Gaza eran lo mejor de la humanidad. No son personas sin rostro ni nombre. No son trabajadores humanitarios genéricos ni daños colaterales de guerra.