Li Wenliang solo tenía 31 años y era oftalmólogo, no epidemiólogo. Tampoco sabía mucho sobre virus. Sin embargo, fue la primera persona que le advirtió al mundo sobre el COVID-19.
El 30 de diciembre del 2019, Wenliang les advirtió a sus amigos sobre un extraño virus que estaba afectando al hospital en donde trabajaba, por medio de Weibo, la famosa red social de China. Sin embargo, terminó siendo detenido por la policía local, quienes lo acusaron de difundir rumores y solo fue liberado después de acceder a firmar unos documentos en los que admitió haber cometido un acto ilegal.
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Después de su fallecimiento, el Gobierno de China se disculpó por haberlo detenido y silenciado, según el medio The Hill. Cuando finalmente se confirmó que existía un brote, el doctor Wenliang fue reconocido como un héroe.
El 12 de enero el doctor fue internado por COVID-19 en el hospital donde trabajaba y el 7 de febrero de 2020 falleció por esta enfermedad. Su muerte desató una cadena de mensajes dolorosos en su perfil en la red social, y, según informa Reuters, su muerte se dio en un momento en el que la sociedad del país estaba nerviosa por el virus y las autoridades eran cuestionadas por su falta de transparencia y su trato severo hacia los denunciantes como este doctor.
Aunque ya han pasado dos años, y la confianza en el manejo del COVID-19 por parte del Gobierno de China se ha restablecido, las personas no olvidan a este doctor y su perfil en Weibo, la misma red social que usó para hablar sobre el virus, ha recibido cientos de mensajes de parte de los ciudadanos chinos, quienes le cuentan desde los eventos políticos actuales hasta sus preocupaciones por la vida laboral.
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Miles de usuarios también le rindieron homenaje en sus redes sociales. Un usuario llamado Tdby le escribió “feliz año nuevo Dr. Li, lo recordaremos por siempre”, según Reuters. Sin embargo, este doctor ha sido homenajeado todo el año, ya que muchos usuarios comparten su vida cotidiana en su perfil, en donde también le hablan sobre las fechas en las que se vacunaron, cuando pelearon con su madre e incluso le piden ayuda para encontrar pareja, de acuerdo con The Hill.
Por otro lado, según Fang Kecheng, quien trabaja en la Universidad de Hong Kong y fue entrevistado por Reuters, la red social de Weibo se ha convertido en un lugar en donde las personas pueden expresar los sentimientos que no pueden o no se sienten cómodos para compartir en su vida real. De acuerdo con Kecheng, estos sitios en internet son necesarios “para la expresión anónima en cualquier sociedad, y esto es especialmente cierto en la China de hoy”.
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