La gente deja homenajes florales en el centro comercial Westfield Bondi Junction en Sydney, Australia.
Foto: EFE - STEVEN SAPHORE
Quince de las 18 víctimas del sábado eran mujeres. Aunque es posible que nunca se conozcan los motivos del agresor, muchos afirman que el incidente pone de manifiesto un problema mayor.
Mary Aravanopoulos estaba abrazada a su hija, acurrucada para ponerse a salvo con otras 15 mujeres en la tienda de vestidos de organza etéreos. Habían visto pasar a un hombre por el pasillo del centro comercial, sin prisa, balanceando en la mano un gran cuchillo.
Pronto oyeron que apuñalaban a una mujer y luego a otra.