Hong Kong: fin de semana de protestas (a pesar de las advertencias de China)
Decenas de miles de hongkoneses volvieron a expresar este sábado su rechazo al Gobierno y exigieron reformas democráticas en una marcha que recorrió algunas de las arterias comerciales de la ciudad provocando el cierre de establecimientos y alteraciones del tráfico.
AGENCIAS
El movimiento de protesta en Hong Kong organizó una gran manifestación este sábado, haciendo oídos sordos a las advertencias de China, en una crisis cada vez más aguda en este territorio semiautónomo.
Pekín y las autoridades locales subieron el tono esta semana al detener a decenas de personas. Y el ejército chino anunció que estaba dispuesto a reprimir altercados "intolerables" si era necesario.
Pero los manifestantes se mantuvieron inflexibles y prometieron nuevas protestas para este fin de semana y la próxima semana.
Ver más: La primavera de 2019: el año de las protestas sociales
Este sábado, miles de manifestantes salieron a la calle en Mongkok, un suburbio densamente poblado que ya fue escenario de enfrentamientos entre la policía y los manifestantes. En un primer momento, la policía había prohibido la marcha en esta zona, pero luego acabó autorizándola.
El domingo, hay otras dos marchas organizadas, una en la isla de Hong Kong y la otra en el sector de Tseung Kwan O. Y el lunes está convocada una huelga general en toda la ciudad, además de manifestaciones en siete localidades.
Ver más: Carrie Lam, la mujer que desató la furia en Hong Kong
Por otra parte, el sábado también tuvo lugar una manifestación progubernamental con miles de participantes, muchos de ellos enarbolando banderas chinas.
Amenazas de más protestas
Miles de hongkoneses volvieron este sábado a expresar hoy, por noveno fin de semana consecutivo, su rechazo al polémico proyecto de ley de extradición y su apoyo a reformas democráticas durante una manifestación que recorrió algunas de las arterias comerciales más importantes de la excolonia británica.Cerca de 120.000 manifestantes, según los organizadores, se congregaron en el distrito de Mong Kok, popular destino de compras y escenario de los enfrentamientos de las protestas prodemocráticas de 2014.
Ver más: ¿Qué está pasando en Hong Kong?
La marcha provocó el cierre de tiendas y alteraciones del tráfico entre llamamientos a la huelga convocada para el próximo lunes y proclamas contra la Policía por lo que los manifestantes, en su mayoría jóvenes, consideran un excesivo uso de la violencia para reprimirles.
Durante la protesta, el movimiento prodemocrático evitó enfrentarse directamente con la Policía tras los 44 arrestos de la semana pasada, en lo que parece un cambio de táctica ante el alto coste que está teniendo la confrontación directa con los agentes.
Delito de revuelta
La Justicia hongkonesa se erigió la semana pasada como protagonista de la crisis después de que la Policía acusase formalmente a 44 personas de un delito de revuelta, penado con entre 5 y 10 años de prisión, aunque todos menos uno -que no compareció- quedaron en libertad bajo fianza hasta la próxima vista, prevista para el 25 de septiembre.Asimismo, saltaron las alarmas entre las fuerzas prodemócratas después de que la guarnición del Ejército chino en la ciudad publicase este miércoles un vídeo en el que se muestra a los soldados llevando a cabo entrenamientos antidisturbios y a uno de ellos gritando: "las consecuencias serán por vuestra cuenta y riesgo" en cantonés, el idioma más utilizado en Hong Kong.
Ver más: El polémico tratado de extradición que hizo estallar todo en Hong Kong
Las manifestaciones comenzaron a principios de junio contra una controvertida propuesta de ley de extradición y han derivado hacia demandas más amplias sobre los mecanismos democráticos de la ciudad, cuya soberanía recuperó China en 1997 con el compromiso de mantener hasta 2047 las estructuras establecidas por los británicos.
A pesar de que la jefa del Gobierno local, Carrie Lam, dio por "muerto" el proyecto, los manifestantes no se dieron por satisfechos y han seguido inundando las calles de la ciudad durante los últimos ocho fines de semana.
Los grupos opositores han convocado una huelga general para el próximo lunes, la primera en cinco décadas.
El movimiento de protesta en Hong Kong organizó una gran manifestación este sábado, haciendo oídos sordos a las advertencias de China, en una crisis cada vez más aguda en este territorio semiautónomo.
Pekín y las autoridades locales subieron el tono esta semana al detener a decenas de personas. Y el ejército chino anunció que estaba dispuesto a reprimir altercados "intolerables" si era necesario.
Pero los manifestantes se mantuvieron inflexibles y prometieron nuevas protestas para este fin de semana y la próxima semana.
Ver más: La primavera de 2019: el año de las protestas sociales
Este sábado, miles de manifestantes salieron a la calle en Mongkok, un suburbio densamente poblado que ya fue escenario de enfrentamientos entre la policía y los manifestantes. En un primer momento, la policía había prohibido la marcha en esta zona, pero luego acabó autorizándola.
El domingo, hay otras dos marchas organizadas, una en la isla de Hong Kong y la otra en el sector de Tseung Kwan O. Y el lunes está convocada una huelga general en toda la ciudad, además de manifestaciones en siete localidades.
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Por otra parte, el sábado también tuvo lugar una manifestación progubernamental con miles de participantes, muchos de ellos enarbolando banderas chinas.
Amenazas de más protestas
Miles de hongkoneses volvieron este sábado a expresar hoy, por noveno fin de semana consecutivo, su rechazo al polémico proyecto de ley de extradición y su apoyo a reformas democráticas durante una manifestación que recorrió algunas de las arterias comerciales más importantes de la excolonia británica.Cerca de 120.000 manifestantes, según los organizadores, se congregaron en el distrito de Mong Kok, popular destino de compras y escenario de los enfrentamientos de las protestas prodemocráticas de 2014.
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La marcha provocó el cierre de tiendas y alteraciones del tráfico entre llamamientos a la huelga convocada para el próximo lunes y proclamas contra la Policía por lo que los manifestantes, en su mayoría jóvenes, consideran un excesivo uso de la violencia para reprimirles.
Durante la protesta, el movimiento prodemocrático evitó enfrentarse directamente con la Policía tras los 44 arrestos de la semana pasada, en lo que parece un cambio de táctica ante el alto coste que está teniendo la confrontación directa con los agentes.
Delito de revuelta
La Justicia hongkonesa se erigió la semana pasada como protagonista de la crisis después de que la Policía acusase formalmente a 44 personas de un delito de revuelta, penado con entre 5 y 10 años de prisión, aunque todos menos uno -que no compareció- quedaron en libertad bajo fianza hasta la próxima vista, prevista para el 25 de septiembre.Asimismo, saltaron las alarmas entre las fuerzas prodemócratas después de que la guarnición del Ejército chino en la ciudad publicase este miércoles un vídeo en el que se muestra a los soldados llevando a cabo entrenamientos antidisturbios y a uno de ellos gritando: "las consecuencias serán por vuestra cuenta y riesgo" en cantonés, el idioma más utilizado en Hong Kong.
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Las manifestaciones comenzaron a principios de junio contra una controvertida propuesta de ley de extradición y han derivado hacia demandas más amplias sobre los mecanismos democráticos de la ciudad, cuya soberanía recuperó China en 1997 con el compromiso de mantener hasta 2047 las estructuras establecidas por los británicos.
A pesar de que la jefa del Gobierno local, Carrie Lam, dio por "muerto" el proyecto, los manifestantes no se dieron por satisfechos y han seguido inundando las calles de la ciudad durante los últimos ocho fines de semana.
Los grupos opositores han convocado una huelga general para el próximo lunes, la primera en cinco décadas.