México: con 381 asesinatos, crece la violencia contra la comunidad LGBT
El repunte se da en medio de un alza generalizada en la violencia. Solo en 2017 se registraron más de 25.000 muertes violentas, la cifra más alta en los últimos 20 años.
EFE
"No han disminuido estos actos de violencia de homicidios contra personas LGBT, e incluso tenemos la sospecha de que se incrementaron pese a los avances en el reconocimiento de los derechos de los colectivos", dijo hoy a Efe el director general de la ONG Letra S, Alejandro Brito.
Durante los últimos cinco años de la administración del saliente presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, se registró el asesinato de 381 miembros del colectivo de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales. La cifra se desprende del informe que la ONG Letra S publicó en la víspera del día internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, que se celebra este 17 de mayo.
(Lea también: A un año del crimen de Javier Valdez, asesinan a otro periodista en México)
Letra S registró 84 homicidios en 2013, seguidos de 65 en 2014, 61 en 2015, 76 en 2016 y 95 en 2017, un repunte sustancial que Brito atribuyó, en parte, a la ola de violencia que padece México, donde el último año se registraron 25.339 asesinatos, la cifra más alta en dos décadas.
Este año las coas no parecen mejorar. Pese a que los datos no aparecen en el informe, en el primer cuatrimestre de 2018, Letra S contabilizó al menos 24 asesinatos de personas LGBT.
"Tenemos casos de víctimas del crimen organizado, y son presuntamente crímenes de odio porque cobran derecho de piso (extorsión) a trabajadoras sexuales trans, y si no pagan, las asesinan", explicó el activista.
Entre 2013 y 2017 fueron asesinados 158 hombres gais (41 % del total), seis hombres bisexuales, tres mujeres lesbianas y cinco hombres de los que se desconoce su identidad de género, siendo el colectivo de mujeres trans (travestis, transgénero y transexuales) el más afectado con 209 muertes (55 %).
"A diferencia de los demás colectivos están imposibilitadas de no ser visibles, y la visibilidad pública las expone a riesgos", apuntó Brito.
Por estados, Veracruz, en el oriente, es el que registra mayores índices con 30 casos, le siguen el norteño estado de Chihuahua, con 28 casos, y el suroriental Quintana Roo, con 27.
El Estado de México (centro), el más poblado del país, y Guerrero (sur), sumaron 25 muertes cada uno.
Brito denunció la saña con la que se asesina, pues hay casos con más de 30 cuchilladas, otros cadáveres maniatados, asfixiados o quemados, e incluso el caso de una chica trans a la que le cortaron los genitales.
Además, 14 de las víctimas eran defensoras y promotoras de los derechos LGBT, si bien se hace difícil conocer si el móvil del crimen fue su activismo, dijo el director de la ONG.
Ello se debe a la falta de información, pues en las fiscalías se otorga poca relevancia a la orientación sexual, y solo se menciona un posible crimen de odio en 10 % de los casos.
Por ello, y por la dificultad de acceder a expedientes, Letra S elabora el informe con base en más de 800 artículos publicados en medios del país.
"Es la falta de recolección de datos oficiales el principal obstáculo para enfrentar el problema", remarcó Brito.
Positivamente, el defensor de derechos LGBT resaltó avances en México desde el arribo a Peña Nieto al poder, en diciembre de 2012.
Por ejemplo, una posición más marcada a nivel exterior en defensa de los derechos y avances como el reconocimiento del matrimonio entre parejas del mismo sexo en varias entidades y la decisión de la Suprema Corte en 2016 de declarar inconstitucional las leyes estatales que prohíben el matrimonio homosexual.
Además, se reformaron los códigos penales de varios estados para introducir el odio como agravante en estos delitos, y en febrero pasado la Fiscalía General elaboró un protocolo de actuación del personal en casos que involucren la orientación sexual o la identidad de género. "El reto es que se aplique", apuntó.
Tampoco ha habido avances en educación, apuntó el activista, preocupado por el auge de movimientos conservadores como el Frente Nacional Por la Familia.
Todo ello ha repercutido en el proceso electoral rumbo al 1 de julio, cuando se elige al presidente y a quienes ocuparán otros 3.400 cargos públicos.
(Le puede interesar: Hallan nueve cadáveres en una camioneta abandonada en el sur de México)
En la campaña apenas existe agenda progresista por parte de los candidatos, marcados por unas alianzas que incluyen partidos de izquierdas y de derechas, alertó Brito.
Por otro lado, destacó que aunque no aparezca en la campaña oficial, los medios sí cuestionan a los candidatos sobre estos temas, y el colectivo LGBT se ha acercado a todos ellos e impulsado plataformas.
"No han disminuido estos actos de violencia de homicidios contra personas LGBT, e incluso tenemos la sospecha de que se incrementaron pese a los avances en el reconocimiento de los derechos de los colectivos", dijo hoy a Efe el director general de la ONG Letra S, Alejandro Brito.
Durante los últimos cinco años de la administración del saliente presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, se registró el asesinato de 381 miembros del colectivo de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales. La cifra se desprende del informe que la ONG Letra S publicó en la víspera del día internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, que se celebra este 17 de mayo.
(Lea también: A un año del crimen de Javier Valdez, asesinan a otro periodista en México)
Letra S registró 84 homicidios en 2013, seguidos de 65 en 2014, 61 en 2015, 76 en 2016 y 95 en 2017, un repunte sustancial que Brito atribuyó, en parte, a la ola de violencia que padece México, donde el último año se registraron 25.339 asesinatos, la cifra más alta en dos décadas.
Este año las coas no parecen mejorar. Pese a que los datos no aparecen en el informe, en el primer cuatrimestre de 2018, Letra S contabilizó al menos 24 asesinatos de personas LGBT.
"Tenemos casos de víctimas del crimen organizado, y son presuntamente crímenes de odio porque cobran derecho de piso (extorsión) a trabajadoras sexuales trans, y si no pagan, las asesinan", explicó el activista.
Entre 2013 y 2017 fueron asesinados 158 hombres gais (41 % del total), seis hombres bisexuales, tres mujeres lesbianas y cinco hombres de los que se desconoce su identidad de género, siendo el colectivo de mujeres trans (travestis, transgénero y transexuales) el más afectado con 209 muertes (55 %).
"A diferencia de los demás colectivos están imposibilitadas de no ser visibles, y la visibilidad pública las expone a riesgos", apuntó Brito.
Por estados, Veracruz, en el oriente, es el que registra mayores índices con 30 casos, le siguen el norteño estado de Chihuahua, con 28 casos, y el suroriental Quintana Roo, con 27.
El Estado de México (centro), el más poblado del país, y Guerrero (sur), sumaron 25 muertes cada uno.
Brito denunció la saña con la que se asesina, pues hay casos con más de 30 cuchilladas, otros cadáveres maniatados, asfixiados o quemados, e incluso el caso de una chica trans a la que le cortaron los genitales.
Además, 14 de las víctimas eran defensoras y promotoras de los derechos LGBT, si bien se hace difícil conocer si el móvil del crimen fue su activismo, dijo el director de la ONG.
Ello se debe a la falta de información, pues en las fiscalías se otorga poca relevancia a la orientación sexual, y solo se menciona un posible crimen de odio en 10 % de los casos.
Por ello, y por la dificultad de acceder a expedientes, Letra S elabora el informe con base en más de 800 artículos publicados en medios del país.
"Es la falta de recolección de datos oficiales el principal obstáculo para enfrentar el problema", remarcó Brito.
Positivamente, el defensor de derechos LGBT resaltó avances en México desde el arribo a Peña Nieto al poder, en diciembre de 2012.
Por ejemplo, una posición más marcada a nivel exterior en defensa de los derechos y avances como el reconocimiento del matrimonio entre parejas del mismo sexo en varias entidades y la decisión de la Suprema Corte en 2016 de declarar inconstitucional las leyes estatales que prohíben el matrimonio homosexual.
Además, se reformaron los códigos penales de varios estados para introducir el odio como agravante en estos delitos, y en febrero pasado la Fiscalía General elaboró un protocolo de actuación del personal en casos que involucren la orientación sexual o la identidad de género. "El reto es que se aplique", apuntó.
Tampoco ha habido avances en educación, apuntó el activista, preocupado por el auge de movimientos conservadores como el Frente Nacional Por la Familia.
Todo ello ha repercutido en el proceso electoral rumbo al 1 de julio, cuando se elige al presidente y a quienes ocuparán otros 3.400 cargos públicos.
(Le puede interesar: Hallan nueve cadáveres en una camioneta abandonada en el sur de México)
En la campaña apenas existe agenda progresista por parte de los candidatos, marcados por unas alianzas que incluyen partidos de izquierdas y de derechas, alertó Brito.
Por otro lado, destacó que aunque no aparezca en la campaña oficial, los medios sí cuestionan a los candidatos sobre estos temas, y el colectivo LGBT se ha acercado a todos ellos e impulsado plataformas.