Primer aniversario del mortífero ataque a Israel que desencadenó la guerra en Gaza

El Ejército israelí anunció este lunes 7 de octubre que ha lanzado un ataque contra “objetivos terroristas” en toda la Franja de Gaza para “frustrar amenazas inmediatas”, entre ellos un bombardeo contra un hospital, cuando se cumple un año del ataque terrorista de Hamás en Israel.

El portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee, indicó en X que las fuerzas de defensa israelíes atacaron plataformas de misiles de Hamás y “objetivos terroristas” en toda la Franja de Gaza para “frustrar amenazas inmediatas”, entre ellos un cohete que fue interceptado, detalló.

Asimismo, señaló que aviones de combate bombardearon lo que define como objetivos de Hamás en la Franja, horas después de que el Ejército anunciara que había llevado a cabo un “ataque preciso” contra un supuesto centro de operaciones del grupo islamista dentro del hospital “Shuhada al-Alqsa” en la Franja de Gaza.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió cumplir con los objetivos de la guerra contra Hamás en Gaza y contra Hezbolá en Líbano, que calificó de “misión sagrada”, en el primer aniversario del ataque más mortífero de la historia reciente del país.

Las ceremonias de conmemoración empezaron en Reim, el lugar del festival de música Nova donde al menos 370 personas murieron el 7 de octubre, con un minuto de silencio.

Otra ceremonia tuvo lugar en la noche en Tel Aviv, con familiares y amigos de las personas fallecidas o capturadas ese día por milicianos de Hamás, durante el sangriento ataque que desencadenó la guerra en Gaza.

Pero la guerra en Gaza y Líbano también se acompañó de una escalada entre Israel e Irán, aliado de Hamás y Hezbolá. Israel amenaza con tomar represalias tras el lanzamiento de 200 misiles el pasado 1 de octubre contra su territorio, desatando temores de una gran guerra regional.

Tras un año de una devastadora guerra, el jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, denunció el “sufrimiento indescriptible” de los rehenes de Gaza. Pero también subrayó que la guerra había reducido Gaza a un “mar irreconocible de escombros y un cementerio para decenas de miles de personas”.

Por su parte, Joe Biden y Kamala Harris pidieron este lunes paz en Oriente Medio y el fin de una guerra que podría afectar a las elecciones estadounidenses, mientras que el republicano Donald Trump llamó a “nunca olvidar esa pesadilla”.

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El candidato republicano Donald Trump hizo un llamado este lunes a los estadounidenses para que “no olviden nunca” el ataque del movimiento palestino Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, al honrar a las víctimas durante un acto de su campaña electoral.

“No debemos olvidar nunca la pesadilla de ese día”, dijo Trump ante varios cientos de sus seguidores en Florida. Al conmemorar el aniversario de los ataques, el candidato sostuvo que “no hubiesen ocurrido jamás si yo hubiese sido el presidente”.

Miles de personas se manifestaron en Buenos Aires en el primer aniversario del ataque de Hamás en suelo israelí el 7 de octubre, en un acto respaldado por el presidente Javier Milei que pidió por la liberación de los rehenes del movimiento palestino Hamás.

En el acto convocado por la embajada de Israel junto con organizaciones de la comunidad judía local, la más numerosa de América Latina con unos 300.000 integrantes, manifestantes con banderas israelíes y fotos con los rostros de los rehenes evocaron a las víctimas.

El ataque del 7 de octubre comportó la muerte de 1.206 personas en Israel, la mayoría civiles, según un recuento de AFP basado en cifras oficiales israelíes, que incluye a los muertos durante su cautiverio en la Franja de Gaza.

“No podía faltar, es una recordación de una de las barbaries que vivió el pueblo judío”, dijo a la AFP Daniel Krimer, un ingeniero de 70 años que se encontraba en Israel visitando a su hija cuando ocurrió el ataque.

“Fue para nosotros un golpe de repente de levantarnos y escuchar lo que había pasado, inimaginable”, recordó y señaló que desde aquel día es “mucho más escéptico de que se pueda llegar a algún acuerdo de paz”.

Entre los rehenes de Hamás había 21 argentinos, siete de los cuales siguen desaparecidos, según la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas.

“Tráiganlos a casa ya”, publicó este lunes en su cuenta de X el presidente argentino Javier Milei, en un mensaje escrito en inglés y en hebreo.

Argentina sufrió dos atentados contra la comunidad judía, en 1992 contra la sede de la embajada de Israel, que causó 29 muertos, y en 1994 contra el edificio de la mutual judía AMIA, el peor de la historia argentina, que dejó otros 85 muertos.

Más temprano, en la céntrica Plaza de Mayo de Buenos Aires, decenas de simpatizantes propalestinos exigieron el fin de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, que ha matado ya a más de 41.900 palestinos, mayoritariamente civiles, según datos del Ministerio de Salud de Gaza, que la ONU considera fiables.

“Estamos aquí para ser solidarios con el pueblo palestino, para denunciar las atrocidades que se están cometiendo contra ese pueblo por el Estado de Israel, que es un Estado genocida, que atenta contra la vida de un pueblo”, declaró Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, en la manifestación en la que flamearon banderas palestinas y se colocaron pancartas con nombres de las víctimas.

Miles de personas se manifestaron este lunes en Buenos Aires en el primer aniversario del ataque de Hamás en suelo israelí el 7 de octubre, en un acto respaldado por el presidente Javier Milei que pidió por la liberación de los rehenes del movimiento palestino Hamás.

En el acto convocado por la embajada de Israel junto con organizaciones de la comunidad judía local, la más numerosa de América Latina con unos 300.000 integrantes, manifestantes con banderas israelíes y fotos con los rostros de los rehenes evocaron a las víctimas.

“Estoy devastada por el dolor y el duelo” provocados el 7 de octubre, dijo la vicepresidenta y candidata demócrata a la Casa Blanca, antes de plantar un granado en el jardín de su residencia oficial. Acompañada por su marido Doug Emhoff, de confesión judía, Kamala Harris meditó un momento ante este árbol, símbolo de la esperanza y la virtud en la religión judía.

“No nos rendimos. Estamos haciendo todo lo que podemos por un acuerdo de alto el fuego y la liberación de los rehenes en Gaza”, dijo, tras recitar los nombres de los siete estadounidenses, “vivos o muertos”, que siguen retenidos en la Franja de Gaza.

Por su parte, tocado con una kipá negra, su rival republicano Donald Trump visitó la tumba de un rabino ultraortodoxo en Nueva York, donde participó en una oración.

“Las atrocidades (...) del 7 de octubre nunca habrían ocurrido si el presidente Trump siguiera en la Casa Blanca”, ha dicho su equipo de campaña en un comunicado. Es “imperativo”, añade, que Trump gane las elecciones para “poner fin al derramamiento de sangre causado por el régimen terrorista iraní, que hoy es más fuerte y más rico gracias a la debilidad y la incompetencia de la administración Biden-Harris”.

Según la agencia de noticias Al Jazeera, manifestantes a favor de Palestina marcharon en el campus de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York, coreando “Palestina libre, libre” en el primer aniversario de la guerra de Israel contra Hamás en Gaza.

Las protestas estudiantiles contra la guerra de Gaza comenzaron en el campus de Columbia en abril, inspirando campamentos similares en otras instituciones de Estados Unidos y más allá.

Minouche Shafik, la entonces presidenta de la Universidad de Columbia, renunció después de permitir que la policía de la ciudad de Nueva York ingresara al campus para despejar las protestas, lo que provocó la indignación de los manifestantes y algunos académicos y llamados a su destitución.

Ahora, cuando esos estudiantes manifestantes regresan para un nuevo año de aprendizaje, se enfrentan a un panorama transformado por las restricciones actualizadas, el aumento de las medidas de seguridad y el mayor escrutinio de los movimientos pro palestinos.

A las afueras del campus de la universidad estadounidense, también se reunieron manifestantes proisraelíes, que sostenían pancartas con los rostros y nombres de los cautivos y decían “Tráiganlos a casa ahora”.

El movimiento libanés Hezbolá afirmó este lunes que apuntó contra una base de la inteligencia militar israelí cerca de la ciudad de Tel Aviv.

El grupo, respaldado por Irán, indicó haber disparado “una andanada de cohetes contra la base Glilot de la unidad de inteligencia militar 8200, en las afueras de Tel Aviv”.

El ejército israelí indicó el lunes en la noche que se activaron las sirenas antiaéreas en el centro de Israel después de que se dispararan proyectiles desde Líbano.

“Después de que las sirenas sonaran en el centro de Israel, se identificaron varios lanzamientos de proyectiles que cruzaron a territorio israelí desde Líbano”, afirmó un comunicado castrense.

El ejército indicó que interceptó “algunos” de los cerca de cinco proyectiles lanzados y que los otros cayeron “en zonas deshabitadas”.

“Algunos fueron interceptados” por la fuerza aérea, “y los demás cayeron en zonas deshabitadas”, indicó un breve comunicado militar.

La agencia oficial libanesa Ani reportó nuevos bombardeos israelíes el lunes por la noche en la periferia sur de Beirut, después de que el ejército israelí instara a los habitantes a evacuar algunos sectores de esa área, bastión de Hezbolá.

El suburbio sur de Beirut, bombardeado por Israel desde el 23 de septiembre, “fue blanco de dos bombardeos”, indicó Ani, que había informado de seis bombardeos sucesivos anteriormente. Un corresponsal de AFP vio humaredas emergiendo de la periferia sur tras haber escuchado explosiones.

El movimiento libanés Hezbolá anunció el lunes 7 de octubre que prohibió a sus combatientes atacar soldados israelíes apostados “detrás de una posición militar de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en Líbano (FPNUL)”, para no poner a los cascos azules en peligro.

La FPNUL, desplegada en la frontera entre Israel y Líbano, dijo antes que estaba “profundamente preocupada por las recientes actividades del ejército israelí adyacentes” a una de sus posiciones cerca del pueblo fronterizo libanés de Maroun al Ras.

Hezbolá, respaldado por Irán, aseguró en un comunicado que sus combatientes “observaron el domingo movimientos no convencionales de las fuerzas del enemigo israelí detrás de una posición militar de la FPNUL” cerca de Maroun al Ras.

El grupo ordenó a sus combatientes “no intervenir ante estos movimientos para proteger la vida de los soldados de la FPNUL” y acusó Israel de “tratar de usar las fuerzas” de la ONU como “escudos humanos”.

La FPNUL consideró el domingo 6 de octubre “inaceptable que se ponga en peligro la seguridad de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU”. El sábado, exhortó a “Líbano y a Israel a aplicar la resolución del Consejo de Seguridad 1701, la única solución viable para restablecer la estabilidad en la región”.

Esta resolución, que fue aprobada al final de la guerra de 2006 entre Israel y el movimiento islamista libanés Hezbolá, estipula que solo las fuerzas de mantenimiento de la paz y el ejército libanés se desplieguen en el sur de Líbano, entre la frontera con Israel y el río Litani.

Prevé además la retirada de las fuerzas armadas no estatales, es decir de Hezbolá, que ha mantenido una presencia en el sur del país desde el final de la mencionada guerra.

Un hombre de 66 años y un niño de 12 murieron a consecuencia de operaciones militares israelíes en Cisjordania ocupada, anunció el ministerio de Salud de la Autoridad Palestina.

“Ziad Abu Jalil (66 años) fue martirizado tras ser atacado por las fuerzas de ocupación durante la intrusión en su casa en Doura, al sur de Hebrón”, afirmó el ministerio.

Contactado por AFP su hijo, Murad Abu Jalil, dijo que su padre había sido golpeado por soldados israelíes que entraron en la casa familiar para arrestar a su hermano.

“A las 3:00 a.m. hora local, las fuerzas de ocupación invadieron la casa de mi padre y quisieron arrestar a mi hermano. Mi padre intentó detenerlos, entonces lo golpearon dos veces en el pecho, luego lo empujaron y su pecho golpeó la puerta de la casa”. Relato el hijo y añadió que el hombre sucumbió a las heridas por la mañana.

Interrogado por la AFP sobre estas acusaciones, el ejército israelí se abstuvo de responder.

En una declaración separada, el Ministerio de Salud palestino anunció la muerte de un niño de 12 años, Hatem Ghaith, “por heridas críticas causadas por un incendio dentro del campamento de Qalandia”.

Residentes dijeron que el ejército israelí invadió al amanecer el campamento y se produjeron enfrentamientos. El ejército tampoco reaccionó a una consulta sobre estos incidentes.

En el último año al menos 703 palestinos han muerto en Cisjordania por disparos de soldados o colonos israelíes, según datos del Ministerio de Salud.

El Gobierno estadounidense subrayó este lunes su apoyo a los ataques de Israel contra infraestructuras del grupo chií Hezbolá en el Líbano, pero destacó que esa incursión, calificada de limitada por las autoridades israelíes, no debería extenderse en el tiempo.

“Apoyamos su capacidad de atacar a militantes y de degradar la infraestructura de Hezbolá, pero somos muy conscientes de las muchas ocasiones en el pasado en las que Israel ha participado en lo que parecían operaciones limitadas y ha permanecido durante meses o años”, dijo en una rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.

En última instancia ese no es el resultado que EE.UU. quiere ver, señaló el representante de la diplomacia estadounidense, destacando que Washington desea la plena implementación de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que entre otros puntos autoriza un aumento de la dotación de la Fuerza Provisional de Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL) para supervisar el cese de las hostilidades.

Su comparecencia coincide con el primer aniversario de los ataques del 7 de octubre del grupo islamista Hamás sobre Israel, día en que los milicianos palestinos mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a 251, y tras lo cual Israel emprendió una ofensiva militar sobre la Franja de Gaza que ha provocado ya, al menos, 41.900 víctimas mortales.

Horas después de que Israel anunciara que detuvo un misil “tierra a tierra” lanzado desde Yemen y dirigido al centro del país, el grupo proiraní de los hutíes reconoció la autoría en este ataque.

El Gobierno de Colombia insistió este lunes en un cese al fuego en Gaza al cumplirse un año del “terrible acto, ataque terrorista” de Hamás contra Israel del 7 de octubre que dio inicio a la guerra.

“Colombia alza su voz por un cese al fuego inmediato; la liberación de todos los rehenes y secuestrados; la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, y que se pueda dar solución política entre los dos estados”, expresó el canciller, Luis Gilberto Murillo, en una declaración grabada desde Alemania.

Después de un año de aquel día, la guerra en Gaza, donde según las autoridades gazatíes ya han muerto casi 42.000 personas, continúa y 97 rehenes israelíes siguen en Gaza, de los que el Ejército estima que al menos una treintena están muertos.

“El 7 de octubre Hamás cometió ese terrible acto, (ese) ataque terrorista a Israel, que terminó de desatar la guerra en Gaza que ya deja más de 41.000 personas asesinadas, entre ellos mujeres, ancianos, jóvenes y adolescentes, y cerca de 20.000 niños y niñas. Eso es inaceptable”, expresó Murillo.

El Ejército de Israel declaró este lunes otras cinco poblaciones de la región norteña israelí de Galilea “zonas militares cerradas”, como ya había hecho en tres ocasiones previas desde el inicio de la invasión terrestre del Líbano la madrugada del martes 1 de octubre.

La nueva zona militar incluye Rosh HaNikra, Shlomi, Hanita, Admit y Aramsha, cerca de la costa mediterránea, según un comunicado emitido por el Ejército en su canal en Telegram, que especifica que la entrada a ellas queda ahora estrictamente prohibida.

El Ejército israelí impuso este domingo la misma medida de cierre en los kibuts de Manara, Yiftah y Malkiah, situados en la región norteña de la Alta Galilea, más al este.

El pasado 1 de octubre, el Ejército israelí denominó también “zona militar cerrada” las comunidades agrícolas fronterizas israelíes de Dovev, Tivbon y Malkia, todas en torno a un kilómetro de distancia de la divisoria con el Líbano y que llevan casi un año evacuadas debido al fuego cruzado.

El brazo armado del movimiento islamista palestino Hamás dijo el lunes que librará una “larga batalla de desgaste” contra Israel, un año después de su letal ataque del 7 de octubre contra territorio israelí.

“Nuestra elección es seguir con el enfrentamiento en una batalla de desgaste larga, dolorosa y costosa para el enemigo”, afirmó el portavoz de las brigadas Ezedin al Qassam, Abu Obeida, en un vídeo difundido por el canal catarí Al Jazeera.

Afirmó que el ataque perpetrado hace un año por el movimiento islamista palestino contra Israel fue “preventivo”, destinado a frustrar un plan israelí que, según él, incluía “un gran ataque contra la resistencia en Gaza”, y cuya preparación había llegado a “sus etapas finales”. También destacó los riesgos que pesan sobre los 97 rehenes que aún se encuentran en Gaza, 34 de los cuales fueron declarados muertos por el ejército israelí, de las 251 personas secuestradas ese día.

El asesinato de unas 1.200 personas en Israel por parte de Hamás y otros grupos armados palestinos hace un año fue “un crimen de guerra y posiblemente contra la humanidad”, pero también lo fue la respuesta israelí en los últimos 12 meses, que ha causado 42.000 muertes, entre ellas las de 17.000 niños, afirmaron una treintena de expertos de la ONU en un comunicado conjunto.

La declaración con motivo del aniversario de los ataques subrayó que la comunidad internacional, a través de mecanismos judiciales independientes, “debe investigar de forma exhaustiva e imparcial todas estas graves violaciones, establecer la cadena de responsabilidades, procesar y castigar a los perpetradores”.

“Las partes en conflicto deben brindar un acceso completo a las evidencias para investigar los hechos y garantizar la rendición de cuentas”, afirmaron los expertos. En este sentido, su comunicado hizo un llamamiento al acceso sin restricciones a Israel y los territorios palestinos ocupados para investigar estas violaciones de la ley internacional, “particularmente los asesinatos arbitrarios, desapariciones forzadas y torturas”.

Reiteraron su llamamiento a que la comunidad internacional ponga fin a la transferencia de armamento a las partes en conflicto, con el fin de evitar su responsabilidad en los crímenes de guerra y contra la humanidad que pueden haberse cometido.

El Ejército israelí ordenó este lunes la evacuación forzosa de las costas libanesas al sur del río Awali, ubicado a más de 50 kilómetros de la frontera entre Israel y Líbano, mientras prosigue su ofensiva contra el grupo chií Hezbolá en el país.

“Las actividades de Hezbolá obligan al Ejército a actuar en su contra y el Ejército actuará pronto en la zona marítima contra las actividades terroristas de Hezbolá”, dijo en un mensaje el portavoz en árabe de las fuerzas israelíes, Avichay Adraee.

Adraee solicitó a los civiles, incluidos bañistas o pescadores, que eviten estar en el agua frente a las costas libanesas o incluso en las playas ubicadas al sur del Awali.

El movimiento islamista libanés Hezbolá dijo haber lanzado, por segunda vez este lunes, cohetes contra los alrededores de la ciudad de Haifa, en el norte Israel.

Hezbolá dijo que disparó una “gran salva de cohetes” contra los alrededores de la ciudad por la tarde.

Estados Unidos ha destinado una cifra récord de al menos 17.900 millones de dólares en ayuda militar a Israel desde el inicio de la guerra en Gaza, tras el ataque del grupo islamista Hamás del 7 de octubre de 2023, del que este lunes se cumple un año.

Esta cantidad supone el mayor desembolso realizado por EE.UU. desde que comenzó su programa de asistencia militar a Israel en 1959, según detalla en un informe publicado este lunes el centro de investigación no partidista ‘Costs of War Project’ de la Universidad Brown.

Los investigadores advierten que la cifra es conservadora y podría ser superior, ya que la Administración de Joe Biden ha realizado al menos 100 acuerdos armamentísticos con Israel desde octubre de 2023 por valores inferiores al umbral que requiere ser notificado al Congreso.

Del total de la ayuda, 4.500 millones de dólares se han destinado a defensa antimisiles y 1.200 millones al sofisticado sistema de defensa antiaérea “Rayo de Hierro”, que utiliza tecnología láser y cuya instalación está prevista para 2025.

La situación de los rehenes israelíes retenidos en la Franja de Gaza es “muy difícil”, indicó el lunes el brazo armado del movimiento islamista Hamás, que los capturó hace exactamente un año.

“Decimos (a los israelíes) que habrían podido recuperar vivos a todos sus rehenes hace un año (...), la situación de los rehenes restantes, psicológica y de salud, se ha vuelto muy difícil”, declaró su portavoz Abu Obeida, en un vídeo.

Israel comunicó que identificó un misil “tierra a tierra” lanzado desde Yemen, en donde operan los hutíes, y que fue interceptado con éxito.

Francia considera que “la fuerza por sí sola” no es suficiente para garantizar la seguridad de Israel, según declaró en Jerusalén el canciller francés, Jean-Noël Barrot, en el primer aniversario del ataque sin precedentes de Hamás a ese país.

“La fuerza por sí sola no alcanza para garantizar la seguridad de Israel”, afirmó Barrot en una conferencia de prensa, después de una reunión con su par israelí, Israel Katz.

“Para traer por fin a los rehenes de vuelta con sus seres queridos y permitir el regreso de los desplazados del Norte a sus casas tras un año de guerra, ha llegado el tiempo de la diplomacia”, insistió. El ministro de Relaciones Exteriores francés destacó la “pesada responsabilidad” de Hezbolá en la situación que atraviesa Líbano.

Los muertos en la Franja de Gaza superaron hoy los 41.900 al cumplirse el primer aniversario de la guerra en el enclave palestino, que comenzó el 7 de octubre de 2023 tras los atentados de Hamás en las comunidades del sur de Israel, que dejaron unos 1.200 muertos.

La ofensiva israelí se ha cobrado la vida de 41.909 personas -casi 17.000 menores- y 97.303 han resultado heridos, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás.

En las últimas 24 horas, las autoridades gazatíes reportaron 39 muertos y 137 heridos en el enclave, donde la guerra prosigue tras un año de combates, con 728 bajas entre las tropas israelíes, incluyendo en los ataques del 7 de octubre pasado.

El Ministerio también denunció que el 65 % de las instituciones de salud están dañadas y con un ratio de ocupación del 300 %, especialmente en unidades de cuidados intensivos, lo que hace muy difícil la atención sanitaria, incluyendo a 50.000 embarazadas y 12.000 pacientes de cáncer.

La fuerza aérea israelí llevó a cabo un bombardeo este lunes cerca del aeropuerto internacional de Beirut, que sigue operativo, en la periferia sur de la capital libanesa, indicó una fuente de seguridad a AFP.

Por su parte, el ejército israelí indicó que había realizado un “bombardeo selectivo” en un suburbio del sur de Beirut, donde lleva dos semanas atacando.

Aviones israelíes bombardearon el lunes “una treintena de pueblos” en el sur de Líbano cerca de la frontera con Israel, anunció la agencia oficial de noticias libanesa ANI.

Se produjeron “series de ataques” en varias otras zonas del sur libanés, añadió ANI.

Una explosión ocurrió la madrugada del lunes a unos 500 metros de la embajada de Israel en Dinamarca, informó la policía de Copenhague, cinco días después de un ataque al edificio diplomático.

“Estamos tratando de determinar si podría haber un vínculo con el incidente en la embajada de Israel”, dijo a los periodistas la inspectora de policía Trine Møller. “Nada indica que sea así”, añadió. Imágenes de la prensa local mostraron las huellas de la explosión frente a un edificio de apartamentos.

La noche del 1 octubre se produjeron explosiones muy cerca de la misma embajada, probablemente provocadas por el lanzamiento de granadas. Según la fiscalía, dos jóvenes suecos, de 16 y 19 años, fueron puestos en prisión preventiva durante 27 días.

Dos soldados reservistas murieron este domingo en combate en la frontera con Líbano, y otro resultó “gravemente herido” en el mismo incidente, informó este lunes en dos comunicados el Ejército de Israel.

La primera víctima fue identificada como el sargento mayor Etay Azulay, de 25 años, miembro de la unidad de movilidad de combate de élite 5515. Según una investigación inicial fue alcanzado por un mortero.

Otros dos soldados resultaron gravemente heridos en el incidente en el que murió Azulay, dijo el Ejército sin dar más detalles al respecto, pero confirmando que ambos fueron trasladados a un hospital para recibir tratamiento.

Poco después, las fuerzas israelíes confirmaron que el oficial de la reserva Aviv Magen, de 43 años de edad (y también miembro de la unidad de movilidad de combate de élite 5515) sucumbió a sus heridas.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reafirmó este lunes su compromiso con el pueblo judío y con Israel para defenderse, el día en el que se cumple un año de los ataques de Hamás en territorio israelí que causaron más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y 251 secuestrados.

“Un año después, la vicepresidenta (Kamala) Harris y yo seguimos plenamente comprometidos con la seguridad del pueblo judío, la seguridad de Israel y su derecho a existir. Apoyamos el derecho de Israel a defenderse de los ataques de Hezbolá, Hamás, los hutíes e Irán”, apuntó en un comunicado.

Este lunes se cumple un año del ataque del grupo islamista palestino Hamás, el 7 de octubre de 2023, que provocó 1.200 fallecidos y 251 secuestrados -casi un centenar aún retenidos- en Israel.

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró este lunes en una reunión especial del Gobierno, en el aniversario de los ataques de Hamás, que Israel se encuentra inmersa en una “guerra de resurrección para garantizar que el 7 de octubre no vuelva a suceder”.

“Desde aquel día negro”, dijo el mandatario sobre el ataque, en el que unas 1.200 personas murieron y otras 251 fueron secuestradas, “estamos bajo ataque en siete frentes”.

El 8 de octubre, en apoyo a la población palestina, la milicia chií Hezbolá comenzó a atacar el norte de Israel desde Líbano. Con ella, paulatinamente los hutíes de Yemen, las resistencia islámica de Irak, las milicias proiraníes de Siria y, en dos ocasiones, Irán, lanzaron ataques contra el Estado hebreo.

Sumándoles las milicias palestinas de Cisjordania y a Hamás en Gaza, todos suman los siete frentes a los que alude Netanyahu.

El ejército israelí dijo el lunes que su fuerza aérea está lanzando ataques aéreos en todo el sur del Líbano contra posiciones de Hezbolá, mientras el país conmemora el aniversario de los ataques de Hamás del 7 de octubre.

“La Fuerza aérea israelí está llevando a cabo importantes bombardeos contra objetivos terroristas de Hezbolá en el sur del Líbano”, dijo el ejército en un comunicado.

Un niño palestino de 12 años murió este lunes tras recibir un disparo en el abdomen durante una redada israelí en el campamento de refugiados de Kalandia, al norte de Jerusalén, confirmó el Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina.

El joven, identificado como Hatem Sami Hisham Ghaith, sufrió una rotura intestinal, detalló el ministerio. Además, otras ocho personas resultaron heridas en la redada, según los sanitarios de la Media Luna Roja Palestina.

La agencia oficial de noticias palestinas, Wafa, explicó que unas 20 personas fueron detenidas durante la redada, que tuvo lugar al norte de Jerusalén, en territorio administrado por la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna en partes reducidas de Cisjordania ocupada.

Entre los heridos por munición real hay tres menores, mientras que una persona resultó herida en la cabeza por una bala recubierta de goma.

El papa Francisco criticó el lunes la “vergonzosa incapacidad” de la comunidad internacional para poner fin al conflicto en Oriente Medio, en el primer aniversario del letal ataque de Hamás en Israel.

“Hace un año, se encendió la mecha del odio, no fue apagada sino que explotó en una espiral de violencia, en la vergonzosa incapacidad de la comunidad internacional y de los países más poderosos para hacer callar las armas y poner fin a la tragedia de la guerra”, afirmó el pontífice en una carta abierta para los católicos de Oriente Medio.

Al menos ocho bomberos libaneses murieron en un bombardeo israelí contra su caserna, en una localidad del sur del país, fronteriza de Israel, indicó el lunes un funcionario local a AFP.

“Un bombardeo israelí alcanzó por la noche la caserna de Baraachit donde había 10 bomberos (...) Ocho cuerpos fueron extraídos de entre los escombros” de momento, afirmó Reda Achour, un responsable local. Desde el inicio de los enfrentamientos hace un año entre Israel y el movimiento islamista Hezbolá, más de 115 rescatistas y bomberos han muerto, según un balance de AFP a partir de datos oficiales libaneses.

La organización chií libanesa Hezbolá recordó los atentados de Hamás en territorio israelí del pasado 7 de octubre afirmando que “Israel es un cáncer que debe ser eliminado”, que “no tiene lugar ni en la región” ni dentro de su “tejido social, cultural y humano”.

Así lo indicó el grupo, bajo intenso ataque de Israel en las últimas semanas, en un comunicado difundido por la agencia oficial libanesa ANN, en el que calificó de “heroica” la operación terrorista que justo hace un año Hamás desató en territorio israelí y que dejó más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y 251 secuestrados.

Ese ataque fue, según Hezbolá, “una manifestación de la voluntad de Palestina para confrontar la agresión, la injusticia y la ocupación que pesa sobre su pueblo desde 1948″ y tendrá “efectos históricos y estratégicos en toda la región hasta que se alcance la justicia y los palestinos obtengan sus derechos legítimos en su tierra”.

Hezbolá señaló que pese a “la brutalidad y la agresión de la ocupación, que ha supuesto el martirio de decenas de miles de palestinos y la brutal destrucción sin precedentes de la Franja de Gaza”, la “agresiva entidad (Israel) ha demostrado que es frágil, y que es incapaz de sobrevivir y persistir sin el apoyo de los EE. UU”.

El presidente israelí, Isaac Herzog, instó el lunes al mundo a “apoyar a Israel” para alcanzar la paz, en momentos que el país conmemora el primer aniversario de los ataques de Hamás del 7 de octubre.

“El mundo debe darse cuenta y comprender que para cambiar el curso de la historia y alcanzar la paz, un futuro mejor para la región, debe apoyar a Israel en su batalla contra sus enemigos”, dijo Herzog en un comunicado.

El ejército israelí afirmó el lunes que al menos cuatro proyectiles fueron lanzados desde la Franja de Gaza minutos después de que el país comenzó a conmemorar los ataques del 7 de octubre del año pasado.

“Tras sonar las sirenas a las 06H31 (03H31 GMT) en varias comunidades cerca de la Franja de Gaza, se identificaron cuatro proyectiles que cruzaron desde el sur de la Franja de Gaza. Tres de los proyectiles fueron interceptados y otro cayó en una zona despoblada”, dijo el ejército en un comunicado.

Precisó que las sirenas sonaron también en Alta Galilea, norte de Israel, donde las fuerzas israelíes combaten al movimiento proiraní Hezbolá. Previamente, el lunes, el ejército dijo que había interceptado dos “objetivos aéreos sospechosos” lanzados desde el este.

.El Ejército israelí ordenó este lunes la evacuación de más de una veintena de localidades en el sur de Líbano por sexta vez desde el comienzo de su invasión, hace una semana, y, como en ocasiones anteriores, instó a la población desplazarse al norte del río Awali, más de 50 kilómetros al norte de la frontera.

En este caso, las órdenes afectan a las localidades de Sarbin, Marouhin, Shihin, Umm al Tut, Umm Tuta, Bustan, Al Zaloutiyeh, Yarin, Al Dahriyeh, Matmoura, Al Jabbin, Tayr Harfa, Abu Shash, Alma al Shaab, Al Naqoura, Ain Shama, Ras al Badah, Majdal Zoun, Al Mansouri, Al Maqsaba, Mazraat Bayut al Siyad, Al Samaiyeh, Rashidieh, Ain Baal, Al Bazouriyeh y Al Haniyeh.

Ayer, Israel mandó evacuar los pueblos de Houla, Mays al Jabal, Blida, Muhaibib, Shaqra, Baraisht, Majdal Salim, Qabrikha, Kounin, Beit Yahoun, Jamijma, Al Tayri, Bani Hayyan, Al Tamriyeh, Tulin, Deir Siryan, Al Qusayr, Baflia, Jabal al Adas, Bayad, Sarbin, Burj Rahhal, Ain Baal, Al Rashidiya y Haniya.

En total, las fuerzas israelíes han impuesto la evacuación de más de un centenar de localidades libanesas, incluida la ciudad de Nabatieh, una de las más importantes de la zona, y entre las más castigadas por los bombardeos israelíes de las últimas semanas.

En todos los casos Israel ha indicado a los civiles que se dirijan al norte del río Awali, ubicado a más de 50 kilómetros de la frontera.

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El Ejército israelí anunció este lunes 7 de octubre que ha lanzado un ataque contra “objetivos terroristas” en toda la Franja de Gaza para “frustrar amenazas inmediatas”, entre ellos un bombardeo contra un hospital, cuando se cumple un año del ataque terrorista de Hamás en Israel.

El portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee, indicó en X que las fuerzas de defensa israelíes atacaron plataformas de misiles de Hamás y “objetivos terroristas” en toda la Franja de Gaza para “frustrar amenazas inmediatas”, entre ellos un cohete que fue interceptado, detalló.

Asimismo, señaló que aviones de combate bombardearon lo que define como objetivos de Hamás en la Franja, horas después de que el Ejército anunciara que había llevado a cabo un “ataque preciso” contra un supuesto centro de operaciones del grupo islamista dentro del hospital “Shuhada al-Alqsa” en la Franja de Gaza.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió cumplir con los objetivos de la guerra contra Hamás en Gaza y contra Hezbolá en Líbano, que calificó de “misión sagrada”, en el primer aniversario del ataque más mortífero de la historia reciente del país.

Las ceremonias de conmemoración empezaron en Reim, el lugar del festival de música Nova donde al menos 370 personas murieron el 7 de octubre, con un minuto de silencio.

Otra ceremonia tuvo lugar en la noche en Tel Aviv, con familiares y amigos de las personas fallecidas o capturadas ese día por milicianos de Hamás, durante el sangriento ataque que desencadenó la guerra en Gaza.

Pero la guerra en Gaza y Líbano también se acompañó de una escalada entre Israel e Irán, aliado de Hamás y Hezbolá. Israel amenaza con tomar represalias tras el lanzamiento de 200 misiles el pasado 1 de octubre contra su territorio, desatando temores de una gran guerra regional.

Tras un año de una devastadora guerra, el jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, denunció el “sufrimiento indescriptible” de los rehenes de Gaza. Pero también subrayó que la guerra había reducido Gaza a un “mar irreconocible de escombros y un cementerio para decenas de miles de personas”.

Por su parte, Joe Biden y Kamala Harris pidieron este lunes paz en Oriente Medio y el fin de una guerra que podría afectar a las elecciones estadounidenses, mientras que el republicano Donald Trump llamó a “nunca olvidar esa pesadilla”.

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El candidato republicano Donald Trump hizo un llamado este lunes a los estadounidenses para que “no olviden nunca” el ataque del movimiento palestino Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, al honrar a las víctimas durante un acto de su campaña electoral.

“No debemos olvidar nunca la pesadilla de ese día”, dijo Trump ante varios cientos de sus seguidores en Florida. Al conmemorar el aniversario de los ataques, el candidato sostuvo que “no hubiesen ocurrido jamás si yo hubiese sido el presidente”.

Miles de personas se manifestaron en Buenos Aires en el primer aniversario del ataque de Hamás en suelo israelí el 7 de octubre, en un acto respaldado por el presidente Javier Milei que pidió por la liberación de los rehenes del movimiento palestino Hamás.

En el acto convocado por la embajada de Israel junto con organizaciones de la comunidad judía local, la más numerosa de América Latina con unos 300.000 integrantes, manifestantes con banderas israelíes y fotos con los rostros de los rehenes evocaron a las víctimas.

El ataque del 7 de octubre comportó la muerte de 1.206 personas en Israel, la mayoría civiles, según un recuento de AFP basado en cifras oficiales israelíes, que incluye a los muertos durante su cautiverio en la Franja de Gaza.

“No podía faltar, es una recordación de una de las barbaries que vivió el pueblo judío”, dijo a la AFP Daniel Krimer, un ingeniero de 70 años que se encontraba en Israel visitando a su hija cuando ocurrió el ataque.

“Fue para nosotros un golpe de repente de levantarnos y escuchar lo que había pasado, inimaginable”, recordó y señaló que desde aquel día es “mucho más escéptico de que se pueda llegar a algún acuerdo de paz”.

Entre los rehenes de Hamás había 21 argentinos, siete de los cuales siguen desaparecidos, según la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas.

“Tráiganlos a casa ya”, publicó este lunes en su cuenta de X el presidente argentino Javier Milei, en un mensaje escrito en inglés y en hebreo.

Argentina sufrió dos atentados contra la comunidad judía, en 1992 contra la sede de la embajada de Israel, que causó 29 muertos, y en 1994 contra el edificio de la mutual judía AMIA, el peor de la historia argentina, que dejó otros 85 muertos.

Más temprano, en la céntrica Plaza de Mayo de Buenos Aires, decenas de simpatizantes propalestinos exigieron el fin de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, que ha matado ya a más de 41.900 palestinos, mayoritariamente civiles, según datos del Ministerio de Salud de Gaza, que la ONU considera fiables.

“Estamos aquí para ser solidarios con el pueblo palestino, para denunciar las atrocidades que se están cometiendo contra ese pueblo por el Estado de Israel, que es un Estado genocida, que atenta contra la vida de un pueblo”, declaró Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, en la manifestación en la que flamearon banderas palestinas y se colocaron pancartas con nombres de las víctimas.

Miles de personas se manifestaron este lunes en Buenos Aires en el primer aniversario del ataque de Hamás en suelo israelí el 7 de octubre, en un acto respaldado por el presidente Javier Milei que pidió por la liberación de los rehenes del movimiento palestino Hamás.

En el acto convocado por la embajada de Israel junto con organizaciones de la comunidad judía local, la más numerosa de América Latina con unos 300.000 integrantes, manifestantes con banderas israelíes y fotos con los rostros de los rehenes evocaron a las víctimas.

“Estoy devastada por el dolor y el duelo” provocados el 7 de octubre, dijo la vicepresidenta y candidata demócrata a la Casa Blanca, antes de plantar un granado en el jardín de su residencia oficial. Acompañada por su marido Doug Emhoff, de confesión judía, Kamala Harris meditó un momento ante este árbol, símbolo de la esperanza y la virtud en la religión judía.

“No nos rendimos. Estamos haciendo todo lo que podemos por un acuerdo de alto el fuego y la liberación de los rehenes en Gaza”, dijo, tras recitar los nombres de los siete estadounidenses, “vivos o muertos”, que siguen retenidos en la Franja de Gaza.

Por su parte, tocado con una kipá negra, su rival republicano Donald Trump visitó la tumba de un rabino ultraortodoxo en Nueva York, donde participó en una oración.

“Las atrocidades (...) del 7 de octubre nunca habrían ocurrido si el presidente Trump siguiera en la Casa Blanca”, ha dicho su equipo de campaña en un comunicado. Es “imperativo”, añade, que Trump gane las elecciones para “poner fin al derramamiento de sangre causado por el régimen terrorista iraní, que hoy es más fuerte y más rico gracias a la debilidad y la incompetencia de la administración Biden-Harris”.

Según la agencia de noticias Al Jazeera, manifestantes a favor de Palestina marcharon en el campus de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York, coreando “Palestina libre, libre” en el primer aniversario de la guerra de Israel contra Hamás en Gaza.

Las protestas estudiantiles contra la guerra de Gaza comenzaron en el campus de Columbia en abril, inspirando campamentos similares en otras instituciones de Estados Unidos y más allá.

Minouche Shafik, la entonces presidenta de la Universidad de Columbia, renunció después de permitir que la policía de la ciudad de Nueva York ingresara al campus para despejar las protestas, lo que provocó la indignación de los manifestantes y algunos académicos y llamados a su destitución.

Ahora, cuando esos estudiantes manifestantes regresan para un nuevo año de aprendizaje, se enfrentan a un panorama transformado por las restricciones actualizadas, el aumento de las medidas de seguridad y el mayor escrutinio de los movimientos pro palestinos.

A las afueras del campus de la universidad estadounidense, también se reunieron manifestantes proisraelíes, que sostenían pancartas con los rostros y nombres de los cautivos y decían “Tráiganlos a casa ahora”.

El movimiento libanés Hezbolá afirmó este lunes que apuntó contra una base de la inteligencia militar israelí cerca de la ciudad de Tel Aviv.

El grupo, respaldado por Irán, indicó haber disparado “una andanada de cohetes contra la base Glilot de la unidad de inteligencia militar 8200, en las afueras de Tel Aviv”.

El ejército israelí indicó el lunes en la noche que se activaron las sirenas antiaéreas en el centro de Israel después de que se dispararan proyectiles desde Líbano.

“Después de que las sirenas sonaran en el centro de Israel, se identificaron varios lanzamientos de proyectiles que cruzaron a territorio israelí desde Líbano”, afirmó un comunicado castrense.

El ejército indicó que interceptó “algunos” de los cerca de cinco proyectiles lanzados y que los otros cayeron “en zonas deshabitadas”.

“Algunos fueron interceptados” por la fuerza aérea, “y los demás cayeron en zonas deshabitadas”, indicó un breve comunicado militar.

La agencia oficial libanesa Ani reportó nuevos bombardeos israelíes el lunes por la noche en la periferia sur de Beirut, después de que el ejército israelí instara a los habitantes a evacuar algunos sectores de esa área, bastión de Hezbolá.

El suburbio sur de Beirut, bombardeado por Israel desde el 23 de septiembre, “fue blanco de dos bombardeos”, indicó Ani, que había informado de seis bombardeos sucesivos anteriormente. Un corresponsal de AFP vio humaredas emergiendo de la periferia sur tras haber escuchado explosiones.

El movimiento libanés Hezbolá anunció el lunes 7 de octubre que prohibió a sus combatientes atacar soldados israelíes apostados “detrás de una posición militar de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en Líbano (FPNUL)”, para no poner a los cascos azules en peligro.

La FPNUL, desplegada en la frontera entre Israel y Líbano, dijo antes que estaba “profundamente preocupada por las recientes actividades del ejército israelí adyacentes” a una de sus posiciones cerca del pueblo fronterizo libanés de Maroun al Ras.

Hezbolá, respaldado por Irán, aseguró en un comunicado que sus combatientes “observaron el domingo movimientos no convencionales de las fuerzas del enemigo israelí detrás de una posición militar de la FPNUL” cerca de Maroun al Ras.

El grupo ordenó a sus combatientes “no intervenir ante estos movimientos para proteger la vida de los soldados de la FPNUL” y acusó Israel de “tratar de usar las fuerzas” de la ONU como “escudos humanos”.

La FPNUL consideró el domingo 6 de octubre “inaceptable que se ponga en peligro la seguridad de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU”. El sábado, exhortó a “Líbano y a Israel a aplicar la resolución del Consejo de Seguridad 1701, la única solución viable para restablecer la estabilidad en la región”.

Esta resolución, que fue aprobada al final de la guerra de 2006 entre Israel y el movimiento islamista libanés Hezbolá, estipula que solo las fuerzas de mantenimiento de la paz y el ejército libanés se desplieguen en el sur de Líbano, entre la frontera con Israel y el río Litani.

Prevé además la retirada de las fuerzas armadas no estatales, es decir de Hezbolá, que ha mantenido una presencia en el sur del país desde el final de la mencionada guerra.

Un hombre de 66 años y un niño de 12 murieron a consecuencia de operaciones militares israelíes en Cisjordania ocupada, anunció el ministerio de Salud de la Autoridad Palestina.

“Ziad Abu Jalil (66 años) fue martirizado tras ser atacado por las fuerzas de ocupación durante la intrusión en su casa en Doura, al sur de Hebrón”, afirmó el ministerio.

Contactado por AFP su hijo, Murad Abu Jalil, dijo que su padre había sido golpeado por soldados israelíes que entraron en la casa familiar para arrestar a su hermano.

“A las 3:00 a.m. hora local, las fuerzas de ocupación invadieron la casa de mi padre y quisieron arrestar a mi hermano. Mi padre intentó detenerlos, entonces lo golpearon dos veces en el pecho, luego lo empujaron y su pecho golpeó la puerta de la casa”. Relato el hijo y añadió que el hombre sucumbió a las heridas por la mañana.

Interrogado por la AFP sobre estas acusaciones, el ejército israelí se abstuvo de responder.

En una declaración separada, el Ministerio de Salud palestino anunció la muerte de un niño de 12 años, Hatem Ghaith, “por heridas críticas causadas por un incendio dentro del campamento de Qalandia”.

Residentes dijeron que el ejército israelí invadió al amanecer el campamento y se produjeron enfrentamientos. El ejército tampoco reaccionó a una consulta sobre estos incidentes.

En el último año al menos 703 palestinos han muerto en Cisjordania por disparos de soldados o colonos israelíes, según datos del Ministerio de Salud.

El Gobierno estadounidense subrayó este lunes su apoyo a los ataques de Israel contra infraestructuras del grupo chií Hezbolá en el Líbano, pero destacó que esa incursión, calificada de limitada por las autoridades israelíes, no debería extenderse en el tiempo.

“Apoyamos su capacidad de atacar a militantes y de degradar la infraestructura de Hezbolá, pero somos muy conscientes de las muchas ocasiones en el pasado en las que Israel ha participado en lo que parecían operaciones limitadas y ha permanecido durante meses o años”, dijo en una rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.

En última instancia ese no es el resultado que EE.UU. quiere ver, señaló el representante de la diplomacia estadounidense, destacando que Washington desea la plena implementación de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que entre otros puntos autoriza un aumento de la dotación de la Fuerza Provisional de Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL) para supervisar el cese de las hostilidades.

Su comparecencia coincide con el primer aniversario de los ataques del 7 de octubre del grupo islamista Hamás sobre Israel, día en que los milicianos palestinos mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a 251, y tras lo cual Israel emprendió una ofensiva militar sobre la Franja de Gaza que ha provocado ya, al menos, 41.900 víctimas mortales.

Horas después de que Israel anunciara que detuvo un misil “tierra a tierra” lanzado desde Yemen y dirigido al centro del país, el grupo proiraní de los hutíes reconoció la autoría en este ataque.

El Gobierno de Colombia insistió este lunes en un cese al fuego en Gaza al cumplirse un año del “terrible acto, ataque terrorista” de Hamás contra Israel del 7 de octubre que dio inicio a la guerra.

“Colombia alza su voz por un cese al fuego inmediato; la liberación de todos los rehenes y secuestrados; la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, y que se pueda dar solución política entre los dos estados”, expresó el canciller, Luis Gilberto Murillo, en una declaración grabada desde Alemania.

Después de un año de aquel día, la guerra en Gaza, donde según las autoridades gazatíes ya han muerto casi 42.000 personas, continúa y 97 rehenes israelíes siguen en Gaza, de los que el Ejército estima que al menos una treintena están muertos.

“El 7 de octubre Hamás cometió ese terrible acto, (ese) ataque terrorista a Israel, que terminó de desatar la guerra en Gaza que ya deja más de 41.000 personas asesinadas, entre ellos mujeres, ancianos, jóvenes y adolescentes, y cerca de 20.000 niños y niñas. Eso es inaceptable”, expresó Murillo.

El Ejército de Israel declaró este lunes otras cinco poblaciones de la región norteña israelí de Galilea “zonas militares cerradas”, como ya había hecho en tres ocasiones previas desde el inicio de la invasión terrestre del Líbano la madrugada del martes 1 de octubre.

La nueva zona militar incluye Rosh HaNikra, Shlomi, Hanita, Admit y Aramsha, cerca de la costa mediterránea, según un comunicado emitido por el Ejército en su canal en Telegram, que especifica que la entrada a ellas queda ahora estrictamente prohibida.

El Ejército israelí impuso este domingo la misma medida de cierre en los kibuts de Manara, Yiftah y Malkiah, situados en la región norteña de la Alta Galilea, más al este.

El pasado 1 de octubre, el Ejército israelí denominó también “zona militar cerrada” las comunidades agrícolas fronterizas israelíes de Dovev, Tivbon y Malkia, todas en torno a un kilómetro de distancia de la divisoria con el Líbano y que llevan casi un año evacuadas debido al fuego cruzado.

El brazo armado del movimiento islamista palestino Hamás dijo el lunes que librará una “larga batalla de desgaste” contra Israel, un año después de su letal ataque del 7 de octubre contra territorio israelí.

“Nuestra elección es seguir con el enfrentamiento en una batalla de desgaste larga, dolorosa y costosa para el enemigo”, afirmó el portavoz de las brigadas Ezedin al Qassam, Abu Obeida, en un vídeo difundido por el canal catarí Al Jazeera.

Afirmó que el ataque perpetrado hace un año por el movimiento islamista palestino contra Israel fue “preventivo”, destinado a frustrar un plan israelí que, según él, incluía “un gran ataque contra la resistencia en Gaza”, y cuya preparación había llegado a “sus etapas finales”. También destacó los riesgos que pesan sobre los 97 rehenes que aún se encuentran en Gaza, 34 de los cuales fueron declarados muertos por el ejército israelí, de las 251 personas secuestradas ese día.

El asesinato de unas 1.200 personas en Israel por parte de Hamás y otros grupos armados palestinos hace un año fue “un crimen de guerra y posiblemente contra la humanidad”, pero también lo fue la respuesta israelí en los últimos 12 meses, que ha causado 42.000 muertes, entre ellas las de 17.000 niños, afirmaron una treintena de expertos de la ONU en un comunicado conjunto.

La declaración con motivo del aniversario de los ataques subrayó que la comunidad internacional, a través de mecanismos judiciales independientes, “debe investigar de forma exhaustiva e imparcial todas estas graves violaciones, establecer la cadena de responsabilidades, procesar y castigar a los perpetradores”.

“Las partes en conflicto deben brindar un acceso completo a las evidencias para investigar los hechos y garantizar la rendición de cuentas”, afirmaron los expertos. En este sentido, su comunicado hizo un llamamiento al acceso sin restricciones a Israel y los territorios palestinos ocupados para investigar estas violaciones de la ley internacional, “particularmente los asesinatos arbitrarios, desapariciones forzadas y torturas”.

Reiteraron su llamamiento a que la comunidad internacional ponga fin a la transferencia de armamento a las partes en conflicto, con el fin de evitar su responsabilidad en los crímenes de guerra y contra la humanidad que pueden haberse cometido.

El Ejército israelí ordenó este lunes la evacuación forzosa de las costas libanesas al sur del río Awali, ubicado a más de 50 kilómetros de la frontera entre Israel y Líbano, mientras prosigue su ofensiva contra el grupo chií Hezbolá en el país.

“Las actividades de Hezbolá obligan al Ejército a actuar en su contra y el Ejército actuará pronto en la zona marítima contra las actividades terroristas de Hezbolá”, dijo en un mensaje el portavoz en árabe de las fuerzas israelíes, Avichay Adraee.

Adraee solicitó a los civiles, incluidos bañistas o pescadores, que eviten estar en el agua frente a las costas libanesas o incluso en las playas ubicadas al sur del Awali.

El movimiento islamista libanés Hezbolá dijo haber lanzado, por segunda vez este lunes, cohetes contra los alrededores de la ciudad de Haifa, en el norte Israel.

Hezbolá dijo que disparó una “gran salva de cohetes” contra los alrededores de la ciudad por la tarde.

Estados Unidos ha destinado una cifra récord de al menos 17.900 millones de dólares en ayuda militar a Israel desde el inicio de la guerra en Gaza, tras el ataque del grupo islamista Hamás del 7 de octubre de 2023, del que este lunes se cumple un año.

Esta cantidad supone el mayor desembolso realizado por EE.UU. desde que comenzó su programa de asistencia militar a Israel en 1959, según detalla en un informe publicado este lunes el centro de investigación no partidista ‘Costs of War Project’ de la Universidad Brown.

Los investigadores advierten que la cifra es conservadora y podría ser superior, ya que la Administración de Joe Biden ha realizado al menos 100 acuerdos armamentísticos con Israel desde octubre de 2023 por valores inferiores al umbral que requiere ser notificado al Congreso.

Del total de la ayuda, 4.500 millones de dólares se han destinado a defensa antimisiles y 1.200 millones al sofisticado sistema de defensa antiaérea “Rayo de Hierro”, que utiliza tecnología láser y cuya instalación está prevista para 2025.

La situación de los rehenes israelíes retenidos en la Franja de Gaza es “muy difícil”, indicó el lunes el brazo armado del movimiento islamista Hamás, que los capturó hace exactamente un año.

“Decimos (a los israelíes) que habrían podido recuperar vivos a todos sus rehenes hace un año (...), la situación de los rehenes restantes, psicológica y de salud, se ha vuelto muy difícil”, declaró su portavoz Abu Obeida, en un vídeo.

Israel comunicó que identificó un misil “tierra a tierra” lanzado desde Yemen, en donde operan los hutíes, y que fue interceptado con éxito.

Francia considera que “la fuerza por sí sola” no es suficiente para garantizar la seguridad de Israel, según declaró en Jerusalén el canciller francés, Jean-Noël Barrot, en el primer aniversario del ataque sin precedentes de Hamás a ese país.

“La fuerza por sí sola no alcanza para garantizar la seguridad de Israel”, afirmó Barrot en una conferencia de prensa, después de una reunión con su par israelí, Israel Katz.

“Para traer por fin a los rehenes de vuelta con sus seres queridos y permitir el regreso de los desplazados del Norte a sus casas tras un año de guerra, ha llegado el tiempo de la diplomacia”, insistió. El ministro de Relaciones Exteriores francés destacó la “pesada responsabilidad” de Hezbolá en la situación que atraviesa Líbano.

Los muertos en la Franja de Gaza superaron hoy los 41.900 al cumplirse el primer aniversario de la guerra en el enclave palestino, que comenzó el 7 de octubre de 2023 tras los atentados de Hamás en las comunidades del sur de Israel, que dejaron unos 1.200 muertos.

La ofensiva israelí se ha cobrado la vida de 41.909 personas -casi 17.000 menores- y 97.303 han resultado heridos, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás.

En las últimas 24 horas, las autoridades gazatíes reportaron 39 muertos y 137 heridos en el enclave, donde la guerra prosigue tras un año de combates, con 728 bajas entre las tropas israelíes, incluyendo en los ataques del 7 de octubre pasado.

El Ministerio también denunció que el 65 % de las instituciones de salud están dañadas y con un ratio de ocupación del 300 %, especialmente en unidades de cuidados intensivos, lo que hace muy difícil la atención sanitaria, incluyendo a 50.000 embarazadas y 12.000 pacientes de cáncer.

La fuerza aérea israelí llevó a cabo un bombardeo este lunes cerca del aeropuerto internacional de Beirut, que sigue operativo, en la periferia sur de la capital libanesa, indicó una fuente de seguridad a AFP.

Por su parte, el ejército israelí indicó que había realizado un “bombardeo selectivo” en un suburbio del sur de Beirut, donde lleva dos semanas atacando.

Aviones israelíes bombardearon el lunes “una treintena de pueblos” en el sur de Líbano cerca de la frontera con Israel, anunció la agencia oficial de noticias libanesa ANI.

Se produjeron “series de ataques” en varias otras zonas del sur libanés, añadió ANI.

Una explosión ocurrió la madrugada del lunes a unos 500 metros de la embajada de Israel en Dinamarca, informó la policía de Copenhague, cinco días después de un ataque al edificio diplomático.

“Estamos tratando de determinar si podría haber un vínculo con el incidente en la embajada de Israel”, dijo a los periodistas la inspectora de policía Trine Møller. “Nada indica que sea así”, añadió. Imágenes de la prensa local mostraron las huellas de la explosión frente a un edificio de apartamentos.

La noche del 1 octubre se produjeron explosiones muy cerca de la misma embajada, probablemente provocadas por el lanzamiento de granadas. Según la fiscalía, dos jóvenes suecos, de 16 y 19 años, fueron puestos en prisión preventiva durante 27 días.

Dos soldados reservistas murieron este domingo en combate en la frontera con Líbano, y otro resultó “gravemente herido” en el mismo incidente, informó este lunes en dos comunicados el Ejército de Israel.

La primera víctima fue identificada como el sargento mayor Etay Azulay, de 25 años, miembro de la unidad de movilidad de combate de élite 5515. Según una investigación inicial fue alcanzado por un mortero.

Otros dos soldados resultaron gravemente heridos en el incidente en el que murió Azulay, dijo el Ejército sin dar más detalles al respecto, pero confirmando que ambos fueron trasladados a un hospital para recibir tratamiento.

Poco después, las fuerzas israelíes confirmaron que el oficial de la reserva Aviv Magen, de 43 años de edad (y también miembro de la unidad de movilidad de combate de élite 5515) sucumbió a sus heridas.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reafirmó este lunes su compromiso con el pueblo judío y con Israel para defenderse, el día en el que se cumple un año de los ataques de Hamás en territorio israelí que causaron más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y 251 secuestrados.

“Un año después, la vicepresidenta (Kamala) Harris y yo seguimos plenamente comprometidos con la seguridad del pueblo judío, la seguridad de Israel y su derecho a existir. Apoyamos el derecho de Israel a defenderse de los ataques de Hezbolá, Hamás, los hutíes e Irán”, apuntó en un comunicado.

Este lunes se cumple un año del ataque del grupo islamista palestino Hamás, el 7 de octubre de 2023, que provocó 1.200 fallecidos y 251 secuestrados -casi un centenar aún retenidos- en Israel.

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró este lunes en una reunión especial del Gobierno, en el aniversario de los ataques de Hamás, que Israel se encuentra inmersa en una “guerra de resurrección para garantizar que el 7 de octubre no vuelva a suceder”.

“Desde aquel día negro”, dijo el mandatario sobre el ataque, en el que unas 1.200 personas murieron y otras 251 fueron secuestradas, “estamos bajo ataque en siete frentes”.

El 8 de octubre, en apoyo a la población palestina, la milicia chií Hezbolá comenzó a atacar el norte de Israel desde Líbano. Con ella, paulatinamente los hutíes de Yemen, las resistencia islámica de Irak, las milicias proiraníes de Siria y, en dos ocasiones, Irán, lanzaron ataques contra el Estado hebreo.

Sumándoles las milicias palestinas de Cisjordania y a Hamás en Gaza, todos suman los siete frentes a los que alude Netanyahu.

El ejército israelí dijo el lunes que su fuerza aérea está lanzando ataques aéreos en todo el sur del Líbano contra posiciones de Hezbolá, mientras el país conmemora el aniversario de los ataques de Hamás del 7 de octubre.

“La Fuerza aérea israelí está llevando a cabo importantes bombardeos contra objetivos terroristas de Hezbolá en el sur del Líbano”, dijo el ejército en un comunicado.

Un niño palestino de 12 años murió este lunes tras recibir un disparo en el abdomen durante una redada israelí en el campamento de refugiados de Kalandia, al norte de Jerusalén, confirmó el Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina.

El joven, identificado como Hatem Sami Hisham Ghaith, sufrió una rotura intestinal, detalló el ministerio. Además, otras ocho personas resultaron heridas en la redada, según los sanitarios de la Media Luna Roja Palestina.

La agencia oficial de noticias palestinas, Wafa, explicó que unas 20 personas fueron detenidas durante la redada, que tuvo lugar al norte de Jerusalén, en territorio administrado por la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna en partes reducidas de Cisjordania ocupada.

Entre los heridos por munición real hay tres menores, mientras que una persona resultó herida en la cabeza por una bala recubierta de goma.

El papa Francisco criticó el lunes la “vergonzosa incapacidad” de la comunidad internacional para poner fin al conflicto en Oriente Medio, en el primer aniversario del letal ataque de Hamás en Israel.

“Hace un año, se encendió la mecha del odio, no fue apagada sino que explotó en una espiral de violencia, en la vergonzosa incapacidad de la comunidad internacional y de los países más poderosos para hacer callar las armas y poner fin a la tragedia de la guerra”, afirmó el pontífice en una carta abierta para los católicos de Oriente Medio.

Al menos ocho bomberos libaneses murieron en un bombardeo israelí contra su caserna, en una localidad del sur del país, fronteriza de Israel, indicó el lunes un funcionario local a AFP.

“Un bombardeo israelí alcanzó por la noche la caserna de Baraachit donde había 10 bomberos (...) Ocho cuerpos fueron extraídos de entre los escombros” de momento, afirmó Reda Achour, un responsable local. Desde el inicio de los enfrentamientos hace un año entre Israel y el movimiento islamista Hezbolá, más de 115 rescatistas y bomberos han muerto, según un balance de AFP a partir de datos oficiales libaneses.

La organización chií libanesa Hezbolá recordó los atentados de Hamás en territorio israelí del pasado 7 de octubre afirmando que “Israel es un cáncer que debe ser eliminado”, que “no tiene lugar ni en la región” ni dentro de su “tejido social, cultural y humano”.

Así lo indicó el grupo, bajo intenso ataque de Israel en las últimas semanas, en un comunicado difundido por la agencia oficial libanesa ANN, en el que calificó de “heroica” la operación terrorista que justo hace un año Hamás desató en territorio israelí y que dejó más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y 251 secuestrados.

Ese ataque fue, según Hezbolá, “una manifestación de la voluntad de Palestina para confrontar la agresión, la injusticia y la ocupación que pesa sobre su pueblo desde 1948″ y tendrá “efectos históricos y estratégicos en toda la región hasta que se alcance la justicia y los palestinos obtengan sus derechos legítimos en su tierra”.

Hezbolá señaló que pese a “la brutalidad y la agresión de la ocupación, que ha supuesto el martirio de decenas de miles de palestinos y la brutal destrucción sin precedentes de la Franja de Gaza”, la “agresiva entidad (Israel) ha demostrado que es frágil, y que es incapaz de sobrevivir y persistir sin el apoyo de los EE. UU”.

El presidente israelí, Isaac Herzog, instó el lunes al mundo a “apoyar a Israel” para alcanzar la paz, en momentos que el país conmemora el primer aniversario de los ataques de Hamás del 7 de octubre.

“El mundo debe darse cuenta y comprender que para cambiar el curso de la historia y alcanzar la paz, un futuro mejor para la región, debe apoyar a Israel en su batalla contra sus enemigos”, dijo Herzog en un comunicado.

El ejército israelí afirmó el lunes que al menos cuatro proyectiles fueron lanzados desde la Franja de Gaza minutos después de que el país comenzó a conmemorar los ataques del 7 de octubre del año pasado.

“Tras sonar las sirenas a las 06H31 (03H31 GMT) en varias comunidades cerca de la Franja de Gaza, se identificaron cuatro proyectiles que cruzaron desde el sur de la Franja de Gaza. Tres de los proyectiles fueron interceptados y otro cayó en una zona despoblada”, dijo el ejército en un comunicado.

Precisó que las sirenas sonaron también en Alta Galilea, norte de Israel, donde las fuerzas israelíes combaten al movimiento proiraní Hezbolá. Previamente, el lunes, el ejército dijo que había interceptado dos “objetivos aéreos sospechosos” lanzados desde el este.

.El Ejército israelí ordenó este lunes la evacuación de más de una veintena de localidades en el sur de Líbano por sexta vez desde el comienzo de su invasión, hace una semana, y, como en ocasiones anteriores, instó a la población desplazarse al norte del río Awali, más de 50 kilómetros al norte de la frontera.

En este caso, las órdenes afectan a las localidades de Sarbin, Marouhin, Shihin, Umm al Tut, Umm Tuta, Bustan, Al Zaloutiyeh, Yarin, Al Dahriyeh, Matmoura, Al Jabbin, Tayr Harfa, Abu Shash, Alma al Shaab, Al Naqoura, Ain Shama, Ras al Badah, Majdal Zoun, Al Mansouri, Al Maqsaba, Mazraat Bayut al Siyad, Al Samaiyeh, Rashidieh, Ain Baal, Al Bazouriyeh y Al Haniyeh.

Ayer, Israel mandó evacuar los pueblos de Houla, Mays al Jabal, Blida, Muhaibib, Shaqra, Baraisht, Majdal Salim, Qabrikha, Kounin, Beit Yahoun, Jamijma, Al Tayri, Bani Hayyan, Al Tamriyeh, Tulin, Deir Siryan, Al Qusayr, Baflia, Jabal al Adas, Bayad, Sarbin, Burj Rahhal, Ain Baal, Al Rashidiya y Haniya.

En total, las fuerzas israelíes han impuesto la evacuación de más de un centenar de localidades libanesas, incluida la ciudad de Nabatieh, una de las más importantes de la zona, y entre las más castigadas por los bombardeos israelíes de las últimas semanas.

En todos los casos Israel ha indicado a los civiles que se dirijan al norte del río Awali, ubicado a más de 50 kilómetros de la frontera.

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