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Como estaba previsto, la Fiscalía General de la Nación acusó formalmente, mediante escrito de acusación, a Paul Naranjo Calvo y Julián Ortegón Mosquera como presuntos coautores de feminicidio agravado por la muerte de la joven Ana María Castro, de 21 años, ocurrido el 5 de marzo de 2020.
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En el documento, el fiscal Carlos Javier Gutiérrez Rojas -que llevará el caso en la etapa de juicio- aseguró que la muerte de Castro tuvo su origen en un “disgusto” que tuvieron Naranjo y Ortegón con la joven fallecida por haberse besado con Mateo Reyes, a quien, dice la acusación, bajaron del vehículo en el que se transportaban en la calle 80 con Carrera 69P.
Según el ente acusador, después de haber bajado a Reyes, Ana María les habría reclamado por su actitud, ante lo cual los acusados la lanzaron “del vehículo cuando aún este se encontraba en movimiento, cayendo esta al pavimento de la vía pública”.
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El fiscal Gutiérrez llamó a 15 testigos de cargo, entre los que se encuentran Nidia Romero, madre de Ana María: María Camila Fajardo, exnovia de Julián Ortegón; y a Mateo Reyes, quien fue visto en el lugar de los hechos cuando la joven yacía en el asfalto de la calle 80.
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Hasta ahora, los dos imputados por este presunto feminicidio se han declarado inocentes y pesa sobre ellos una medida de aseguramiento en establecimiento carcelario.
