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Horror y conmoción en Bogotá por el asesinato de la niña Yuliana Andrea, de 7 años, reportada como desaparecida este 4 de diciembre y hallada muerta en la noche de este domingo al interior de un apartamento del norte de la ciudad con aparentes signos de tortura y violencia sexual.
A las 9:00 am cuando las autoridades conocieron la denuncia de los padres de familia sobre la desaparición de la menor en el barrio Bosque Calderón, de la localidad de Chapinero, el Gaula de la Policía se hizo cargo del caso y tras revisar cámaras de seguridad del último lugar donde fue vista la niña determinaron que había sido raptada en una camioneta gris.
Al realizar el respectivo seguimiento, a las 7:30 pm dieron con el paradero del vehículo particular en un conjunto residencial del barrio El Chicó. Al ingresar al apartamento del dueño, un arquitecto de 38 años identificado como Rafael Uribe Noguera, fue hallado el cuerpo sin vida de la menor con señales de tortura y abuso sexual.
Las autoridades no encontraron al presunto responsable en el apartamento al parecer porque éste había sido trasladado a la Clínica Vascular Navarra tras una aparente sobredosis de alucinógenos.
A las afueras del centro hospitalario se encuentran miembros de la Policía custodiando el lugar para evitar la fuga del presunto responsable de este atroz crimen.
Entre tanto, la madre de Yuliana Andrea tuvo que ser hospitalizada al conocer la trágica noticia.
Por su parte, el general Hoover Penilla, comandante de la Policía de Bogotá, ofreció este lunes una rueda de prensa para detallar los primeros indicios del hecho. Según el uniformado, siete horas después del rapto ya contaban con pistas de dónde se encontraba la menor. Penilla no confirmó si la niña fue víctima de abuso sexual y aseguró que Medicina Legal determinará las causas de su muerte.
“Esta es una situación compleja y lamentable. Sobre el supuesto responsable sabemos que es una persona de 38 años, de profesión arquitecto. En un inmueble propiedad de su familia fue donde fue hallada la menor. Se encuentra recluido en un centro asistencial por una crisis y aún no hay orden de captura en su contra, pero sí está bajo custodia y en proceso de judicialización, ello porque queremos tener toda la claridad y precisión para que no haya vicios de forma que pueda usar a su favor”, explicó el comandante de la Policía de Bogotá, detallando además que la familia de la menor había llegado hace cuatro meses a la ciudad, procedente del Cauca, en búsqueda de nuevas oportunidades.