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Esta semana, tras la publicación en el periódico de un artículo en el que se intentaba probar o descartar la autenticidad de la imagen del cuarto de máquinas que circula por internet, sin mucho éxito para tristeza nuestra, alguien nos habló sobre Rafael Zarama, un ingeniero industrial graduado de la Universidad de los Andes, trabajador independiente, que desde mayo del año pasado cuando se desató la emergencia de Hidroituango comenzó a estudiar el problema por su cuenta. El asunto se le fue convirtiendo en una obsesión a la que le ha dedicado una buena parte de su tiempo libre. (Vea el primer artículo sobre este tema titulado: La foto de la casa de máquinas de Hidroituango: ¿es o no es real?).
Juiciosamente, Zarama buscó y buscó hasta encontrar planos oficiales del proyecto y, apartir de ellos, construyó modelos virtuales en 3D usando un programa gratuito de Google que se llama SketchUp. En Twitter, Zarama ha sido un entusiasta ciudadano discutiendo y analizando detalles del proyecto. Zarama tiene una interesante teoría sobre todo este enredo.
Él no duda de la veracidad de la foto. En su casa, frente al computador en que reconstruyó minuciosamente la casa de máquinas de Hidroituango, con medidas a escala, esgrime un argumento sencillo:
- ¿Para qué haría la empresa un render? Si uno hace un render para engañar lo haría para mostrar las cosas como uno quiere. Pero esta imagen nos está diciendo varias cosas interesantes de la casa de máquinas. Nos está mostrando un posible derrumbe, unas columnas rotas y la ausencia de un edificio.
Reconstruir la casa de máquinas le costó "una trasnochadita". Pero ahora que tiene ese modelo virtual puede jugar a probar hipótesis. Con prudencia, Zarama sabe que estamos en el terreno de la especulación, y más que afirmaciones categóricas lo que propone son preguntas. A continuación un mapa general del cuarto de máquinas para ubicarnos. La casa tiene dos galerías: norte y sur. En la mitad está la entrada principal por la que caben hasta camiones. La foto para Zarama está claro que se tomó de norte a sur. De hecho, ayer en la noche EPM lo confirmó en un comunicado. Esto aclara las dudas de algunas personas sobre por qué los pernos de la imagen aparecen a la derecha y no a la izquierda. Otras imágenes que conocíamos habían sido tomadas de sur a norte y por la simetría de la construcción generaban confusión.
Estando claro que la foto se tomó desde el costado norte, fíjese en la siguiente imagen. Notará que en ese punto fue construido un edificio que tiene casi la altura de la caverna, que es 49 metros. Ese es el único punto del que podía ser tomada la fotografía y corresponde a la declaración de ayer de EPM.
Una vez Zarama tuvo claro el punto desde el que se tomó la imagen, intentó hacer lo mismo: tomar una foto parecida desde dentro de su modelo del cuarto de máquinas. Y aquí ocurrió el primer hallazgo interesante. Cree que la única posibilidad de tomar una foto similar es si el edificio no existe y la foto se toma desde la entrada de la galería. La periodista Claudia Julieta Duque, una de las primeras en cuestionar la veracidad de la foto planteó este mismo problema.
La única posibilidad de lograr la foto de acuerdo a la hipótesis de Zarama es que el edificio que debería estar ahí no esté. Si se tomara desde el borde de esa plataforma no coincidirían las columnas ni los ángulos de la foto. Si aceptamos que la foto es real, porque ha sido difícil confirmar a través de otro tipo de análisis su veracidad absoluta o falsedad (algunos opinadores piden un acto de fe en las palabras de EPM y otros un acto de esceptismo absoluto en las palabras de EPM), la imagen plantea tres preguntas sobre la salud del cuarto de máquinas en este punto. La primera es si se derrumbó ese edificio.
La segunda pregunta: ¿Colapsaron las primeras columnas de norte a sur? La imagen nos muestra una columna partida. Es la columna que está justo después de uno de los túneles de entrada por los que estaba pasando agua a presión. Y en el costado opuesto, donde también falta esa columna, la montaña se ve un poco rasgada. Posible señal del chorro de agua que golpeaba ese lugar.
Pero la atención de Zarama se concentró en otro detalle importante de la imagen del que no se ha hablado hasta ahora: atrás de la grúa, donde debería verse la galería sur hay algo tapando la vista. ¿Un derrumbe? Quien se fije con cuidado en las columnas más lejanas, notará que su altura se va recortando de forma escalonada. Como si al lado tuvieran un gran montículo de tierra. El reflejo en el agua de las columnas anteriores desaparece. Ayer, John Maya, vicepresidente de negocios de EPM, dijo ante un grupo de periodistas entre ellos uno de Caracol Televisión que ya “se metió por allá un dron y encontramos nuevamente que la casa de máquinas está en relativa muy buenas condiciones, relativa porque todavía no sabemos el piso, pero lo que es la bóveda y los hastiales están en pie, tanto la parte norte, como la parte sur”.
Toda la especulación sobre la fotografía se habría evitado con una comunicación más trasparente y directa por parte de EPM. La importancia y la curiosidad que desató la imagen se explica muy fácil: despúes de casi un año de la serie de errores que llevaron a esta situación, muchas personas quieren saber la salud del proyecto y de su cuarto de máquinas. Muchas decisiones dependerán de eso. También la veracidad de la información que se hace pública.
En este punto, reuniendo los análisis de los astrofísicos Juan Diego Soler y Jorge Zuluaga, junto los de animadores 3D y otros ingenieros, más las pistas que aporta Zarama, así como la reafirmación de EPM en su comunicado, sería razonable pensar que la foto es real. Desafortunadamente la foto en sí misma nunca nos reveló una clave incuestiobale sobre su veracidad o falsedad, pero el modelo de Zarama parece inclinar la balanza y como él mismo dice: ¿Quién se va a inventar un render para mostrar que se le cayó un edificio, se le rompieron unas columnas y tiene un derrumbe en lo que debería ser la entrada principal? La importancia que tenga esto para la recuperación del proyecto, si es fácil o compleja, así como otras afectaciones tal vez nadie las sepa en este punto de la historia. Será interesante saber, cuando EPM haga una evaluación total del cuarto de máquinas, qué tan exactas resultaron las proyecciones de Zarama.
Lo que sigue sin estar claro es la forma en que tomaron la foto. EPM primero dijo que no sabía quién había tomado la foto y en su última comunicación acepta que sí sabe, dice que es "una copia", insiste en que fue un celular y "un reflector" .
"La falta de claridad desde el principio ha sido algo complicado. Para llegar al fondo científico del asunto, ya sería meterse con los algoritmos de procesamiento de imagen de los celulares alta gama de hoy en día", responde Santiago Ortega, de la Escuela de Ingeniería de Antioquia.
Para el astrofísico Jorge Zuluaga, de la Universidad de Antioquia, resolver la duda sobre el celular implicaría tomar fotos en condiciones similares para ver el resultado. "Una lástima que sea necesario hacer casi una investigación científica para responder una pregunta que sus autores podrían responder sin demora. Es una lástima la desconfianza que hay sobre EPM. Juzgando todos los factores yo no creo que sea un render", escribió en su cuenta de Twitter.
Para Juan Diego Soler, astrofísico colombiano, los celulares de última generación y de gama más alta ofrecen mejores herramientas para fotos en escenarios oscuros pero no toda la profundidad de campo que vemos en esta imagen. Si la foto fue tomada con un reflector, "igual produce sombras y todo lo que habíamos visto como sospechos en la otra imagen reaparece. "Pero mantengo mi posición en que la imagen que analizamos si es real esta altamente modificada digitalmente", comenta.
EPM ha dicho que se pronunciará "sobre la situación de la casa de máquinas y los planes para su recuperación cuando disponga de todos los elementos técnicos".