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A Santiago García las responsabilidades siempre se le multiplicaron entre un acto y otro. El guión inicial indicaba que su rol iba hasta la realización de una misiva con la que Colombia celebraba el Día Mundial del Teatro, el 27 de marzo de 2012.
El encargo se alargó cuando el Ministerio de Cultura estableció que él sería la figura homenajeada durante esa conmemoración y que varias compañías juveniles habían preparado una jornada de lectura dramática de Guadalupe años sin cuenta, una de las máximas creaciones del Teatro La Candelaria, entidad que fundó en 1966.
“Nosotros, los hombres y mujeres de teatro colombiano, sabemos que es posible hablar de lo que nos duele y de lo que nos alegra y que también se puede, como en la escena, entender los conflictos", comentó García alrededor del homenaje que habían preparado sorpresivamente en su honor.
Casi de manera simultánea a ese tributo, se conoció la noticia de que Santiago García había sido designado como Embajador Mundial del Teatro por el Instituto Internacional de Teatro (ITI) de la UNESCO, gracias a una postulación realizada por el Centro Colombiano de la ITI y el propio ministerio.
Se barajaron, en ese entonces, varios nombres y en reunión celebrada en París, el Comité Ejecutivo emitió la declaratoria firmada por su máximo dirigente Tobías Binancone. “Estamos muy felices de que Santiago García, un reconocido artista colombiano y gran inspiración para los colegas de la red ITI, sea el nuevo embajador del teatro para el mundo”, comentó en su momento Binancone.
"Lo hombres y mujeres de teatro tenemos claro nuestros dolores porque hemos conformado grupos y públicos, hemos sabido convivir entre diferentes y hemos tramitado las divergencias en la creación, un lugar sagrado y misterioso que permite recrear la vida y por lo tanto contribuir a transformarla”, afirmó García un poco después de saber que había sido nombrado Embajador Mundial del Teatro.
La carrera actoral de Santiago García comenzó en 1957 en Bogotá, con el director japonés SekiSano; para después continuar su formación en la Universidad de Praga, en el Actor's Studio de Nueva York y; en 1963, y en la Universidad de Teatro de las Naciones en Vincennes (Francia).
García fue cofundador, en 1958, de El Búho, y posteriormente, en 1966, junto con artistas e intelectuales de la capital, fundó la Casa de la Cultura, hoy Teatro La Candelaria, entidad de la que siempre estuvo a la cabeza.
De su pluma nacieron algunas de las más reconocidas piezas montadas por su compañía. Nosotros los comunes (1972), La ciudad dorada (1973), Guadalupe años sin cuenta (1975), y Los diez días que estremecieron al mundo (1977) hacen parte de la historia de las artes escénicas en Colombia y en ellas, Santiago García, desde sus múltiples oficios en las tablas, se dedicó a profundizar en la realidad social del país.
"El teatro colombiano está de luto con la muerte del gran actor y director Santiago García. Fue un faro que, durante muchas décadas, iluminó y guió a muchas jóvenes embarcaciones teatrales de Colombia, Latinoamérica y el Mundo. Su legado coherente poli/ético y estético será siempre un referente para las nuevas generaciones. En estos días oscuros de confinamiento e incertidumbre la fuerza de Santiago, apóstol y adalid de la “creación colectiva”, nos inspira para encontrar colectivamente una salida a este laberinto y a esta encrucijada sin precedentes en que se encuentra la Humanidad", expresó
Álvaro Restrepo, director de El Colegio del Cuerpo.
@mincultura lamenta el fallecimiento de Santiago García, actor, dramaturgo y director. El maestro fue pionero del teatro en el país, y considerado como uno de los grandes teóricos y prácticos de la escena contemporánea. #PorSiempreMaestroGarcia pic.twitter.com/3y8qLXjG0D
— MinCultura Colombia (@mincultura) March 23, 2020